La selección de Inglaterra vence a Eslovenia por 1-0 en el encuentro disputado en el estadio Neslon Mandela Bay de Puerto Elizabeth en uno de los partidos del Grupo C en el que también jugaron Estados Unidos y Argelia abriendo la jornada 13 del Mundial Sudáfrica 2010.

Inglaterra clasificó en el último suspiro y Eslovenia, con la derrota, perdió en un segundo su tesoro de cuatro puntos y quedó eliminada con un gol de último minuto de Estados Unidos.

A los ingleses, necesitados de un triunfo para quedarse con la clasificación a los octavos de final del Mundial, les costó soltarse las amarras que los eslovenos pusieron desde los primeros minutos. Poco a poco el equipo dirigido por Fabio Capello se fue encimando en el área rival y finalmente en el minuto 23 cayó el gol de Jermain Defoe, el primer delantero que marca en el cuadro británico.

La jugada llegó en una subida por la banda derecha de james Milner que centró al área para que Defoe se adelantara a la marca y fusilara al portero Handanovic.

El 2-0 pudo caer comenzando la segunda mitad en un centro que Defoe no alcanza a rematar en el minuto 46. Rooney también buscó desesperadamente su primer gol en Sudáfrica, pero la atenta defensa eslovaca y su propia incapacidad para definir la jugada le quitaron oportunidad.

La selección inglesa sudó hasta la última gota, el constante ida y vuelta en el que se convirtió el partido dejó agotados a los jugadores. El segundo tanto se le negó varias veces, primero a John Terry con un cabezazo que frenó el meta Handanovic en gran forma y luego Rooney, quien solo en el mano a mano estrelló su disparo mordido en el palo derecho.

El guardameta Handanovic debió tener un imán para atraer la pelota, pues se quedó con todos los centros o al menos retuvo todos los disparos. El trámite del partido y la fortuna fue mezquina con los ingleses que podían haber marcado varios goles.

El minuto 68 fue realmente dramático para los ingleses cuando Eslovenia en una galopada al área del meta David James tuvo cuatro remates seguidos de Novakovic, Birsa, Dedic y nuevamente Novakovic que todos fueron rechazados por la defensa británica.

El tiempo se consumió muy lentamente ante la desperación y agotamientos de los ingleses.

Desde el primer tiempo Inglaterra se mostró muy ansiosa por marcar primero y lo intentó con disparos desviados de Frank Lampard, quien estuvo implacable en la marca y recuperación de la pelota.

Tras el tanto tomaron más confianza y a la media hora de partido estuvieron cerca de poner el segundo con un remate de Steven Gerrard, tras pase de Wayne Rooney, que el meta eslovaco tuvo problemas para detener y que salvó sobre la línea de meta.

Los ingleses intentaron poner una ventaja mayor antes de irse al descanso, pero la buena marca y la defensa de Eslovenia se los impidió.