medina

Razones
•    Rodrigo Medina y el síndrome Moreira
-Jorge Fernández Menéndez-
EXCÉLSIOR

Viajo con mucha regularidad a Monterrey, casi siempre por temas laborales.
En la capital regiomontana tengo muchos amigos, en el gobierno, en la oposición, en las empresas, en los medios.
Desde hace meses, en cada visita, un tema aparece en forma recurrente en las pláticas: ¿se debe ir Rodrigo Medina?, ¿debe el gobernador dejar su responsabilidad?, ¿ha sido rebasado por las circunstancias?
Parecen lejanos los tiempos en que Rodrigo parecía ser el lado B de Enrique Peña Nieto.
El joven y carismático gobernador que, con su homólogo del Estado de México, harían una suerte de dupla para regresar el poder al PRI.
Desde el inicio de su mandato, Rodrigo Medina, a pesar de contar con muy buenos elementos a su alrededor, tomó decisiones equivocadas en dos aspectos centrales: primero, subestimó la crisis de seguridad que ya era inocultable en los últimos meses de su antecesor, Natividad González Parás.
Los resultados fueron por lo menos decepcionantes durante los primeros años de su mandato.
Errores en las designaciones de los responsables de la seguridad, incapacidad de establecer una coordinación adecuada con los presidentes municipales, poca coordinación también con el gobierno federal.
Cuando se dio el incendio del Casino Royale, la situación parecía insostenible.
Hasta ese momento, otro error había estado siempre presente: la ausencia del gobernador.
Alguien le debe haber recomendado a Rodrigo Medina que no apareciera; que su nombre no fuera asociado a los hechos de violencia; que éstos fueran asumidos por mandos policiales.
Pero la gente lo percibió como un abandono y, en ocasiones, como temor. Pasaron muchos meses hasta que el gobernador comenzó a aparecer públicamente, y eso apenas fue notable cuando se dio el incendio del Casino Royale, que coincidió con la demanda de su renuncia que hizo un grupo de empresarios a Peña Nieto y a la dirigencia del PRI, primero en una reunión en Monterrey y luego en un viaje a la Ciudad de México.
En ese contexto se iniciaron cambios y se aceptó sin titubeos el apoyo federal.
Se dieron avances importantes, sobre todo en la reconstrucción de la policía estatal y en el control de la seguridad en municipios como Garza García y en la ciudad de Monterrey.
Se lanzaron iniciativas para la reconstrucción institucional y se redujo en forma importante el índice de delitos de alto impacto, sobre todo el secuestro y la extorsión en varias regiones de la capital y del estado.
Pero los municipios conurbados seguían siendo un territorio de nadie, con cambios constantes en los mandos policiales, porque la penetración del narcotráfico en éstos alcanzaba, alcanza, niveles extremos.
Los hechos de Apodaca han detonado, nuevamente, el reclamo por la renuncia de Medina.
A diferencia de lo ocurrido con el Casino Royale, donde la responsabilidad de la presidencia municipal de Monterrey, del panista Fernando Larrazabal, era evidente y hacía relativa la del gobernador, en todo lo sucedido en Apodaca resulta inocultable la cadena de yerros de la administración estatal.
El reclusorio depende directamente del estado; su director, Gerónimo Miguel Andrés Martínez, había sido literalmente corrido del penal de Santa Martha en el DF por su presunta relación con grupos criminales, sin embargo, fue recibido en Nuevo León; se supone que se le hicieron pruebas de control de confianza y fue designado director del penal.
Ahora sabemos que este hombre cobraba 40 mil pesos mensuales por dejar pasar desde celulares hasta armas a los internos.
La fuga del domingo pasado no fue por sobrecupo en el penal ni por otras causas estructurales: con la participación del director, el subdirector, el jefe de seguridad y de una veintena de custodios, se les abrió la puerta a los reos de Los Zetas para que se fugaran. Inmediatamente después se permitió el ingreso de unos 200 integrantes de esa banda criminal al dormitorio de los detenidos del cártel del Golfo, donde mataron a 44 de ellos. La responsabilidad gubernamental y la corrupción son inocultables.
¿Le debe costar el puesto a Rodrigo Medina la ineptitud o la corrupción de alguno de sus colaboradores?
En términos formales, probablemente no, pero estamos hablando de política.
El gobernador pensó que sin aparecer y apostando a su buena relación con un par de medios tendría garantizada su imagen: se equivocó.
El costo para el PRI se eleva porque, a pesar de que algunos dirigentes, como la regiomontana Cristina Díaz, secretaria general del partido, quisieron responsabilizar de lo ocurrido en Apodaca al gobierno federal, es evidente que la responsabilidad es de las autoridades locales.
Y en el plano nacional, como ya vimos con el caso de Humberto Moreira, el equipo de Peña Nieto no quiere tomar riesgo alguno y si tiene que sacrificar alguna carta para conservar posiciones y apoyos, lo hace.
No sé si el destino de Rodrigo Medina puede ser similar al de Moreira: en principio, un gobernador de Nuevo León tiene más instrumentos para salvaguardar su posición, pero de lo que no cabe duda es que ésta es hoy más endeble que nunca.
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En privado
•    Calderón: calentando la plaza
-Joaquín López Dóriga-

