Para nadie, salvo para los políticos en sus tres niveles de gobierno, en puestos ejecutivos y protagonistas del sector público, la inseguridad campea totalmente en el país, en el estado y se hagan y no dejen de hacerse comparaciones con los años anteriores, con los años del inicio de la guerra al narcotráfico y/o con los meses del año anterior y se trasladen, y se ocupen regiones y estados por las fuerzas militares y paramilitares – federales y estatales (¿?), lo cierto es que la inseguridad va y está al alza.
Curiosamente, sucede un asalto, un hecho delictivo que supera los anteriores y, aparte de que la sociedad piensa y compara – ¡Nunca antes habían asaltado así!, se da una declaración de los políticos y/o de los responsables de las áreas de seguridad pública, que en espíritu y en letra son incongruentes con la realidad, terca, necia y fría.
Sirva de ejemplo el asalto de la joyería en un centro comercial del sur de la capital del estado: – de acuerdo con la nota periodística, diez p0ewrsonas participaron en el evento, rompieron los cristales de los aparadores y se llevaron lo que pudieron y quisieron y el asalto a la cafetería-cooperativa de la escuela secundaria federal, posterior al asalto-intimidación a docentes de la misma institución educativa que salían de una sucursal bancaria…por lo menos no se tiene memoria de un asalto en vivo y en directo a una institución educativa ¡en pleno horario de labores!
¿Resultados, de esos y más, muchos más eventos delictivos? Nadie sabe, nadie supo ni sabrá, pero los políticos están muy complacientes en las fotos.
Recientemente el titular del ejecutivo estatal, Silvano Aureoles Conejo, aceptó que no midió bien, acertadamente, su repetida promesa de campaña en relación con la inseguridad: la acabaría en un año. Ahora sabe (¿?) – ya se acerca al segundo e iniciará el tercero – que no estaba bien enterado de las estructuras, entramado y relaciones de la delincuencia que generan los índices de inseguridad… ¿dónde quedó su experiencia, su conocimiento, su información, como líder de la fracción parlamentaria del PRD? El Poder hace que las personas sean omnipotentes, omniscientes y que tienen toda la información…No es lo mismo estar de un lado de la mesa que del otro.
Esto recuerda las palabras de un ex presidente – Fox Quesada –quien afirmó que como presidente resolvería el conflicto en Chiapas ¡en 15 minutos! ¡Ah! Además, que daría a cada mexicano un vochito… ¡Y hubo quienes sí le creyeron y votaron por él!
O las promesas de Donald Trump…que llevaría a los estados Unidos a recupera su orgullo y liderazgo, su poderío económico y más y más trabajo y bien pagados para los norteamericanos; que acabaría con el terrorismo en la patria, su América; propondría una reforma impositiva, construiría un muro entre U.S.A. y México y, además, lo pagarían los mexicanos, acabaría con el narcotráfico y el tráfico de indocumentados en la frontera sur…
Recuerden cómo nos fue y cómo le está yendo a Ricitos de Oro y cómo estamos.