La Agencia Europea del Espacio (ESA) ha logrado contactar con la sonda rusa Phobos-Grunt, lanzada con destino a Marte el pasado 8 de noviembre pero que quedó averiada en órbita terrestre al no encenderse sus motores. La estación que la ESA tiene en Perth (Australia) ha captado una señal de la nave interplanetaria. Los especialistas europeos trabajan ahora con los rusos para tratar de mantener las comunicaciones con la sonda.
“Anoche nuestros colegas europeos consiguieron recibir una señal del aparato, lo que significa que está vivo”, ha dicho un representante de la industria aeroespacial rusa, en condiciones de anonimato, a la agencia Interfax. El contacto se ha producido horas después de que el subdirector de la agencia espacial rusa, Roscosmos, Vitali DavÃdov, diera prácticamente por perdido el vehÃculo.
Las posibilidades de éxito son muy escasas, pero todavÃa cabe la posibilidad de que los expertos puedan determinar qué falló exactamente y arreglarlo. La Phobos-Grunt aún podrÃa ser reprogramada y orientarse hacia Marte antes de que se produzca un cambio en la alineación de los planetas que haga que la distancia respecto al planeta rojo sea demasiado grande como para salvarla.
La sonda Phobos-Grunt fue lanzada el pasado 8 de noviembre desde la base de Baikonur (Kazajstán) con el objetivo de enviar un pequeño módulo a la luna Fobos de Marte para tomar una muestra allà y enviarla en una cápsula a la Tierra, para llegar en 2014, lo que supondrÃa un hito en la exploración del planeta rojo.
De seguir descontrolado y no poder establecerse un contacto permanente con él, el aparato, de 12 toneladas, caerá en la Tierra. Los expertos internacionales en dinámica orbital ya están calculando dónde y cuándo podrÃa precipitarse. Todo apunta hacia algún momento entre finales de noviembre y mediados de diciembre, y el NORAD (Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial, en sus siglas inglesas) indica el 26 de este mes como fecha más probable, según informa Russianspaceweb.com. Como el cohete Zenit colocó la sonda en órbita con una inclinación de 51 grados sobre el ecuador, la caÃda al suelo se producirÃa en algún lugar situado entre los 51 grados Norte y los 51 Sur.
Al entrar en la atmósfera terrestre, la Phobos-Grunt se destruirÃa prácticamente entera, incluidas las 10 toneladas de combustible tóxico (hidracina y tetróxido de nitrógeno como oxidante) que lleva, y al suelo llegarÃan solo fragmentos. Pero entre esos fragmentos habrÃa uno diseñado precisamente para resistir la entrada en la atmósfera de nuestro planeta y llegar Ãntegro al suelo: la cápsula que traerÃa las muestras tomadas en la luna marciana Fobos.