guerra

Razones

¿Guerra sucia o falta de respuestas?

-Jorge Fernández Menéndez-

EXCÉLSIOR

No cabe duda de que el PAN, como dicen en el PRI, está utilizando la mala fama de algunos ex gobernadores y dirigentes de ese partido para golpear la campaña del tricolor.

Lo que me asombraría es que no lo hiciera.

Por supuesto que el presidente Calderón les está recriminando a muchos gobernadores del tricolor que no lo hayan acompañado en la lucha contra la delincuencia organizada en sus propias entidades, pero también me asombraría que no lo hiciera cuando está en la recta final de su mandato y es hora, para él y para los otros, de rendir cuentas.

Es claro que se está utilizando el tema de la deuda pública de Coahuila, como la de otros estados, para criticar a los gobiernos priistas y para exhibir esos malos manejos, pero habría que ser muy torpe en política para no hacerlo cuando se trata de evidentes hechos ilegales.

En última instancia, lo que sorprende es que el PRI, en lugar de asumir que así son las cosas y encabezar ellos mismos la exigencia de justicia y el deslinde de sus malos elementos, termine defendiéndolos.

No debería tener necesidad de defender lo indefendible y si, como dijo su dirigente nacional Pedro Joaquín Coldwell, cada militante es responsable de sus actos y debe asumir su defensa en forma personal, entonces deberían ser consecuentes con ello.

El tema de los ex gobernadores de Tamaulipas adquirió otra dimensión porque uno de ellos, Manuel Cavazos Lerma, fue designado por el CEN priista candidato a senador; porque Enrique Peña Nieto fue a hacer una defensa pública del ex gobernador (y de los otros dos mandatarios involucrados en las investigaciones de la PGR y de la DEA) al propio estado; porque no es ninguna novedad que Tomás Yarrington esté señalado (que sea verdad o no es algo que tendrá que esclarecer la justicia) como relacionado con el cártel del Golfo, tampoco que existan señalamientos que lo involucran a él o a gente suya muy cercana, en el asesinato del candidato Rodolfo Torre Cantú.

Se olvida un pequeño detalle en todo esto: Osiel Cárdenas, el jefe del cártel del Golfo, fue extraditado a los Estados Unidos en enero de 2007.

Allí estableció un acuerdo con la justicia estadunidense que le permitió tener una condena relativamente benigna de 25 años de cárcel y una multa de 50 millones de dólares (¿alguien se preguntó de dónde los sacó Osiel?).

Pero obviamente esos acuerdos no se deben haber establecido sin una larga plática de por medio con el ex capo, que tiene que haber hablado, y mucho, de un tema que es el que más le interesa a la justicia estadunidense: las relaciones del narcotráfico con los políticos estadunidenses.

Existen, según la información pública, cuatro testigos protegidos que involucran a Yarrington con Osiel Cárdenas y con la muerte de Torre Cantú.

¿Qué pasará cuando aparezca el propio Osiel confirmando esos hechos?

¿Se seguirá hablando de una campaña sucia?

Pero insistimos, lo que llama la atención es que el PRI, en lugar de asumir una defensa incondicional de estos personajes, no sea el que más insista en esclarecer los hechos y deslindarse de ellos en lugar de reclamar por la guerra sucia.

Cuando el presidente Calderón ironiza preguntándose si querían algunos que “se tomara un cafecito con los narcos”, tiene la certeza de saber que el ataque de la delincuencia organizada contra la sociedad ha sido tan feroz, tan doloroso, ha ocasionado tanto dolor que la gente le reclama a muchos gobernadores, incluso a algunos que sí lo han hecho, no haber participado en ese combate que sus opositores llaman la “guerra de Calderón”.

El gobierno federal ha estado reclamando solidaridad en esa lucha desde hace cinco años; ha presentado numerosas iniciativas que no han sido atendidas por los gobiernos locales y por el Congreso, donde no tiene mayoría, ha sufrido en demasiadas ocasiones de una abierta simulación en el apoyo y ha tenido que pagar los costos derivados de ello y de sus propios errores.

¿Alguien puede creer que en el cierre de su ejercicio ese mismo gobierno federal no buscará que quienes no lo apoyaron paguen un costo electoral?

Hay ex gobernadores y políticos con mala fama pública.

Es una realidad que no se cambia con buenos deseos o apapachos.

En todo caso, como ha ocurrido con muy pocos otros políticos, esos personajes deberán tratar de reconstruirse, de mostrar una nueva imagen con su trabajo y actividad.

En muchos casos es imposible.

Se entiende que alguien que viene en un tercer lugar esté trabajando para recuperar todas las posiciones posibles y acercándose con personajes que le puedan dar votos, pero ¿qué necesidad tiene Peña Nieto de reunirse con Mario Marín, de colocar en su equipo a Fidel Herrera, o a José Murat?, ¿qué necesidad de reunirse en Tijuana con Jorge Hank Rhon; de poner como candidato al senado a Cavazos Lerma?, ¿para qué defender el caso de Coahuila donde es evidente que se violó la ley para contratar créditos en forma ilegal?

En política la forma es fondo, decía don Jesús Reyes Heroles, uno de los más notables priistas de todas las épocas.

Si se violan las formas, se está afectando el fondo en la campaña de Peña Nieto.

