Dos dÃas de manifestaciones en contra y a favor de esta ley.
El Senado argentino se disponÃa anoche a decidir si el matrimonio entre personas del mismo sexo se convertÃa en ley, en una maratónica sesión en la que la disputa entre el oficialismo y oposición aparecÃa por demás cerrada, con la posibilidad de que todo se defina por escaso margen.
Dos dÃas continuos de manifestaciones multitudinarias, a favor o en contra de la ley. Con las glesias católica y evangélica unidas contra la postura del gobierno, que ayer apoyó la iniciativa no sólo en el Congreso sino también en la calle, donde el Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI) montó una carpa y una pantalla gigante para seguir las incidencias de la sesión.
Mientras en el Senado las acusaciones entre oficialistas y opositores se cruzaban con filosas acusaciones, el ministro de EconomÃa, Amado Boudou, y varios funcionarios del gobierno de Cristina Kirchner se mezclaron entre los manifestantes que apoyaban la aprobación de la ley. Con 37 senadores presentes, la sesión comenzó a las cuatro de la tarde, después de que la senadora opositora Liliana Negre De Alonso interpuso una cuestión de privilegio (queja) contra el presidente provisional de la Cámara, el senador José Pampuro, quien presidió la sesión, ya que el vicepresidente, Julio Cobos, ocupa la presidencia de la nación en reemplazo de Cristina Kirchner, quien se encuentra de viaje en China. “Me impugnaron ilegalmente un dictamen de mayorÃa sobre la unión civilâ€, reclamó la senadora que encabezó la postura más dura contra la ley, que cuenta con la oposición de la Iglesia.
En la vÃspera, varias decenas de miles de personas ocuparon la Plaza de los Dos Congresos en contra de la iniciativa. Miembros de la Juventud Católica y de distintas organizaciones de la Iglesia Evangélica movilizaron a sus fieles junto a militantes antiabortistas y partidos de centro-derecha. “Es la demostración de que la sociedad no quiere que se destruya la familia tradicionalâ€, explicaba Sonia Bermúdez, llegada desde la provincia norteña de Salta (mil 250 kilómetros de Buenos Aires) para participar en la marcha. En la tarde de ayer se registraron enfrentamientos entre seguidores de una y otra postura frente al Congreso y agresiones con huevos, los que fueron controlados por la policÃa.
Los votos en el Senado, al igual que pasó en Diputados, no se dividen entre oficialistas y opositores en bloque.
Por ejemplo Luis Juez, opositor a los Kirchner, adelantó que votará a favor porque “desde el derecho no hay impedimentos para negarles derechos a las minorÃasâ€. El pasado lunes, la presidenta acusó, desde China, al cardenal Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, de “tener una postura digna de la época de la inquisiciónâ€.
El problema por el que atravesaba ayer el oficialismo para hacer aprobar la medida era justamente el cambio de postura de no apoyar el proyecto de Unión Civil para defender el de matrimonio, lo que derivó en la pérdida de algunos votos con los que habrÃa contado, como el de la senadora por Formosa, Adriana Bortolozzi, o el de Daniel Pérsico, por la provincia de San Luis, para quien “mis convicciones religiosas me impiden acompañar la iniciativa de mi bloqueâ€.
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