¡Paren las rotativas!
Que me quiero bajar. Florestán
La primera semana de la llamada inter-campaña había corrido entre el bostezo y la ausencia, sin novedad.
Los precandidatos se la llevaron flotando, ni siquiera nadando, de muertito, entre la grabación de sus spots, recuentos de daños, rediseños de campañas, encuentros con grupos y proyecciones a futuro.
Y sus partidos en el cochinero por las posiciones al Congreso con negociaciones, cesiones y nominaciones impresentables.
Y así iba todo hasta que ayer, en la reunión plenaria de los consejeros de Banamex, habló el presidente Felipe Calderón sobre el proceso electoral.
Ante 700 consejeros presentó una lámina con los resultados de una encuesta, de la Presidencia, en la que aparecía Enrique Peña Nieto con una ventaja de sólo cuatro puntos sobre Josefina Vázquez Mota, y muy atrás Andrés Manuel López Obrador, y dijo que sería un proceso muy cerrado.
No había terminado de decirlo y ya uno de los consejeros lo estaba contando a los reporteros que aguardaban afuera.
La revelación incendió el llano de la veda provocando durísimas reacciones de precandidatos y partidos contra la intervención del Presidente de la República en asuntos electorales-partidistas.
El tema explotó en la Cámara de Diputados donde la bancada panista rompió el quórum para evitar el debate por los cuatro puntos.
Al mediodía, en Radio Fórmula, Roy Campos daba a conocer el resultado de la segunda evaluación quincenal de los precandidatos, con estas cifras:
Enrique Peña Nieto, 40.6; Josefina Vázquez Mota, 24.7; Andrés Manuel López Obrador, 17.4, en línea con el promedio de otras cuatro casas encuestadoras.
Y por la tarde, la Presidencia de la República distribuía un comunicado diciendo que Calderón no opinó ni mencionó a los aspirantes presidenciales, a sus partidos o sus propuestas programáticas, lo que es tan cierto como innecesario: los nombres, con las cifras, estaban en la gráfica con la que Calderón apoyaba su intervención.
Retales
1. PIEZAS. El presidente Calderón colocó tres de sus piezas más cercanas en la lista de senadores plurinominales del PAN, vía la cuota del CEN al que le tocan las posiciones 1, 4 y 7, que son directas e inatacables.
A la cabeza va Ernesto Cordero; su hermana, Luisa María Calderón, en el 4, y Alonso Lujambio, que da una lucha heroica por su salud, en el 7. Mañana, sus listas completas;
2. DF. Miguel Ángel Mancera está teniendo un día de campo en el DF.
Según Consulta Mitofsky, lleva 42 puntos contra 19 de Beatriz Paredes y 16 de Isabel Miranda, y
3. OPACIDAD. La basura electoral que tapiza la ciudad ha rebasado la capacidad del Gobierno del Distrito Federal para retirarla: partidos y candidatos cuelgan más de la que quitan.
Sólo una pregunta: ¿de dónde sale todo ese dinero?
Porque debe salir de algún lado.


La Historia en Breve
•    El presidente Calderón tiene que corregir hoy el craso error
-Ciro Gómez Leyva-

Craso error del presidente Calderón ayer. Grueso, gordo, espeso.
¿Qué tiene que hacer el Presidente de la República mostrando una encuesta electoral en una conferencia con los consejeros de Banamex?
¿Olvidó Felipe Calderón la grave crisis de 2006?
¿Es esa la función del jefe de Estado en un país urgido de una reconciliación política?
Grueso error, por la imprudencia. Hablaba de economía, seguridad, democracia.
De repente, como si se tratara de la vieja publicidad subliminal, proyectó el gráfico de una encuesta donde Josefina Vázquez Mota aparece sólo cuatro puntos debajo de Enrique Peña Nieto.
Gordo, porque Calderón acompañó el gráfico con frases que reforzaban la creencia de un virtual empate técnico.
Espeso, porque esa encuesta (patito, la calificó con buena dosis de razón el presidente del PRI, Pedro Joaquín Coldwell) es muy poco confiable.
Las mediciones rigurosas (como la de Consulta Mitofsky de ayer) muestran una tendencia clara:
Peña Nieto está 15 puntos arriba de Josefina.
¿Con esas encuestas patito toma las decisiones el jefe del Ejecutivo?
El 23 de febrero marcará un antes y un después en el proceso electoral de 2012.
Fue el día en que el Presidente de la República se metió a la contienda, se pintó de azul, tosca, groseramente. Como un Fox cualquiera.
Más allá de si el episodio de Banamex le dé o quite puntos a “su” candidata, el presidente Calderón tiene que rectificar de inmediato, hoy mismo si se puede.
Aunque la mancha quedará, creo que hay tiempo para corregir el craso error, para comprometer que se comportará como un jefe de Estado ejemplar.
Y luego tendrá que cumplir cada día de marzo, abril, mayo y junio.
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Política cero
•    “Jelipillo, oops, did it again!”
-Jairo Calixto Albarran-

