En el futbol hay todo tipo de cábalas y maldiciones. Pero a últimas fechas, en los más recientes años, para ser más exactos hace 14, parece que hay un mal karma que rodea al Cruz Azul.
Cuando Carlos Hermosillo, con el rostro ensangrentado anotaba el penalti que presagiaba una nueva era de triunfos para los Cementeros, en aquel lejano Invierno de 1997, nadie pensaba que se vendrÃan épocas duras, de sequÃa, de plaga.
De tragedias.
Desde esa fecha, Cruz Azul no ha vuelto a ser campeón. ¡Y vaya que lo ha intentado de todas las maneras y en todas las oportunidades! Sólo que por una causa u otra no se finiquita la obra que se trabajó por construir.
No llega el tÃtulo.
Y eso… es una tragedia.
Los más superticiosos hablan de maldición, de que una brujerÃa es la que rodea al equipo cementero.
Los escépticos son frÃos, simplemente califican la esterilidad como fracaso contundente de la directiva, cuerpo técnico y jugadores.
Mas hay algo que no se puede negar; en algunas de estas Liguillas en donde el Cruz Azul ha quedado a medias, se han presentado incidentes de todo tipo, cuestiones que se alejan demasiado de una explicación simple, porque sencillamente, no la hay. Eso, a toda vista, es una tragedia.
De aquel Invierno 97 a la fecha, han existido 10 Liguillas, 10 oportunidades en que Cruz Azul ha sido eliminado por factores “asombrosos†para su pueblo ávido de triunfos.
Hay penaltis fallados por los jugadores que nunca fallaban… hasta ese momento. El tiempo en que las piernas de acero flaqueaban.
Goles de los rivales que caen en el último minuto, cuando ya todos cantaban la victoria azul, pero a la hora de la verdad, la frase de Fernando Marcos valÃa más que nunca: “El último minuto, también tiene 60 segundosâ€.
Las decisiones arbitrales, hoy tan de moda en el seno de La Máquina, no pueden faltar. Un penalti en contra, de marcación muy rigorista; o uno más que evidente a favor, que simplemente, no se quiso, o no se pudo marcar.
También están las expulsiones severas que han dejado en desventaja al equipo azul, y de las cuales no se ha podido levantar.
Ni qué decir de las cuestiones administrativas. El mal aura del equipo de La Noria es tal que ha sido el único conjunto que ha sido descalificado por la alineación indebida de Salvador Carmona en el torneo de Clausura 2007, dado que habÃa sido inhabilitado por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
Y claro, los errores futbolÃsticos.
No pueden olvidarse las fallas de los porteros en los momentos claves y también en cuanto un delantero sólo tiene que empujar la pelota y ésta simplemente no quiere entrar.
Cuestiones inexplicables, que van más allá de una simple explicación.
Porque una simple explicación serÃa esta: “En el futbol siempre hay un vencedor y un vencidoâ€, pero lo que le pasa a Cruz Azul es para ir más allá.
Algo pasa, porque en la Liguilla siempre se presenta algo:
Una mala decisión arbitral; un error increÃble, una expulsión innecesaria o una mala decisión administrativa.
Y eso, a todas luces, aunque se niegue… Es una tragedia.