Circulo estratégico

Germán Larrea, en caballo de hacienda

-Carlos Mota-

Hace unas semanas me topé con un peruano de la clase trabajadora.

Le dije que su país me fascina y que este verano pienso volver al Valle Sagrado.

Respondió que nuestros pueblos eran muy parecidos, y que “nosotros tenemos en el Perú a Germán Larrea”, el empresario minero.

“Un hombre poderoso”, dijo.

Siempre he pensado que Larrea se haría un gran favor si eligiera un mayor protagonismo público.

Él se niega rotundamente.

Incluso un secretario de Estado me dijo que era un sueño pensar que Larrea pudiera ejercer algún liderazgo visible.

Lo anterior no quita que algo debió hacer bien, al menos en los últimos meses.

El reciente reporte de su Grupo México dio vasta cuenta de ello.

Es casi seguro afirmar que, en materia de inversiones, los sexenios panistas han estado enmarcados por noticias de corporaciones extranjeras, como Nissan, General Motors, Unilever, Coca Cola, Cisco, y decenas más.

Al mismo tiempo, pareciera que las inversiones mexicanas no han tenido eco en el ánimo noticioso, y la ciudadanía piensa que son escasos los empresarios nacionales que invierten.

Pero en el reporte de Grupo México del jueves hay una buena cantidad de menciones sobre las inversiones por venir de este grupo de transporte, infraestructura y minería.

Por citar un ejemplo: en la división de plantas de energía se lee:

“Continúa la construcción de dos plantas de autoabastecimiento de ciclo combinado, que contarán con una capacidad de generación de 500 megawatts y nos permitirán contar con una estructura de costos más competitiva.

Una inversión de 540 millones de dólares ha sido asignada para este proyecto”.

Y así.

Las inversiones de capital de Grupo México han sido cuantiosas: 355 millones de dólares en 2011 en el negocio de transporte, 636 millones de dólares en la división de infraestructura, programados para 2012, y una fenomenal cifra de 1,746 millones de dólares programados para 2012 en la división minera.

En total, Larrea invertirá 2,613 millones de dólares este año. Miles de empleos serán creados por este empresario a partir de ahora.

Germán Larrea es polémico, qué duda cabe.

Pero difícilmente hay quien le pueda competir ahora con las inversiones de capital que ha anunciado.

La Historia en Breve

Yo sí voy a sacar al Ejército de las calles

-Ciro Gómez Leyva-

Pasar un par de días en la frontera de Nuevo León y Tamaulipas, como pude hacerlo el fin de semana, ayuda para no perder dimensión ni perspectiva de la crisis de inseguridad que siguen padeciendo grandes regiones del país.

Tal parece que una de las mayores tentaciones de los tres candidatos presidenciales será expresar que ellos sabrán retirar, y más bien pronto, al Ejército de las calles para devolverlo a los cuarteles.

Visto desde esta parte del país, se trata de una oferta grosera, por improbable.

Y poco anhelada por los ciudadanos que miran de frente y de cerca el rostro criminal.

Si el Ejército (y cabe decir la Marina o la Policía Federal) se marchara pronto de aquí, no habría fuerza local que frenara el regreso, cebado y con más experiencia, de los criminales.

La existencia de 32 policías estatales probas y capaces sigue siendo una utopía.

Además, poco se ha avanzado en la limpieza de los ministerios públicos, no se han construido las cárceles federales y el grueso de la población permanece atemorizada, renuente a denunciar los delitos.

Como al inicio del sexenio, las fuerzas armadas son la última línea de defensa ante el colapso.

Y ahí seguirán por años, hasta que una combinación de cohesión política y social, una inteligente inyección de recursos y la voluntad de las autoridades locales marquen el arribo de nuevos tiempos.

Es un panorama hoy todavía inimaginable.

Lo saben Peña Nieto y Josefina, y supongo que López Obrador.

Lo menos que puede pedírsele a cada uno, mientras tanto, es que respeten la imagen del Ejército y no lo traten en el discurso como una moneda electoral de cambio.

O como una plaga a erradicar.

Política cero

Cada quien sus “narcoguerras”

-Jairo Calixto Albarran-

Ataviada con su ropón de Manila, doña Matrix Paredes, ese pueblo mágico ambulante, se registró como candidata priista para el Distrito Federal al rito de “I will always love you” de la Whitney Houston.

Y parecía que llegaba pisando fuerte como Adele en los Grammys en la onda “Rolling in the deep” (nomás le faltaba mascar chiclote), por encima de su oscuro chapoteo con el conservadurismo más romo y chato, con el debido apoyo de Peña Nieto, que se siente como Paul McCartney cantando canciones para el 14 de febrero.

Tristemente, la chica del huipil tricolor recurrió a la más aburrida, gris y lugar comunera estrategia de autodenominarse víctima triunfante al asegurar que el PRI enfrentará “un aparato gubernamental dispendioso y decidido a realizar una elección de Estado”.

Como si no fuera suficiente con los graves síntomas de Alzheimer selectivo (mala onda que se haya olvidado del récord de elecciones de Estado que el Revolucionario Institucional organizó durante 70 años consecutivos), como que quiso usurpar el discurso de López Obrador.

O sea, no se vale, si quiere ir por el DF, va a tener que organizar sus propias excusas.