Como advertía la filósofa Britney Spears, Jelipillo, oops, did it again.
En una reunión con banqueros a puerta cerrada, advirtió, según trascendió más tarde, que de acuerdo con las encuestas de Presidencia, que casi ni están maiceadas, el Dorian Gel Peña Nieto estaría a sólo 4 puntos porcentuales de Chepina Vázquez Mota.
Esto generó a lo largo de la tarde de ayer una conmoción en el seno de la comentocracia nacional, como si eso fuera posible.
Digo, el carisma sin igual, la sonrisa preclara y el discurso emotivo de la panista darían para eso y más. Pero sobre todo, ni que el Dorian Gel fuera la reencarnación de Vaclav Havel.
Pero como el problema era de credibilidad, de inmediato Presidencia permeó el terror y reaccionaron como era de esperarse, a lo buey.
Así, mandaron un comunicado donde ni siquiera trataron de traducir las palabras del Preciso al ritmo de “lo que quiso decir…”, como en los tiempos del foxismo, sino que de plano negaban que Jelipillo se hubiera referido siquiera a los precandidatos presidenciales.
Y todo estaba tranquilo, conforme a derecho, cuando apareció uno de los consejeros de Banamex —ese banco con ideas premodernas— llamado Rodrigo Campos para declarar hasta cándidamente que el señor de Los Pinos en efecto había hablado de la estrecha distancia entre la panista y el priista. Oops, again.
Claro que para salvar la situación y colgarse de lo más pando, en el PAN se quitaron la modorra y apoyaron las declaraciones que su jefe máximo se supone que jamás dijo.
Y lo hicieron con unas encuestas guajiras donde le vienen pisando los talones al del copete.
Y repito, no es que sea imposible ganarle a Peña Nieto —después de todo es el candidato del PRIcámbrico temprano, allí donde los diplodocos hacen su nido—, lo que es dudoso es que con su arrastre de Dios mío, hazme auto-viuda por favor, se pueda tener una oportunidad.
De las pocas cosas que tiene a su favor, es que al menos no se puso unas orejas tipo salinistas como hizo la señora Wallace.
A la de ya, doña Isabel Miranda tendría que correr a los asesores (que deben ser los mismos que los de Nacho Ambriz en Chivas) que la obligaron a calzarse esas prótesis dizque para simbolizar que el Gobierno del DF no escucha a la ciudadanía.
¿Por qué afirmará Fox que la democracia es una marranada?
Si Calderón quería que sus lucubraciones electorales no trascendieran, tenía que haber seguido la máxima de Fidel Velázquez:
“Si lo piensas, no lo digas; si lo dices, no lo escribas; si lo escribes no lo firmes; si lo firmas… ¡échate pa’ atrás!”.
Oops!
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Clase Política
•    Presidencia y opinión pública
-Miguel Ángel Rivera-

Haiga sido como haiga sido, la Presidencia de la República tiene el derecho de medir la opinión pública.

Lo que sorprende es saber que existe una oficina –o se contrató a un despacho externo– para conocer las preferencias electorales.
Esto viene al caso por la declaración –después desmentida oficialmente– del presidente Felipe Calderón en el sentido de que la candidata de su partido, Josefina Vázquez Mota, está apenas cuatro puntos atrás del puntero en las encuestas, el priísta Enrique Peña Nieto.
La cosecha
Las expresiones del presidente Calderón “revelan que la guerra sucia está en marcha y que cada día que pase aumentará de intensidad”, comentó el coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, Francisco Rojas Gutiérrez, al sostener que con sus manifestaciones de preferencia electoral el presidente Calderón, además de violar la ley, incurriría en desvío de recursos públicos en favor de su partido…
El PRI demanda enérgicamente al gobierno federal poner fin a su doble discurso, en el sentido de que por un lado calla y por el otro alienta a su partido, el PAN, para agredir al gobernador de Nuevo León, dijo el presidente del tricolor, Pedro Joaquín Coldwell…
Con absoluto respeto a la legislación electoral, me parece que el Ejecutivo y el gobierno deben mantenerse al margen del proceso y todos los niveles del gobierno deberán dar garantías para un proceso transparente que permita la participación ciudadana y que sea la sociedad quien elija a sus autoridades, afirmó el precandidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto…
Al suscribir la extensión de un convenio de colaboración entre gobierno federal y gobierno de Nuevo León, el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, reconoció que las autoridades de esa entidad están haciendo un esfuerzo serio, institucional, en la renovación de las distintas áreas de sus instituciones de seguridad pública…
Ahora resulta que hay dos competidores para el rescate de Mexicana de Aviación.
El juez rector del concurso mercantil, Felipe Consuelo, informó que tanto Med Atlántica como Union Swiss han demostrado la existencia y disponibilidad de los recursos necesarios para la capitalización de la aerolínea…
Vamos a llegar a la convención de delegados con toda la fuerza de la militancia, con ideales de justicia, diciéndole sí a la inclusión, la cual comprende programas de desarrollo para las mujeres y hombres a fin de que les permita superarse, aseguró el precandidato del PRI al gobierno de Tabasco, Jesús Alí de la Torre, durante una gira por Tacotalpa…
El gobernador del estado de México, Eruviel Ávila, y el director de Telmex, Héctor Slim Seade, firmaron un convenio por el cual 15 municipios de esa entidad tendrán hasta 60 por ciento de reducción en las tarifas telefónicas de larga distancia y además permitirá instalar sitios wi-fi de acceso gratuito a Internet en las cabeceras municipales…
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Astillero
•    Felipe el activista
•    Cerrar a dos la pelea
•    Desplazar a AMLO
•    Cómicas correcciones
-Julio Hernández López-

