Toyota Motor Co. reanudó la operación de todas sus plantas en Japón, luego de que logró mejorar la cadena de abastecimiento de partes automotrices tras el sismo de 9.0 grados Richter y el posterior tsunami del 11 de marzo.

Entre las instalaciones que operan de nuevo se encuentra la de motores en Iwaki, en la prefectura de Fukushima, y sus ejecutivos indicaron que el 3 de junio se hará un anuncio sobre el estado de la producción.

Entre los modelos que comenzaron a armarse se encuentra el Crown y Mark X, fabricados en la localidad de Toyota, en la prefectura de Aichi, así como las plantas ubicadas en las prefecturas de Miyagi e Iwate, afectadas por el sismo.

El fabricante automotor japonés suspendió actividades en sus 17 plantas en el archipiélago japonés, y las reanudó no al cien por ciento sino a la mitad de su capacidad, y en sus instalaciones estadounidenses y europeas las labores siguen suspendidas.

De acuerdo con Deutsche Securities Inc., los armadores automotrices japoneses se podrían demorar alrededor de seis meses en regresar a los niveles de producción que tenían antes del 11 de marzo.