El elenco del nuevo melodrama de Nicandro Díaz inicia grabaciones con una bendición
Para Sebastian Rulli y Eduardo Yáñez el interpretar a dos guardaespaldas en la telenovela Amores Verdaderos, que saldrá al aire el 3 de septiembre por El Canal de las Estrellas, requirió de una preparación mental y física por medio de la práctica de artes marciales y clases de tiro.
“Hacer a este personaje (José Ángel Arriaga) es complejo, porque encierra la preparación mental y física de un hombre que antepone su vida a la de Victoria Balvanera (Erika Buenfil).
“Para darle mayor credibilidad al papel he tenido que practicar Aikido tres veces a la semana, durante los últimos dos meses; además, como el personaje maneja armas de fuego he tenido un entrenamiento más profundo de tiro”, explicó ayer en entrevista Yáñez, desde el Foro 8 de Televisa San Ángel, donde el elenco acudió a la misa de inicio de grabaciones.
Agregó que antes de sumarse al reparto de Amores Verdaderos él ya practicaba artes como jiu-jitsu, muay-thai, krav maga y kick boxing, técnicas que también le ayudarán a complementar su papel.
La producción, a cargo de Nicandro Díaz, tendrá un buen número de escenas de acción que serán grabadas en Colima y en el Distrito Federal, en las cuales participarán ambos actores con la ayuda de dobles.
“Voy a ejecutar algunas escenas arriesgadas, pero obviamente, por la edad, hay límites que te pone el cuerpo, y cuando sea necesario seré apoyado por uno de los stunts (dobles)”.
En la trama, José Ángel Arriaga rescata de un secuestro a Victoria Balvanera, una mujer multimillonaria que lo contrata como guardaespaldas y de quien se enamora profundamente.
Por su parte, Rulli da vida a Francisco Guzmán, quien está encargado de cuidar a Nikki (Eiza González), la hija de Victoria, una niña grosera, malagradecida y altanera que comienza a tener sentimientos por su guarura.
“Mi papel tiene formación militar y se fue a preparar profesionalmente a Estados Unidos. Su naturaleza me obligó a tomar clases de tiro y de artes marciales junto a los dobles.
“Durante los ensayos tengo que aprenderme las coreografías de los golpes, trato de ver qué puedo hacer dependiendo mis limitaciones, aunque yo siempre he hecho mucho ejercicio”, mencionó Rulli, quien también tomó tres clases de piano, de dos horas cada una, para darle credibilidad a una escena donde aparece tocando ese instrumento musical.
Erika Buenfil no se quedó atrás, ya que después de siete años sin protagonizar una telenovela la actriz se sometió a una preparación estricta.
“Bajé cinco kilos porque me lo demandaron, además tomé sesiones de buenos modales, cómo caminar bien, sentarse, comer, poner la mesa, toda una clase de refinamiento que jamás había pensado en tomar”, comentó, sin querer entrar en detalles en su peso actual.