Está peor que Jelipillo Calderón que, como si no se hubiera bajado del caballo bayo que montaba el día en que el general Galván Galván le dijo que la seguridad en México estaba comprometida, afirmó que “quien no combata el crimen, que no gobierne”.

O sea, todos los demás son antipatriotas y ateos, comunistas reciclados, pecadores y coyones, que no saben valorar el show de García Luna Productions.

Cada quien su narcoguerra.

Y bueno, luego vino la granizada de rollos en la repartición de culpas:

El PAN afirma que en los territorios priistas hay más ejecutados, y el PRI responde alegando como Niurka que eso no es veldá, y así al infinito hasta que se parecen a los grupos culturales mexicanos que ahora se agarran del chongo.

En esta esquina, la banda de Letras Libres, y en esta otra, el gang de extensión cultural de la UNAM, disputándose el Premio Xavier Villaurrutia entregado este año al escritor Sealtiel Alatriste, defendido y vilipendiado, acusado de plagiario y de utilizar su influencia en la universidad para obtener reconocimientos y poder.

Una delicia.

Sólo falta que declaren a Alatriste, con el mismo nivel de cursilería, el nuevo Gentleman de las Lomas de la literatura nacional.

Una cortina de humo para tapar al otro góber piadoso de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, que para documentar los fervores, se gastó un fortunón en hoteles y habitaciones con vista al recorrido del papamóvil por la ciudad de León para sus amigos.

¡Qué bonito es lo bonito!

Clase Política

Puntual respuesta tricolor

-Miguel Ángel Rivera-

Luego de las investigaciones en torno a ex gobernadores de Tamaulipas y otros personajes del PRI, se esperaba una reacción, pero no se sabía de dónde vendría.

La respuesta la dio el presidente del Congreso en Baja California, David Jorge Lozano Pérez, quien pidió al gobierno panista que si quieren castigar a políticos ligados con la mafia, empiece por los ex gobernadores Ernesto Ruffo y Eugenio Elorduy.

La cosecha

La combinación de bajo crecimiento y alto desempleo, con alza de precios y precaria seguridad pública es la mejor fórmula para perpetuar pobreza y exclusión, advirtió el coordinador de la fracción del PRI en la Cámara de Diputados, Francisco Rojas, al señalar que el problema de fondo radica en el abandono del papel del gobierno federal como promotor del crecimiento…

Debemos aprovechar el relevo de poder en México y EU en 2012 para relanzar el Tratado de Libre Comercio a una nueva fase de cooperación, expresó el coordinador de la bancada del PRI en el Senado, Manlio Fabio Beltrones…

Durante un acto multitudinario en Ecatepec, el precandidato del PRI a la Presidencia, Enrique Peña Nieto, sostuvo que México demanda mejores tiempos, de orden, paz, civilidad y trabajo para todos…

No nos piquen la cresta.

Por cada ataque y calumnia dirigidos al PRI los mexiquenses responderán, dijo el gobernador del estado de México, Eruviel Ávila…

El precandidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, pidió al sector privado de Nuevo León hacer a un lado dudas, pues no está en contra de los empresarios…

En Puebla, la precandidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, aseguró que es tiempo de unidad…

Si algo heredó Manuel Clouthier de su padre, el emblemático Maquío, fue la franqueza.

Esto se comprobó luego de que declinó como precandidato y sus críticas llegaron hasta la casa de campaña de Vázquez Mota…

Devueltos el fin de año por la Migra de EU, 11 mil 520 niños, niñas y adolescentes que viajaban solos fueron atendidos en México por los oficiales de Protección a la Infancia del Instituto Nacional de Migración…

Sin hacer de lado sus reclamos personales, la coordinadora del PRD en la ALDF, Alejandra Barrales, cumplió su promesa de no ser factor de ruptura, sino de unidad y de lealtad al partido.

La legisladora sostuvo su denuncia de anomalías en la encuesta interna, pero ofreció a Miguel Ángel Mancera que su equipo apoyará su campaña…

La Secretaría de Seguridad Pública federal informó que como resultado del programa Guerrero Seguro disminuyeron los secuestros, levantones y extorsiones en esa entidad…

Los aspirantes priístas al gobierno de Tabasco y a la alcaldía de El Centro, Jesús Alí de la Torre y Felipe Graham Zapata, respectivamente, se reunieron a desayunar con la finalidad de sumar esfuerzos…

Astillero

Narco-guerra electoral
Picando la cresta
Manejo selectivo
Preocupantes listas

-Julio Hernández López-

El panismo-felipismo está calentando la plaza electoral.

Tal como se venía mencionando con insistencia desde meses atrás, el tema del narcotráfico ha sido convertido por Los Pinos en el punto central de una campaña que pretende satanizar al partido y al candidato presidencial punteros (todavía) en las preferencias comiciales mediante la asignación maniquea de responsabilidad criminal en el complejo, manipulable y multifactorial tema de la delincuencia organizada.

Es natural que se centre el tema de la narcopolítica en el partido de tres colores, entre otras cosas porque muchas de las entidades donde se ha cometido la mayor parte de delitos relacionados con tal negocio (80 por ciento, según acaba de precisar Gustavo Madero, el presidente formal del PAN) están gobernadas por priistas y porque en las respectivas sociedades locales está plenamente arraigada la convic- ción de que esos mandatarios han cedido parte importante de su poder a alguno o algunos de los diversos cárteles en pugna.