Desesperado e imprudente, Felipe Calderón confirmó ayer de manera escandalosa su plena disposición intervencionista a favor de la candidata presidencial de su partido.
Aun cuando es ampliamente aceptado en estos momentos que el aspirante priista, Enrique Peña Nieto, lleva una cómoda delantera, según diversas encuestas de opinión (aunque igualmente se establece en esos estudios que la diferencia respecto a sus competidores se va reduciendo), el presidente nacional del PAN, el mencionado Calderón, consideró necesario empeñar las prendas de equilibrio institucional que deberían acompañar a la institución presidencial y convertirse en un activista sin límites que en un lance descuadrado trató de colocar en lo alto la cartulina con el nombre de la representante de su bandería durante un encuentro con ejecutivos bancarios.
Aun cuando en términos jurídicos pudiera eludirse la aplicación de un castigo a tales palabras impropias de un presunto representante general de todos los mexicanos, el episodio de los increíbles cuatro puntos de diferencia entre Vázquez Mota y Peña Nieto exhibe al militante Calderón en una suerte de fotografía de combate que ayuda a suponer el grado de involucramiento ilegítimo al que está decidido a llegar quien hoy detenta el beligerante aparato federal de poder.
Legalidad tragicómica: los candidatos deben guardar silencio en este lapso llamado entrecampañas, mientras el gobierno federal josefinista inunda espacios mediáticos con propaganda que a fin de cuentas apoya la continuidad del panismo y mientras el propio Felipe anuncia hipotéticos resultados de encuestas electorales facciosas y proclama con un golpe de saliva el crecimiento descomunal de su Chepina un tanto pasmada.
Como era de preverse, los priistas aprovecharon el regalo en bandeja de plata que con su torpeza declarativa les regaló el jefe de campaña de Chepina.
De inmediato exploraban la posibilidad de hacer ruido jurídico, presentando alguna denuncia ante fiscalías, institutos y tribunales electorales, según fuera el caso, y trataron de convertir el tema en materia de debate en la Cámara de Diputados aunque los panistas hicieron el vacío a la sesión de ayer para impedir que el grave desliz felipista fuera debatido en esa tribuna legislativa.
López Obrador se lanzó contra la mayoría de esos sondeos que, dijo sin morderse la lengua, suelen ser orientados en función del interés de quienes los pagan (el tabasqueño es candidato gracias a una presunta encuesta de opinión de la que no se supo más, arreglado más bien el asunto en términos políticos entre los dos contendientes finales, AMLO y Ebrard, y a partir de ese milagro sin metodología reconocida se instauró en las izquierdas electoreras el reino de las santificadas encuestas para decidir candidaturas a otros cargos, siempre bajo la confiable supervisión de la mano santa del arcángel Camacho).
Enredo y escándalo político que alcanzaron niveles de comicidad cuando Los Pinos hicieron saber que no era cierto lo que decían que había dicho Felipe Calderón.
Redacción ambigua al decir que Calderón en ningún momento opinó ni mencionó a los aspirantes presidenciales en contienda, sus partidos o sus propuestas programáticas.
¡Pero la acusación no era por haber opinado o mencionado genéricamente esos puntos, sino por decir que su candidata, Chepina, estaba a cuatro puntos de alcanzar a Quique!
Respecto a este tema concreto, Los Pinos dijo que Felipe Comentó, también, información que muestra una elección presidencial muy competitiva.
Qué duda cabe, tenemos una democracia muy vigorosa, un electorado muy responsable.
Y que va a haber una elección competida. Redacción intencionalmente elaborada para dejar las puertas abiertas para acomodos de última hora, aceptando sin aceptar, precisando sin precisar.
Las andanzas intervencionistas de Calderón recuerdan los ánimos desbordados de Vicente Fox en 2006, cuando utilizó todo cuanto le fue posible para apoyar a su ahora adelantado alumno.
Los abusos del ex gobernador de Guanajuato motivaron reformas electorales que ahora son calificadas por él mismo de marranadas, según mencionaron ayer diversos consejeros electorales, entre ellos Leonardo Valdés Zurita.
El uso del aparato gubernamental a favor de un aspirante ya fue puntualizado jurídicamente por el tribunal electoral en 2006 aunque no hubo mayor sanción.
Ahora, Calderón apuesta a la posibilidad de transgredir las normas que sea necesario, con tal de apuntalar al josefinismo desvaído.
Por lo pronto, FC ha consolidado la aspiración de centrar el debate entre PAN y PRI al asegurar que conforme a sus encuestas particulares la yegua de blanco y azul va alcanzando al cuaco copetón de tres colores.
Eso es, a fin de cuentas, lo importante para el proyecto bipartidista: instalar en la opinión pública la percepción de que la pelea verdadera será entre Peña Nieto y Vázquez Mota, desplazando a López Obrador a un tercer lugar y golpeándolo incluso con la especie de presuntas enfermedades, en lo que sería una forma de intento de desafuero médico, según señaló ayer el coordinador de la campaña del tabasqueño, Ricardo Monreal.
Por otro lado, el acelere felipista opacó el tema de los negocios petroleros compartidos con la potencia vecina. Primero fírmenlos y después virigüen, ha sido la consigna que ha mantenido respecto a los Tratados Clinton el hermano de la futura senadora Cocoa.
Palo mediático dado, ni el Senado lo quita, aun cuando algunos legisladores federales anuncian que investigarán a fondo las implicaciones del gran negocio de este sexenio y otros más.
Y, mientras la periodista Olga Wornat ha denunciado que la editorial Planeta le canceló un contrato para publicar un libro de 500 páginas sobre el sexenio en curso, entre amenazas a la propia editorial y a la escritora, en el contexto de una mafia calderonista y bajo presiones desde el poder, ¡feliz fin de semana, con Humberto Moreira anunciando que no buscará candidatura a diputado o senador!
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Opinión
•    Una de patos
-Pepe Grillo-

¿Jugada maquiavélica o chambonada?

