El realizador, que va al festival para recibir un premio especial, opinó sobre drogas, terrorismo y libertad de expresión
Oliver Stone no se muerde la lengua, eso ya no sorprende, y este domingo volvió a hacerlo durante la presentación de Salvajes en el Festival de San Sebastián, donde acusó a EU de emprender la guerra contra las drogas sólo para espiar a otros países.
“Hace 42 años que empezamos (los estadounidenses) a hacer la guerra contra las drogas, y ahora hay más drogas, más baratas y mejores que nunca”, dijo el ganador de tres Oscar como director y guionista. “EU no utiliza la guerra contra el narcotráfico para luchar contra las drogas y la violencia que genera, sino para espiar a otros países”.
En Salvajes, que llegará este viernes a las salas de cine españolas, Stone adapta el bestseller homónimo de Don Winslow y se traslada a la idílica Laguna Beach californiana para contar la historia de dos jóvenes emprendedores en el negocio de la mariguana. Pero su suerte se verá truncada por la incursión de un poderoso cártel mexicano liderado por Salma Hayek y Benicio del Toro.
“La mariguana es sana, es un regalo de los dioses para la humanidad”, manifestó el realizador de Platoon y Wall Street cuando le preguntaron por su opinión sobre la legalización de esta droga. “No tendría que convertirse en un arma”.
Según Stone, el narcotráfico ha generado un nuevo nivel de violencia que resulta comparable a la provocada por la guerra de Irak, pues el terrorismo “es la evolución natural” de esta guerra. Y retomando el tema de Irak, señaló: “Bush fue probablemente uno de los peores presidentes de Estados Unidos”.
“Creo que fue una desgracia para España que (el ex presidente José María) Aznar apoyara la guerra de Irak —señaló—. Ahora les toca a ustedes ajustar cuentas con Aznar, ahí tienen el Tribunal de La Haya”.
Apoyo a Assange
Stone también su opinión a un grupo de periodistas sobre el caso de Julian Assange —al que respaldó a través de una carta firmada junto a Michel Moore en la que le agradecía el “gran servicio” que ha prestado al mundo con sus denuncias sobre “los abusos” del gobierno estadounidense.
“Los crímenes deben ser perseguidos”, dijo, como lo hizo el ex juez español Garzón con Pinochet “lo que pasa —considera el director— es que ahora el perseguido es Assange, cuando los que son los auténticos terroristas están en libertad”.
Por su parte, el actor portorriqueño Benicio del Toro, que interpreta en Salvajes, de Stone, a un narco latino sin ley ni moral ni más dueño que el dinero, cree que la táctica que se ha usado hasta ahora para luchar contra el narcotráfico “no ha funcionado”. Comentó que la estrategia contra las drogas ilegales debe ser global y de colaboración entre los países afectados.
Y finalmente, entre las incidencias del día, mientras aterrizaban Catherine Deneuve, Isabelle Huppert y Marisa Paredes, la cineasta chilena Valeria Sarmiento presentó junto al resto del equipo As Linhas de Torres. En esta miniserie, la viuda de Raúl Ruiz culmina el proyecto que comenzó su marido sobre la invasión de Portugal por Napoleón. (Agencias)