Otro dato importante es que varios de los gobernadores bajo fundada sospecha de estar relacionados o abiertamente alineados con el narcotráfico forman parte del núcleo operativo y financista de la ya larga marcha del peñanietismo.

Y no es menor el hecho de que ciudadanos angustiados por el horror y la barbarie actuales hayan picado con pragmatismo desesperado el anzuelo electoral del PRI y su candidatura presidencial justamente porque hay la percepción generalizada de que esos priistas con poder conocen los entresijos del narcotráfico y tienen posibilidades de negociación y control o normalización de esas actividades.

No hay, sin embargo, monopolio priista en esas materias.

Varios de los gobernadores panistas y perredistas han estado continuamente bajo acusaciones similares, aunque el fuego federal no los ha afectado de la misma manera.

Una visión global de los escenarios de guerra relacionados con el narcotráfico muestra una intensa actividad desestabilizadora en los territorios dominados por el PRI, y en uno de los perredistas, Michoacán, de expreso interés familiar del calderonismo, como si los conflictos se hubieran concentrado de manera especial en zonas donde la agudización del conflicto pudiera tener consecuencias políticas y electorales.

Mención aparte merece el papel del propio gobierno federal, acusado con insistencia de poner el aparato de persecución del narcotráfico al servicio de un grupo en particular.

Pero, a pesar de todo, por encima de todo, está en curso una campaña inequívoca de Los Pinos, la dirigencia formal del PAN y la candidata presidencial para etiquetar a diversos personajes priistas como partícipes del narcotráfico.

Si el propósito fuera genuinamente justiciero, y de índole general y no selectiva, merecería apoyo sin restricciones y con seguridad una gran gama de ilícitos sería descubierta y eventualmente castigada.

Pero difícilmente se puede creer en buenas intenciones cuando lo que se está viendo es una estrategia electoral para favorecer al partido federalmente en el poder.

A pesar de los fracasos ruidosos que tuvo en el intento de procesar a Carlos Hank Rhon, y como si no hubiera vivido la vergonzosa derrota por unanimidad en el asunto conocido como el michoacanazo, Calderón está empujando la daga contra el priismo peñanietista (ciertamente oscuro, merecedor de indagaciones a fondo y sanciones penales diversas) y ha llegado al extremo de decir que quien no combata al crimen no debería gobernar, como si solamente hubiera una manera de hacerlo, la que él sangrientamente ha desarrollado.

Hay una estrategia de polarización que corresponde con lo hecho seis años atrás por el mismo publicista del envenenamiento público, Antonio Solá, quien ahora maneja a Josefina Vázquez Mota.

Del lado priísta ayer mismo se conocieron amagos de respuesta enérgica. Eruviel Ávila, a quien Peña Nieto dejó como sucesor en el estado de México, demandó en un multitudinario acto de acarreo organizado para el esposo de la Gaviota que no les piquen la cresta, pues el priismo de esa entidad responderá toda difamación y ataque recibido, como si ese partido estuviera decidido a organizar batallones de camisas rojas, totalmente alejadas de aquel anticlericalismo de Tomás Garrido Canabal, pero sí dispuestas ahora a castigar a los felipistas desatados.

Por su parte, el candidato de las izquierdas (al que el PAN-gobierno relega en términos declarativos, con la esperanza de fijar la contienda solamente entre Peña Nieto y Vázquez Mota) ha insistido en la importancia de las políticas sociales para impedir que se creen las condiciones que luego estallan a través de la delincuencia organizada.

Respecto a Tomás Yarrington, el ex gobernador de Tamaulipas acusado en Estados Unidos de actos de narcotráfico por uno de esos famosos y desconfiables testigos protegidos, López Obrador ha demandado que no se manoseen esos procesos y que, si hay pruebas contra ese ex mandatario, se les dé el curso procesal adecuado.

Astillas

Si se revisaran las listas de candidatos que están presentando los diversos partidos para integrar órganos legislativos, pareciera que nunca hubiera existido una crisis general del sistema político mexicano.

Personajes impresentables están siendo habilitados en los partidos nacionales para que garanticen a los mexicanos tres o seis años, según el tipo de cargo que se busque, de continuidad del esquema largamente impugnado.

Deberían preguntarse los secuestradores del ánimo cívico mexicano si el estado de salud del sistema aguantará a ciertos personajes como senadores durante un sexenio…

En la política tradicional, cuando se ofrecen respaldos públicos es porque se ha carecido de ellos.

Por lo pronto, la cúpula panista (no toda) ha expresado su apoyo a Isabel Miranda de Wallace, candidata a gobernar la capital del país…

A su vez, la priista Beatriz Paredes ha arrancado su campaña por el DF en compañía de su original destapador, Enrique Peña Nieto, quien sigue moviéndose solamente conforme al libreto que previamente le han elaborado…

¡Hasta mañana, en esta columna triste!

Opinión

Cónyuge y sobrina

-Pepe Grillo-

María Cardona Madero, esposa de Carlos Orvañanos, anda feliz y difundiendo que va a ser designada candidata a diputada federal por el Distrito 17 que abarca Cuajimalpa.

Dicen que la designación no es por méritos políticos propios, sino por ser esposa del actual delegado de la demarcación y sobrina del dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero…

¡Vaya, los dedazos en el PAN!