¿Se tropezó o fue plan con maña?

Unos dicen que planteó una provocación irresistible, otros que violó el espíritu de la veda.

Hay quien asegura que tiene una encuestadora patito, y otros que ese pato tienen colmillos.

Lo cierto es que los famosos 4 puntos fueron trending topic unas cuantas horas; hasta que otro, con reputación intachable, aseguró que son 16 puntos.

¿Fue dato duro o sueño guajiro?

Un tango

El primer paso de la estrategia es sacar a López Obrador de la contienda. Volverlo irrelevante.

Que el tabasqueño tenga, en el 2012, el papel que tuvo en el 2006 su paisano Roberto Madrazo. O sea, destinarlo a un lejano tercer lugar.

La idea es que la campaña sea cosa de dos. Un tango, pues.

El Peje, de cualquier forma y por iniciativa propia, se rezaga. Está agotado.

Josefina Vázquez Mota ya lo ve por el espejo retrovisor.

Ése es al menos el guión del PAN, falta ver qué traman los de la acera de enfrente.

Furibundo

Vicente Fox logró lo que quería: que alguien le hiciera caso.

El consejero presidente del IFE mordió el anzuelo.

El marco legal electoral vigente, dijo Leonardo Valdés, se diseñó para evitar que los políticos hagan hoy las trampas que el guanajuatense hizo ayer.
Trampas como su larguísima precampaña, de más de tres años; el oscuro financiamiento de los “Amigos de Fox” y a su papel en la fallida intentona del desafuero.

De acuerdo.

¿Por qué en lugar de castigar a Fox, que se lo merecía, castigaron a los que no tenían vela en el entierro?

Por un pecador pagaron muchos justos.

Presunción

Hubo que asistir al foro denominado “Temas selectos del agua” para escuchar una voz sensata hablar de… la crisis en los penales.

En efecto, en el marco de ese evento acuífero, Miguel Mancera, precandidato de las corrientes de izquierda la Jefatura de Gobierno, destacó la necesidad de despresurizar el sistema penal.

O sea, que sólo los acusados de delitos graves se queden tras las rejas y los demás a la calle, para evitar sobrepoblación.

En pocas palabras, no más Presuntos Culpables, por algo lo dirá.

Refugio

Parecía que no, pero sí.

El nombre de Fernando Larrazabal, alcalde de Monterrey, apareció en la lista de aspirantes a una diputación plurinominal.

El sentido común recomendaba, para evitar sorpresas desagradables, poner sana distancia.

El PAN tomó un riesgo innecesario.

Es seguro por ahí había otros aspirantes regios con ganas y merecimientos de tener una curul.

¿Qué harán si otros empresarios denuncian que el hermano del presidente municipal les vendía queso Oaxaca a precio de plutonio enriquecido?

No más carbono

La candidatura presidencial de Gabriel Quadri colocará en el radar de la opinión pública en los próximos meses el tema de la política ambiental sustentable.

Hay que responder, entre todos, una pregunta central: ¿cómo disminuir pronto las emisiones de bióxido de carbono?

Según Quadri, se requieren cambios institucionales de gran calado.

De esos cambios se tratará su campaña.
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Interinato político
•    Calzón criminal
-Ricardo Alemán-
EXCÉLSIOR

