El fin de la semana anterior los mexicanos estamos presenciando una fuerte cargada pero en contra de quien desde el inicio de las precampañas electorales hacía la Presidencia de la República, ha venido sosteniéndose con gran ventaja sobre los dos secundarios candidatos, de tal manera que Andrés Manuel López Obrador, desde el inicio de las precampañas, prácticamene se mantiene como el preferido para conquistar el gobierno de la República.
AMLO, no solamente es asediado por sus contrincantes (que es lo normal en cualquier campaña), sino que el propio Enrique Peña Nieto, quien se muestra sumamente preocupado no tanto porque se le termine el hueso, sino porque su candidato ex secretario de Estado Meade, prácticamente no levanta y desde su denominación como aspirante a ocupar Palacio Nacional, se le ha coloca en el tercer lugar de las preferencias ciudadanas.
Tal vez sea esa la razón para que el ex gobernador del Estado de México, se sienta sumamente nervioso, actitud que lo induce a descargar todo se verbo y su enojo en contra de quien en las múltiples exploraciones realizadas, principalmente por las encuestadoras GEA – ISA, IPSOS y las del periódico El Financiero, mismas que se encuentran a continuación:
AMLO.- 42%, MEADE.- 24%, ANAYA.- 23 % – ZAVALA. – 7 % “FINANCIERO”
37% 32 % 28% 2% “GEA-ISA”
36.3% 15,1% 22.7% 2.8% “IPSOS”
P R O M E D I O
38.33 % 23.7% 24.56% 5.8%
Todo México lo sabe, o al menos está consciente de que el oriundo de Macuspana, Tabasco, por tercera ocasión es candidato favorito para la Presidencia de la República; la ciudadanía no ignora que en la última elección presidencial que se realizó, fue cometido otro gran fraude presidencial ordenado por “quien ya sabemos quien” y, como consecuencia del mismo, le arrebataron a la mayoría nacional la Presidencia de la República, tal como lo hicieron en 1988, cuando Cuauhtémoc Cárdenas, abanderado por el Partido de la Revolución Democrática (ahora de la involución democrática) fue candidato por una coalición de partidos de izquierda, que ahora, la mayoría de esos partidos antagónicos al sistema, se suman MORENA.
Popularmente no había duda de que el ganador de la contienda en 1988, lo había sido el Ing. Cárdenas. En todo el país, se recolectaron boletas semi quemadas, que demostraban el fraude, incluso las que se lograron llevar hasta la sede del Congreso nacional, llegó el ejército, no para cuidarlas sino para terminar de quemarlas.
Casi al fin de la semana anterior, algunos de los voceros oficiales al gobierno, prácticamente incrustados en Milenio, no solamente cuestionaron fuertemente al candidato presidencial, sino que algunos se pasaron de la raya y al no poder batir al candidato, groseramente se condujeron, pero en fin, en la guerra electoral todo se vale e incluso, incluso subir al ring a Peña Nieto.
En la actual campaña presidencial, los que permanentemente han vivido del presupuesto público y que ya saben bien que su candidato no prospera, brincan se jalan los pelos por las propuestas que tiene el candidato presidencial por el Movimiento de Renovación Nacional (MORENA), pero principalmente porque su candidato no levanta nada.
Por todo lo anterior, el “gran dedo” se sube al ring, se mete en la pelea, se vuelve agresivo, nervioso como dice AMLO, sin que pueda encontrar a alguien que sea del peso de Andrés Manuel. Finamente, m meten a “Marga” para quitarle puntos a Anaya.
¡Lástima Margarito¡