También fue subdirectora de agenda del presidente Felipe Calderón.

Capacidad no recetarios

Tersa, pero también clara y firme fue la advertencia de Eruviel Ávila a quienes intenten usar la calumnia y hacer la guerra sucia al PRI y su candidato a la Presidencia.

A cada ataque, dijo el gobernador mexiquense, millones saldrán a la defensa. “No nos piquen la cresta”.

Lo secundó la dirigente priista Cristina Díaz, quien hizo notar que la disputa electoral no es cosa de recetas de cocina ni asunto de género.

Se trata más bien de un tema de responsabilidad y de capacidades, dijo.

Peña en el Edomex

Por cierto que Enrique Peña Nieto tuvo ayer un buen día en el Estado de México, entidad que visitó por primera vez como precandidato.

En Ecatepec mostró una envidiable base de sustentación. Acudieron a un encuentro con él unos 50 mil simpatizantes y prácticamente todos los ex gobernadores.

Fue un virtual cierre del periodo de precampañas, en que ha visitado una docena de estados.

A partir del día 15 todos los presidenciables podrían, entrar por ley, en una larga zona de silencio hasta el 30 de marzo.
Los asesores del mexiquense ya analizan qué podrá hacer y qué no, sin violar la legislación.

Suspenso en Michoacán

El Tribunal Electoral ha hecho de los comicios michoacanos un proceso inepto para cardiacos.

A tres días del cambio de gobierno aún no ha resuelto los recursos de impugnación al triunfo de Fausto Vallejo.

Aunque tampoco se sabe que los adversarios del priista, es decir el PAN y la hermana del presidente Calderón, Luisa María, hayan demostrado de manera fehaciente las irregularidades que aducen.

Con Vallejo en el poder a partir del día 15, el PRI tendrá 20 gobernadores, nueve el PAN y tres el PRD.

Aquelarre en San Lázaro

En la Cámara de Diputados, el presidente Guadalupe Acosta tendrá esta tarde una encerrona con los 44 presidentes de comisiones camerales.

Buscaran entre todos la manera de darle luz verde a iniciativas importantes, pues hasta ahora sólo han sido desahogados asuntos menores, de escaso impacto social.

Será buena oportunidad también para que el nayarita explique a qué atribuye el hecho de que en dos semanas la PGR no ha avanzado en la investigación del sonado caso de espionaje en San Lázaro.

Interinato político

Elección de Estado

-Ricardo Alemán-

EXCÉLSIOR

Todos saben que el candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, ha denunciado que el gobierno federal prepara una elección de Estado, al tiempo que acusa directamente al presidente Calderón de iniciar una persecución judicial contra ex gobernadores del PRI.

A su vez, el candidato de las llamadas izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, denunció que una vez que el PAN eligió como candidata presidencial a Josefina Vázquez Mota, el PAN anuncia más de lo mismo y prepara una elección de Estado.

Por su parte, luego de tomar posesión como precandidata única del PRI al gobierno capitalino, Beatriz Paredes denunció que en el Distrito Federal los partidos opositores enfrentarán una elección de Estado que prepara el gobierno de Marcelo Ebrard.

Y si no fuera suficiente, en los gobiernos estatales en manos del PRI, panistas y perredistas se quejan de elecciones de Estado, en tanto que en las administraciones en manos del PAN, priistas y perredistas formulan similares acusaciones, pero contra los gobiernos azules.

Pero más allá de dimes y diretes —y de que los tres más importantes partidos se acusan mutuamente de usar el poder del Estado y dinero público para ganar elecciones—, lo cierto es que todos los partidos y todos los gobernantes incurren en esa irregularidad —en cada uno de sus centros de poder— para garantizar la victoria de su respectivo partido en elecciones municipales, estatales o la elección federal.

Incluso, las trampas se llevan a cabo en las elecciones internas de los tres partidos, sean del PAN, del PRI o de las llamadas izquierdas.

Y el mejor ejemplo de que las trampas también son parte de las propias estructuras de los partidos, es que el PRD y el PRI han recurrido a las encuestas para evitar el derroche y la vergonzosa exhibición de los tramposos.

Y si tienen dudas, van las evidencias.

¿Qué significa, por ejemplo, que en medio del proceso electoral que vivimos, el gobierno federal inicie una persecución judicial y fiscal contra ex mandatarios del PRI?

¿Qué significa, por ejemplo, que el propio presidente Calderón haya iniciado un activismo inusual con la renovación de programas sociales por todo el país?

Está claro, para todo el que quiera verlo, que el PAN y el gobierno de Felipe Calderón recurren a todo aquello que ese mismo partido azul denunció cuando el PRI era gobierno.

Es decir, el uso del peso de las instituciones del Estado y del dinero público, para mantener el poder.

¿Qué no era ese uno de los grandes cambios que debía producir la alternancia y la transición democráticas?

En los dos casos —la persecución fiscal y judicial del PRI y las campañas sociales— asistimos a evidencias claras de que el gobierno de Felipe Calderón está dispuesto a todo lo que sea necesario para impedir que su partido, el PAN, pierda la contienda electoral de julio próximo, frente al PRI.

Y para ello utiliza toda la fuerza del Estado.

