La deuda del gobierno para cubrir las necesidades de los distintos sistemas de pensiones alcanza 120% del PIB, y va en aumento.
El gobierno federal destina 8% del presupuesto de egresos al subsidio de los sistemas de pensiones, en menos de 20 años, se prevé que el 14% de los recursos presupuestarios se destine al pago de pensiones.
“Si el modelo y los sistemas de pensiones no cambian, se convierte en diferentes bombas de tiempo, estados, municipios, universidades, decir que son bombas que pueden estallar es erróneo, porque hace años que vienen quebrando estos modelos, cada vez que colapsa un sistema de pensiones particular se afecta la viabilidad financiera de las entidades”, señaló Francisco Miguel Aguirre, de Valuaciones Actuariales del Norte.
El total de los pasivos adquiridos es equivalente a 120% del PIB, 31% corresponde a las pensiones otorgadas a los trabajadores del IMSS y 89% al sistema de pensiones para los trabajadores del estado.
Por cada millón de trabajadores que se jubilan con el esquema del IMSS, el gobierno adquiere un pasivo equivalente al 2% del PIB, mientras que, cada millón de trabajadores que se retira con una pensión del sistema de trabajadores del estado, cuesta 14%.
Durante un foro de pensiones organizado por Principal Financial Group, expertos en la materia coincidieron en que es necesario crear un nuevo modelo de pensiones que homologue los sistemas vigentes, que coincida en condiciones de edad de retiro, aportaciones, antigüedad y requisitos para pensiones por invalidez y viudez.
Al respecto, Carlos Noriega, presidente de la Asociación Mexicana de Afores (Amafore), explicó que México se encuentra en un momento crucial para realizar cambios y frenar el ritmo de crecimiento de los pasivos de las pensiones de trabajadores del gobierno.
“Son decisiones que tienen un costo los primeros 20 años, pero que generan beneficios de sustentabilidad para el sistema”, dijo.
Cesantía en edad avanzada, el próximo reto
Para Carlos Ramírez, presidente de la Comisión para el Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), la próxima reforma debe estar orientada a discutir el tema de la cesantía en edad avanzada, que permite a los trabajadores retirarse a los 60 años.
“Cuando la esperanza de vida aumenta a entre 76 y 77 años, el hecho de que la mayoría de los trabajadores se retiren a los 60 se vuelve preocupante”, dijo.