Ahora resulta que, según los “sacerdotes” del IFE, es un “delito de lesa elección” que un ciudadano de a pie, profesional del boxeo, decida utilizar un calzoncillo con un logotipo del PRI.
Resulta que, según el IFE, es un delincuente electoral el boxeador que, en una pelea que se llevó a cabo en Las Vegas, decidió bordar un logotipo del PRI en el calzoncillo que utilizó en una pelea.
Y es un delito usar el logotipo del PRI, a pesar de que la pelea de box se llevó a cabo a miles de kilómetros de Michoacán, en donde al mismo tiempo se efectuaban las elecciones estatales.
Y es que resulta que la moderna democracia electoral mexicana criminaliza a un ciudadano común y corriente, como el boxeador Juan Manuel Márquez —que tiene la suerte y/o la desgracia de aparecer en televisión gracias a su trabajo como boxeador—, por “cometer el delito” de exhibir en su calzón profesional un logotipo del partido de sus preferencias, el PRI.
Es decir, que el tufo fascista que se respira entre quienes se desempeñan como “sacerdotes” del IFE —por orden de los no menos enloquecidos magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) — convirtieron en criminal electoral a un boxeador, por el hecho de “cometer el delito” de tener un pésimo gusto en su forma de vestir —al bordar el logotipo tricolor en su ropa de trabajo— y por simpatizar con un partido político, como el PRI.
Y claro, por creer que tiene el derecho de expresar su militancia, en los medios que le plazcan.
¿Pero cuál fue el descocado y delirante argumento de los “próceres de la democracia electoral”, que cobran millones de pesos por regalarnos sus genialidades?
Casi nada, que el boxeador profesional llamado Juan Manuel Márquez habría cobrado dinero por bordar en su ropa de trabajo el logotipo del PRI, durante un encuentro que se llevó a cabo en Las Vegas, Nevada, Estados Unidos.
Malévolo, el boxeador Márquez habría diseñado esa maniobra, porque sabía que su pelea se difundiría en todo México y, claro, en Michoacán, donde millones de electores indecisos esperaban línea para votar por el PRI.
Ese es el “impecable razonamiento”.
El problema es que nadie se traga tamaño engaño, en especial cuando hoy todos saben que los consejeros del IFE y sus similares del TEPJF actúan por consigna partidista y a favor de sus respetivos promotores; sean del PRI, del PAN o del PRD.
¿De veras creen los “sacerdotes del IFE” que alguien se va a creer el cuento de que el logotipo del PRI, en el calzoncillo de un boxeador que sostiene una pelea en Las Vegas, pudo influir en la intención del voto, en una elección como la de Michoacán?
¿De verdad creen que las televisoras que trasmitieron la pelea de Márquez se sumaron a ese dizque perversa campaña de proselitismo emprendida desde la capital del juego?
Lo cierto es que, en el fondo, asistimos a la confirmación de que el IFE y el TEPJF —que debieran ser los garantes de las libertades democráticas— en realidad se han convertido en los modernos represores de las libertades básicas.
Y es que esos “sacerdotes de la democracia” electoral mexicana hoy reprimen el ejercicio de libertades fundamentales —como la libertad de expresión—, igual que antaño reprimían esas mismas libertades los gobiernos del PRI.
Pero lo verdaderamente escandaloso es que nunca nadie pudo probar que el boxeador Márquez haya cobrado un solo peso por exhibir el logo del PRI y menos que las televisoras hayan pretendido influir en el proceso electoral michoacano, con esa pelea de box.
¿Y entonces qué hay detrás de esa descocada resolución del IFE y de la orden que, en ese mismo sentido, le dio el TEPJF?
La respuesta es elemental. El IFE y el Tribunal Electoral parecen haberse sumado a la guerra sucia contra un partido político; parece que ya son parte de la guerra del ventilador que salpica de estiércol a todos los actores del proceso electoral.
En otras palabras, que abundan las evidencias de que el IFE ya se alineó contra el PRI.
¿Y por qué el escándalo del calzón es un atentado a las libertades básicas?
Porque un ciudadano de a pie, como un boxeador, no se puede vestir con ropa de trabajo que tenga el logotipo de un partido, porque entonces es considerado criminal electoral; porque la vestimenta también es parte de la expresión corporal de los ciudadanos.
Y también esa libertad la censuran el IFE y el TEPJF.
¿Qué sigue; quién sigue?
EN EL CAMINO
¿Cuántas curules y escaños servirán como manto de impunidad?
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Leo Zuckermann
•    ¿Quién va a ganar los Óscares este domingo?
EXCÉLSIOR

El Oscar a la mejor película se lo va a llevar El artista. Hay 91% de probabilidad de que eso suceda.
De ser así, la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos reconocerá a uno de los proyectos cinematográficos más fascinantes, arriesgados y estupendamente logrados de hace muchos años: una película muda filmada en blanco y negro en estas épocas de sonido envolvente, tercera dimensión, efectos especiales y animación por computadora.
En cuanto al Oscar al mejor actor, aquí el asunto estará más competido. Jean Dujardin cuenta con 69% de posibilidades de levantar el domingo la estatuilla por su trabajo en El artista.
El otro que tiene alguna probabilidad de ganar, 33%, es George Clooney por el papel que protagonizó en Los descendientes.
Me temo que es muy poco probable, estamos hablando de menos del uno por ciento, que el mexicano Demián Bichir se lleve el triunfo por su actuación en Una vida mejor.
En cuanto al Oscar a la mejor actriz las probabilidades se han movido en los últimos días. Meryl Streep comenzó siendo la favorita por su papel como Margaret Thatcher en el filme La Dama de Hierro.
Sin embargo, Viola Davis cerró fuerte y hoy tiene una probabilidad de 61% de llevarse el Oscar por su actuación en The Help, que en español ridículamente titularon como Vidas cruzadas.
La de Streep es de 38 por ciento.
En este rubro, al parecer, habrá una competencia cerrada.
Podría haber sorpresas.
No así en el premio al mejor director. Aquí todo indica que Michael Hazanavicius se llevará el Oscar por su excelso trabajo en El artista.
Tiene 83% de probabilidad de que así sea.
En el camino dejará sentado en la butaca al grandísimo Martin Scorsese por su fantástica película La invención de Hugo Cabret; este director cuenta con una probabilidad de 10% de ganar.
El Oscar al mejor actor de reparto se lo llevará Christopher Plummer, por la magnífica interpretación de un hombre de la tercera edad que, al morir su esposa, decide salir del clóset y vivir felizmente como homosexual.
No hay duda que este artista se lo merece.
Su probabilidad de ganar es de 96 por ciento.
Como se lo merece Octavia Spencer, quien tiene una posibilidad similar, de 93%, por el papel que desempeñó como una empleada doméstica que decide vengarse de una manera muy peculiar de su antigua patrona en Vidas cruzadas.
La estatuilla dorada al mejor filme animado se la llevará Rango, con 85% de probabilidad.
Muy lejos se encuentra Chico & Rita, con 11 por ciento.
¿De dónde saco estas predicciones y las probabilidades asociadas?
Como siempre, recurro a las apuestas de intrade.com.
Eso es lo que están pronosticando los apostadores.
Y como suelo machacar en este espacio: las apuestas son el mejor instrumento para predecir un evento.
Muy pocas veces fallan.
Veremos si este domingo vuelve a ser el caso.
Finalmente: este fin de semana puede haber una excelente noticia para México. Todo indica que el cineasta mexicano Emmanuel Lubezki ganará el Oscar a la mejor fotografía por la película El árbol de la vida.
Es la quinta vez que la Academia nomina al Chivo para este premio.
En 1996 lo hizo por su trabajo en La princesita; en 2000, por El jinete sin cabeza; en 2006, por El nuevo mundo, y en 2007, por Niños del hombre.
Yo no tengo la menor duda de que Emmanuel se merece el Oscar y, como “no hay quinta mala”, ahora sí subirá al escenario del teatro Kodak este domingo en Los Ángeles.
Me tranquiliza saber que es el favorito en otro sitio de apuestas.
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Día con Día
•    Precisiones de Luis Carlos Ugalde
-Héctor Aguilar Camín-