Igual que antaño lo hizo el PRI para mantenerse en el poder; igual que lo hace el PRI en las entidades estatales.

Pero no sólo el PAN utiliza la fuerza del Estado para tratar de retener el poder federal —y los poderes estatales como Guanajuato y Jalisco, entre otros—, sino que en el Distrito Federal el PRD y las izquierdas también usan el dinero público y todo el peso del Estado para mantenerse en el control, sea del gobierno capitalino, sea en sus 16 delegaciones o en la Asamblea Legislativa.

En este caso, tiene razón el PRI respecto a las presuntas trampas que ya estarían en marcha por parte del gobierno de Marcelo Ebrard.

Pero, a su vez, el PRI tampoco está libre de culpa.

Resulta que desde los gobiernos estatales en manos del PRI —18 gobiernos locales en total—, los estrategas del partido tricolor mueven recursos políticos y económicos, especialistas y todo lo necesario, para ganar elecciones en otras entidades.

Y ese es el caso en el Distrito Federal. Resulta que los estrategas del PRI diseñaron una estrategia para ganar la capital del país, que consiste en dejar en manos de cada uno de los estados priistas, cada una de las delegaciones políticas del DF.

¿Qué quiere decir eso?

Que el PRI de cada uno de los 18 estados gobernados por el partido tricolor, se volcará para diseñar estrategias, mover recursos políticos y económicos, y especialistas, a cada delegación política del DF.

Y en una de esas ganan la elección.

Por eso la pregunta.

¿Quién prepara una elección de Estado?

Todos, PAN, PRD y PRI.

Al tiempo.

EN EL CAMINO

El PRI vetó al candidato envenenador de Guerrero.

Por lo menos se vieron sensibles.

Leo Zuckermann

“Teeeeee lo dije…”

EXCÉLSIOR

En el México autoritario había algunos espacios donde se hablaba con libertad de la política; las carpas, por ejemplo.

Recuerdo las obras memorables de Jesús Martínez Palillo, como Agarren a López…por pillo.

Era conocido —él mismo lo presumía— que Palillo trabajaba con libertad porque tenía un amparo en su bolsa.

Gracias a eso, las autoridades no lo podían arrestar o multar.

¿Por qué menciono esto?

Pues porque últimamente he pensado mucho en Palillo.

Desgraciadamente, en el México democrático de hoy se está limitando la libertad de expresión para supuestamente alentar la equidad en las competencias electorales.

A cómo vamos, los que vivimos de informar y opinar sobre la política vamos a tener que trabajar amparados.

Con un problema: el amparo no aplica en materia electoral, por lo que ni siquiera vamos a poder utilizar ese recurso jurídico, como lo hizo el gran Palillo.

Esta campaña, con sus múltiples regulaciones estúpidas, ha sido muy frustrante para los que tenemos ideas de una mejor e intensa cobertura de la competencia electoral.

Estamos teniendo que remar a contracorriente.

En primer lugar por la reforma electoral que limitó la libertad de expresión en aras de la equidad en la competencia.

Pero luego está el papel de las autoridades electorales para interpretar esa ley.

Han resultado más papistas que el Papa, sobre todo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

Incluso se han metido a juzgar si el contenido de un programa de televisión es o no propaganda pagada.

Ahí está el caso de una entrevista que concedió la candidata a la gubernatura de Michoacán por el PAN, Luisa María Calderón, a Historias Engarzadas, de TV Azteca.

Yo nunca he visto este programa que, si bien entiendo, trata sobre relatos de la farándula.

La televisora no sólo transmitió dicha entrevista sino que, al parecer, la promocionó en spots.

Al IFE llegó una queja, aduciendo que se trataba de una entrevista pagada.

El IFE resolvió que no había manera de probar que Calderón había pagado a la televisora.

Dicha decisión fue revisada por el TEPJF.

Y en una resolución vergonzosa, el Tribunal sentenció que sí se trataba de propaganda pagada y le ordenó al IFE que multara al medio de comunicación y al partido.

Yo no sé si La Cocoa Calderón pagó la entrevista.

Lo que sé es que el TEPJF no pudo probarlo.

Y en un Estado de derecho, los tribunales sólo pueden condenar con pruebas.

No se puede sentenciar a una persona de homicidio sólo porque tiene pinta de asesino.

De la misma forma, el TEPJF no puede multar a una televisora sólo porque una entrevista parece pagada.

Como las decisiones del TEPJF son finales, el IFE multará a TV Azteca y al PAN.

Acto seguido, los medios electrónicos entendieron el mensaje: la autoridad puede multarlos si consideran que algún contenido parece comprado.

Utilizo el verbo “parece” y no “es”, porque el TEPJF se arrogó el derecho a castigar lo que parece.

Aquí entra, entonces, el tercer factor que está haciendo muy frustrante el trabajo de los que informamos y opinamos sobre la política: la reacción de los medios frente a una ley estúpida y los jueces que la interpretan más estúpidamente.

Ante al riesgo de que los multen, los medios están decidiendo limitar las coberturas de las campañas al mínimo posible: no más entrevistas a candidatos, por ejemplo.

Un conductor puede quejarse de esta decisión.

La televisora, sin embargo, le pregunta: y si nos multan, ¿tú la pagas?

El comunicador, naturalmente responde que no porque no tiene ese dinero (a lo mejor estaría dispuesto a irse a la cárcel si la pena fuera corporal).

