No quiero dormir sola retoma el ocaso de una actriz ante los ojos de su nieta.
“Es triste que las nuevas generaciones no retomen la sabiduría que está en los grandes. Lo que importa ahora es estar joven, en el momento, vivir. Ser viejo es estar pasado de moda”comentó Beristain.
La directora se inspiró en la relación que mantuvo con su abuela, Dolores Beristain, quien fue actriz. “La investigación vino de la experiencia personal. Mi abuela Dolores estuvo en un asilo de la ANDA, y yo venía de la experiencia de verla muy débil físicamente y que ya no podía estar sola. Aquí hay una reflexión: valorar la juventud y cómo ésta ahora está sujeta a nuevas enfermedades”, respondió Beristaín.
La actriz Adriana Roel regresa a las pantallas cinematográficas después de algunos años de ausencia, compartiendo cámara con Mariana Gajá. La directora dijo que a pesar de la diferencia generacional entre ambas, ayudó que fueran actrices de teatro para su trabajo pantalla. Desde que Beristain escribió el guión, ambas actrices ya estaban en el proyecto.
No quiero dormir sola seguirá un camino por festivales y, con el apoyo de Canana, se podrá distribuir comercialmente en el primer semestre del próximo año. Para la película resultó muy positivo tener su estreno en la Semana de la Crítica de la Biennale di Venezia, y presentarse en los festivales de Cine de Sao Paulo, Estocolmo y el Cairo. “Estar en el Festival Internacional de Cine Morelia significa el mejor lugar para su presentación en México. Es un festival al que le tengo muchísimo cariño, porque ya he presentado dos cortometrajes y siempre me siento muy bienvenida”, djio Beristain.