Me escribe Luis Carlos Ugalde, presidente consejero del IFE en 2006, para precisar detalles claves de la noche electoral de ese año, en relación con lo dicho en mi columna “El silencio y la tormenta” (22/2/12).
El IFE, recuerda Ugalde, sí dio los resultados la noche del 2 de julio de 2006: ese resultado era que la elección estaba tan cerrada que era imposible conocer el nombre del ganador.
Lo que el IFE reservó por petición de los partidos, en especial el PRI, fue dar los rangos de votación en que se ubicaban los candidatos.
El conteo rápido del IFE, dice Ugalde, permitía detectar a un ganador aun bajo una diferencia de 0.6 por ciento, un ejercicio de enorme precisión.
(La diferencia en 2006 fue de 0.56).
Como los conteos rápidos son proyecciones probabilísticas, el resultado que arrojan son rangos de votación por candidato, mas no estimadores únicos.
El PRI argumentaba que dar esos rangos en una elección muy cerrada llevaría a que los dos candidatos punteros desataran una guerra de cifras.
Propuso que en caso de empate se anunciara, pero no se dieran los rangos de votación.
Todos los partidos estuvieron de acuerdo y así se acordó diez días antes de la jornada electoral.
Este fue el acuerdo al que se ciñó el consejero presidente aquella noche.
Le entregaron un sobre lacrado diciendo que era imposible “saber con precisión el nombre del ganador”, y así lo anunció.
A continuación sucedió justo lo que se quería evitar:
Los punteros se lanzaron contra el IFE, recuerda Ugalde.
En el Zócalo gritaron fraude.
En la sede del PAN chiflaron y nos llamaron cobardes.
Argumentas en tu artículo, sigue Ugalde, que no dar la información de los rangos de votación dio lugar a la tormenta que México vivió en 2006.
Lo dudo.
Si el IFE lo hubiera hecho, seguramente en el Zócalo los gritos de fraude habrían sido más agudos y López Obrador habría adelantado su acusación de robo, misma que sí realizó, pero días después.
Por su parte, Felipe Calderón habría adelantado su triunfo “inobjetable”.
Creo que el comportamiento oportunista e irresponsable de los dos candidatos punteros habría sido semejante.
El asunto central, dice Luis Carlos, es que el IFE no decidió cómo dar los resultados la noche del 2 de julio.
El protocolo de difusión fue acordado con los partidos y ratificado por el Consejo General del instituto diez días antes.
El IFE no podía imponer su voluntad porque eso hubiera implicado que los propios partidos desconocieran por adelantado el conteo rápido, como amenazó el PRI en varias ocasiones.
Está claro que los partidos, bajo el liderato del PRI, maniataron al IFE con sus erróneos o perversos acuerdos de difusión de resultados.
No deben maniatarlo de nuevo.

El Asalto a la Razón
•    “Por cierto, aquí traigo… una bomba”
-Carlos Marín-

La presidencial de ayer ante los consejeros de Banamex fue una gran provocación, obviamente deliberada.
Impensable imaginar que, animado por los aires de la democracia y en plena veda preelectoral, Felipe Calderón dijera de pronto algo así como:
“Por cierto, fíjense ustedes que aquí traigo una lámina de alguna encuesta mandada a hacer por mi partido a una empresa que casi nadie conoce, y… discúlpenme por favor, debí traer también, pero no, otras que igualmente son del dominio público sobre preferencias electorales; pero, si ustedes me lo permiten… A ver, ¿alguien podrá pedirle a quien esté operando las pantallas que, por favor, proyecte esta hojita?”
Como haiga sido, presentó la gráfica en una reunión privada, ante ¡700 personas!
Quién sabe si la provocación (con Josefina Vázquez Mota dizque “pisándole los talones” a Enrique Peña Nieto) le funcionará para que gane su correligionaria, pero la imprudencia lo ha puesto en el centro de un pleito político absurdo, del que no tenía la menor necesidad.