La televisora remata: ¿y yo por qué sí?

Como nadie puede pedirle a otro que pague una multa por su culpa, el conductor tiene que tragarse el sapo: no más entrevistas.

Tampoco debates porque, de acuerdo con el IFE, tienen que ser parte de un ejercicio periodístico “genuino”.

¿Y quién juzga esto?

Los nueve señores del Consejo General, que ni siquiera están de acuerdo entre ellos de lo que se vale y no, como vimos cuando discutieron este tema.

No se puede descartar, entonces, que mañana sancionen a un medio porque realizó un debate entre candidatos que no fue equitativo o periodísticamente “genuino”.

Cuando se discutía la reforma electoral de 2007, muchos dijimos que estábamos entrando a la típica pendiente resbaladiza de cuando el Estado limita la libertad de expresión: se sabe dónde comienza pero no dónde acaba.

Los hechos nos están dando la razón.

Vamos resbalando a coberturas de campañas electorales ridículamente equitativas, pero limitadas y aburridas.

Los que queremos más vigor en la discusión política nos encontramos cada vez más maniatados y frustrados.

Ridículamente tenemos que consultar a abogados de qué se puede hacer.

En mi cabeza retumba la frasecita de los spots del IFE: “teeeeeee lo dije…”

Sí, lo advertimos, y sí, está sucediendo.

Estamos regresando a las épocas de espacios limitados para hablar con libertad sobre la política.

Y a diferencia de Palillo, ni siquiera podemos defender nuestro derecho a la libertad de expresión con un amparo.

Día con Día

Primera foto de salida

-Héctor Aguilar Camín-

Interesados y ansiosos tienen ya la primera foto de lo que será el arranque de la elección presidencial mexicana de este 2012.

El jueves por la tarde, Consulta Mitofsky dio a conocer la primera encuesta nacional de intenciones de voto sobre candidatos reales.

Sus cifras de preferencias brutas, es decir, tal como la gente contestó, son Enrique Peña Nieto: 40, Josefina Vázquez Mota: 24, Andrés Manuel López Obrador: 18, No declaró: 18, y “Sin candidato definido”: 1.

Si se suprimen los que no declararon y se consideran sólo las preferencias declaradas, preferencias efectivas, entonces las cifras son: Peña Nieto: 48, Josefina Vázquez Mota: 29, Andrés Manuel López Obrador: 22, Candidato no definido: 1.

Según la propia Mitofsky, Vázquez Mota ha crecido cuatro puntos de preferencia bruta de diciembre a febrero, López Obrador 0.8 por ciento, y Peña ha perdido 2 puntos.

Puntos más, puntos menos, éstas serán las posiciones de arranque.

Parecen definir un asunto clave de la elección de 2012: quién arranca en segundo lugar y será, por tanto, el probable captador del “voto útil”, un fenómeno que se ha presentado en las dos últimas elecciones presidenciales.

El fenómeno del voto útil consiste en que los votantes cierran su atención en los dos contrincantes punteros dejando al tercer lugar muy por debajo.

La competencia en 2000 fue entre PRI y PAN, dejando al candidato de la izquierda, Cuauhtémoc Cárdenas, en un 16.6 por ciento.

Las elecciones del año 2000 se cerraron entre PAN y PRD, dejando a Roberto Madrazo, del PRI, en 22 por ciento.

Parece que la contienda en el 2012 será entre PAN y PRI.

La distancia entre ambos candidatos es grande, de 19 puntos, pero se diría que el candidato del PRI ha alcanzado un techo mientras que la del PAN se mueve al alza en una tendencia que, de mantenerse, le permitiría empatar la contienda en cuatro meses.

El problema es que no hay cuatro meses de contienda adelante.

La ley prevé una suspensión de las campañas en febrero y un mes de silencio electoral, y a su inicio formal a fines de marzo sigue la Semana Santa, de modo que los votantes volverán en sí y los candidatos a sus tribunas hasta el 10 de abril.

Empezarán entonces sus campañas con pocos instrumentos para hacer cosas que marquen una diferencia sustancial respecto de las campañas de los otros candidatos.

En particular, los candidatos no tendrán acceso libre a la televisión ni podrán atacar seriamente a sus adversarios con campañas negativas.

¿Cómo pueden remontarse 19 puntos de ventaja en esas condiciones?

Haciendo campaña por otros medios.

Teniendo otra campaña.

(Mañana: La otra campaña).

El Asalto a la Razón

Tropas eficientes… pero insuficientes

-Carlos Marín-

Tanto como la crudeza con que el general Guillermo Galván dijo el jueves que “en algunas regiones del país el espacio de la seguridad pública está totalmente rebasado” y que “es menester reconocer que es la seguridad interior la que hoy se encuentra seriamente amenazada”, llama la atención el resignado tono de humildad con que pareció atreverse a recordar que “también es lealtad proponer y solicitar respetuosamente reformas al marco legal vigente, con los propósitos de custodiar mejor a la comunidad y preservar la integridad y el prestigio de la institución…”.

Se refería, desde luego sin decirlo así, a la infame, cobarde y vilmente postergada Ley de Seguridad Nacional, cuyo proyecto tardó más de un año en el Senado antes de ser debatido, modificado y aprobado para que… la minuta lleve casi dos años congelada en la Cámara de Diputados.

