La pregunta es válida; explico por que; hipotéticamente Michoacán, como cualquier otro Estado de la República tiene leyes y autoridades que velan por su cumplimiento; dichas autoridades tienen por mandato de ley el monopolio del uso de la fuerza para cumplir y hacer cumplir la ley. Concretamente, una de sus ineludibles obligaciones es brindar seguridad y que funcione el estado de derecho.
Eso es en teoría, pero en la practica la realidad es que en Michoacán las leyes no se aplican ni funcionan como debieran. Las leyes existen, cierto, pero son letra muerta cuando no hay voluntad para aplicarlas o peor, cuando las mismas autoridades están en contubernio con los transgresores.
Por eso la duda es válida, ¿Quién manda actualmente en Michoacán y más específicamente en Morelia?. Ciertamente no el C. Gobernador ni el C. Presidente Municipal.
¿Por que afirmo lo anterior?. La pongo fácil; muchos, muchísimos diría yo, hemos sufrido y padecido un dia si y otro también las arbitrariedades de esos grupos que por alguna razón no ha querido eliminar del Estado. Por orden de frecuencia y calamidad podemos colocar en un primer lugar a la beligerante CNTE, los llamados, irónicamente, “maestros democráticos”. Ninguna autoridad, de ningún nivel, se atreve a aplicarles la ley, ni siquiera a aquellos que ya cuentan con una orden de aprehensión vigente. Estos señores actúan como lo que son, los verdaderos dueños del Estado. Saben estos personajes y sus jenízaros de las normales que su poder no tiene contrapeso en Michoacán. Es más, ya tienen su propio candidato a la presidencia municipal de Morelia. Nunca serán castigados, hagan lo que hagan, bloqueen lo que bloqueen, destruyan lo que destruyan, roben lo que roben, golpeen a quien golpeen. Ahora ya pueden no solo patear el portón del palacio de gobierno como lo hicieron en una ocasión; en esta administración lo pueden incendiar si así lo desean.
Otro grupo que manda en Michoacán son los zares del autotransporte, que al menor intento de tocarlos o hacerlos cumplir la ley paralizan la ciudad y ponen de rodillas a las autoridades. Aceptémolo, la red de complicidades existentes entre PRD, PRI y los transportistas hacen imposible cumplir la ley. ¿Solución al problema del transporte en Michoacán? Jamás mientras tengamos estas autoridades.
Otro grupo que manda, cuando menos en Morelia, es ese petate del muerto que lleva por nombre Coordinadora Universitaria de Lucha, la CUL, organización que ha derivado en una estructura porril para controlar las “Casas del estudiante”, lugares que se han convertido en refugio de fósiles, porros y desechable carne de cañón.
Quizá el grupo de poder menos conocido es ese conjunto de grandes padrones estatales, híbrida combinación de industriales y políticos, especie de “nueva clase” que impone sus intereses con el apoyo de la obsecuente clase política del Estado subordinada a esos grupos.
En esta vida lo que importa son los resultados y ¿qué resultados nos han dado nuestras autoridades? ; impunidad absoluta para los “democráticos”, Michoacán último lugar nacional en educación, tolerancia infinita para quienes desestabilizan el Estado, incapacidad para controlar a quienes secuestran camiones, queman patrullas y bloquean vialidades. Tenemos una ciudadanía que vive con miedo, humillada y exasperada, una Universidad hundida en la mediocridad más un largo y doloroso etcétera.
Al parecer las autoridades michoacanas solo sirven para imponer sanciones a quienes no usen cinturón de seguridad, se pasen un alto, detener selectivamente automovilistas, solitarios transeúntes y protagonizar ruidosas e inútiles “persecuciones” de delincuentes.
¿Eso merecemos?
Alejandro Vázquez Cárdenas
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