Pablo Barrera no guarda resentimiento alguno en contra de Víctor Mahbub, ex presidente del Patronato de Pumas y quien fue el responsable de que el mediocampista de Cruz Azul renunciara a su porcentaje de transferencia para no tener trabas e incorporarse al West Ham de Inglaterra.
Barrera aceptó que no revisó las cláusulas de la rescisión de contrato, ya que el mismo fue analizado por el promotor, Jorge Berlanga, quien estuvo al pendiente de las decisiones tomadas por los mandos felinos.
“Yo no me arrepiento de haber dejado ese porcentaje, lo que sí es que me dejó un sabor amargo, que una institución como Pumas haya hecho eso, nunca me imaginé que lo hicieran. Era tanta la emoción que me iba a ir, que nunca revisé las cosas, no revisé lo que firmaba, porque tenía esa confianza con mi representante”, insistió.
Aseguró desconocer si la misma situación vivió Efraín Juárez para dejar al cuadro felino y firmar con el Celtic de Escocia, o si Héctor Moreno tampoco recibió el dinero correspondiente por su traspaso al AZ Alkmaar del balompié holandés. “Yo sólo puedo hablar de lo mío, de lo que a mí me sucedió, de los demás no sé”.
“Después de unos meses de estar en Inglaterra y platicando con compañeros de la Selección, me preguntaron ese tema y les dije que no recibí nada. No me arrepiento, porque mi sueño era ir a Europa y eso para mí ya quedó atrás”.
Aseguró que guarda buenos recuerdos de Pumas, en especial, la amistad que forjó con Guillermo Vázquez padre, quien actualmente encabeza las fuerzas básicas del plantel, y algunos otros jugadores que se mantienen en el club y que formaban parte del mismo al momento en que decidió emigrar al viejo continente.
“Yo nada más le deseo lo mejor a Pumas, me hicieron eso, pero no tengo resentimiento ni nada”.