“Custodiar mejor a la comunidad y preservar la integridad y el prestigio de la institución” (y, obviamente, a la Marina Armada de México).

Es el marco legal que la mezquindad legislativa y partidista viene postergando desde hace tres años, como si de lo que se tratara fuese dejar a las fuerzas armadas en riesgo de que los promotores de la claudicación del Estado ante la narcoviolencia monten comisiones y fabriquen acusaciones para juzgarlas por fantasiosas “violaciones sistemáticas” a los derechos humanos y dizque “crímenes de lesa humanidad”.

Peor aún: en su indefinición y escamoteo de la Ley de Seguridad Nacional, el Congreso demuestra tanto que no sabe distinguir entre seguridad pública y seguridad interior, como que juntas y por separado les valen punto menos que nada.

Quizá por lo mismo el divisionario general Galván aludió a la irresponsabilidad (¿puro valemadrismo?) de diputados y senadores de manera tan comedida (“… solicitar respetuosamente reformas al marco legal vigente…”).

Debió hacer ver, si no con acento enérgico sí con datos precisos, la magnitud del problema que se está enfrentando.

Aportar puntos de referencia tan sustantivos como que la ejemplar Colombia, con 45 millones de habitantes y un millón de kilómetros cuadrados (de los que la narco-guerrilla domina la tercera parte), cuenta con medio millón de soldados y 170 mil policías, en tanto que México, con 113 millones de habitantes y el doble de territorio, compartiendo tres mil 200 kilómetros de frontera con el mayor país consumidor de drogas, tiene un Ejército… poquito más grande que la policía colombiana: de 180 mil elementos mal, injustamente pagados.

Por desgracia, plantear las cosas como son y decirle pan al pan y vino al vino es exponerse a linchamientos públicos.

¿Cuántos abajo-firmantes y políticamente “correctos” impulsores de la “desmilitarización” y entreguistas “treguas” y “cambios de estrategia” pondrían el grito en el cielo si el general Galván, además del marco legal, hubiera solicitado respetuosa y suavemente mayores recursos para reclutar, capacitar, equipar y pagar mejores salarios para que el Ejército cuente con otros 300 o 400 mil soldados…?


De naturaleza política

…hasta, ¿el quince?

-Enrique Aranda-

EXCÉLSIOR

En busca de una posición —plurinominal, obvio— en el próximo Senado, el michoacano César El Impuesto Nava Ramírez representará al panismo de Tabasco; el chihuahuense Jorge El Fontanero Manzanera Quintana al de Hidalgo; el jaliciense Francisco Ramírez Acuña al de Tamaulipas y así, en interminable sucesión, su paisano (de Jalisco) Herbert Taylor, al de Nayarit, la capitalina Gabriela Cuevas a la de Baja California Sur, la guanajuatense-poblana Ana Teresa Aranda a Guerrero, y más… mucho más.

También habrá quienes lo harán por entidades donde en verdad nacieron o donde cuentan con residencia más que probada. Así, el chihuahuense Arturo García Portillo, competirá representando a sus coterráneos, Roberto Gil Zuarth lo hará por Chiapas, la capitalina primera prima, Mariana Gómez del Campo, por el Distrito Federal, Laura Estrada por su natal Durango, Marcela Torres por Querétaro, Alfredo Ling por Guanajuato, Adriana Dávila por Tlaxcala y, tras confirmarse que Alonso Lujambio será, en principio, la tercera designación a que tiene derecho el CEN blanquiazul —Ernesto Cordero y Luisa Cocoa Calderón serán los otros dos— Luis Felipe Bravo…

Es cierto que todos, tras ser votados por los panistas locales y avalado su nombre por los respectivos comités estatales, compiten al amparo de la disposición que sobre el particular define la reglamentación vigente, es decir, que sus candidaturas son legales y que, en tal virtud, pujarán ahora por ganar para sí el ánimo del mayor número de consejeros nacionales que, en sesión extraordinaria del próximo 25, deberán definir el orden en la lista de acceso —“por la autopista pluri…”, diría alguno de aquellos— a la cámara alta… y que, se prevé, serán menos de la mitad.

Ni Zacatecas ni Puebla, vale destacar, tendrán un representante formal en la referida lista, puesto que la asamblea realizada en la primera de las entidades debió cancelarse por falta de quórum, y en la segunda, la única propuesta realizada fue cancelada al negarse el registro respectivo al ex diputado Pablo Rodríguez Regordosa, por no haber renunciado con oportunidad a la posición que ocupa en el gobierno de la entidad.

No falta mucho para la extraordinaria (del Consejo Nacional blanquiazul) que “ordenará” la lista… aunque, si somos realistas, no parece que vaya a haber demasiadas sorpresas.

Lo comentaremos.

Asteriscos

*En el marco de la Operación Cicatriz iniciada tras apenas ganar la interna en Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota visitó ayer Puebla donde, más allá del vasto operativo desplegado en su contra por el elbista Rafael Moreno Valle, la ex diputada pudo “casi empatar” merced al trabajo desplegado, entre otros, por Juan Carlos Mondragón y el alcalde Eduardo Rivera…panistas, ellos sí. La última parada de este viaje iniciado en Los Pinos será el miércoles, en la Sonora de Guillermo Padrés.