Nudo gordiano
•    Lo que dijo el Presidente
-Yuriria Sierra-
EXCÉLSIOR

Cualquier democracia que se precie de serlo, sabe de libertades.
Así que la nuestra no se debería detener en el debate de la forma ni el contexto.
Lo que ayer el presidente Felipe Calderón declaró en una reunión con banqueros es, finalmente, un enunciado que no rompe o infringe alguna regla.
No hizo campaña a favor de nadie, tampoco dijo nombres (o eso es lo que dijo Presidencia) ni utilizó recursos públicos para la compra de votos.
Es más, en la tarde, Juan Molinar Horcasitas declaró que la encuesta la había pagado el PAN.
Apenas si hizo alusión a que, según los números que Presidencia ha recabado para sus estudios de opinión, la contienda electoral de este año será muy cerrada.
Que son sólo cuatro puntos de ventaja los que separan al puntero del segundo lugar.
Todos sabemos a quiénes se refieren.
Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota.
Según los reportes en manos de Los Pinos, porque la reunión debió ser a puerta cerrada y todo este escándalo se inició cuando uno de los asistentes escribió en su cuenta de Twitter lo que el Presidente decía, la contienda está casi en empate: cuatro puntos de distancia que no coinciden con el resto de los estudios de opinión que son de todos conocidos.
O sea, que el segundo lugar va repuntando.
El punto es que, finalmente, el Presidente está en todo su derecho de hablarlo así en reuniones privadas.
De igual forma, también Presidencia, la nuestra como todas las del mundo, en realizar estudios de opinión para sondear el panorama en vísperas de la elección.
No es tema nuevo, se hace en todas las democracias.
No se dijo algo que pudiera considerarse acto de campaña, sino un hecho que sustentó lo que en los escritorios de Los Pinos se tiene.
Enrique Peña Nieto salió a defender sus números, mismos que le dan alrededor de quince puntos de ventaja frente a Josefina, y le recomendó al Presidente cambiar de casa encuestadora.
Andrés Manuel López Obrador, en un arrebato que lo hizo escupir al cielo, dijo que cualquier encuesta es engañosa, porque comúnmente están hechas a modo, ¿pues qué no fue mediante una de ellas que hoy es candidato presidencial?
Lo que sí es tema que debe vigilarse es que esas encuestas que realiza el Estado no desvíen recursos de programas federales o sociales.
Ahí es donde se tendrían que poner las miradas y el debate.
Finalmente, las reacciones de todos son únicamente para defender su postura.
Los números seguirán saliendo de todos lados y, por lo visto, con muchas variantes, pero los procesos electorales siempre tensan así los escenarios.
Por lo pronto, el IFE pidió a Felipe Calderón que se mida en sus declaraciones.
También se lo dijo al ex presidente Fox por haber mencionado eso de que su ley electoral era una marranada.
Y, bueno, esto podríamos considerarlo una llamada de atención, pero también como una medida para prevenir complicaciones en una contienda electoral que se vivirá con leyes muy confusas, donde todo se puede malinterpretar y sacarle provecho según convenga.
Aunque eso no sea materia, como dije al principio, de una democracia que presuma de serlo.

24/02/ 2012|  Temas Editoriales

Temas Editoriales

Razones
•    Rodrigo Medina y el síndrome Moreira
-Jorge Fernández Menéndez-
EXCÉLSIOR
Viajo con mucha regularidad a Monterrey, casi siempre por temas laborales.
En la capital regiomontana tengo muchos amigos, en el gobierno, en la oposición, en las empresas, en los medios.
Desde hace meses, en cada visita, un tema aparece en forma recurrente en las pláticas: ¿se debe ir Rodrigo Medina?, ¿debe el gobernador dejar su responsabilidad?, ¿ha sido rebasado por las circunstancias?
Parecen lejanos los tiempos en que Rodrigo parecía ser el lado B de Enrique Peña Nieto.
El joven y carismático gobernador que, con su homólogo del Estado de México, harían una suerte de dupla para regresar el poder al PRI.
Desde el inicio de su mandato, Rodrigo Medina, a pesar de contar con muy buenos elementos a su alrededor, tomó decisiones equivocadas en dos aspectos centrales: primero, subestimó la crisis de seguridad que ya era inocultable en los últimos meses de su antecesor, Natividad González Parás.
Los resultados fueron por lo menos decepcionantes durante los primeros años de su mandato.
Errores en las designaciones de los responsables de la seguridad, incapacidad de establecer una coordinación adecuada con los presidentes municipales, poca coordinación también con el gobierno federal.
Cuando se dio el incendio del Casino Royale, la situación parecía insostenible.
Hasta ese momento, otro error había estado siempre presente: la ausencia del gobernador.
Alguien le debe haber recomendado a Rodrigo Medina que no apareciera; que su nombre no fuera asociado a los hechos de violencia; que éstos fueran asumidos por mandos policiales.
Pero la gente lo percibió como un abandono y, en ocasiones, como temor. Pasaron muchos meses hasta que el gobernador comenzó a aparecer públicamente, y eso apenas fue notable cuando se dio el incendio del Casino Royale, que coincidió con la demanda de su renuncia que hizo un grupo de empresarios a Peña Nieto y a la dirigencia del PRI, primero en una reunión en Monterrey y luego en un viaje a la Ciudad de México.
En ese contexto se iniciaron cambios y se aceptó sin titubeos el apoyo federal.
Se dieron avances importantes, sobre todo en la reconstrucción de la policía estatal y en el control de la seguridad en municipios como Garza García y en la ciudad de Monterrey.
Se lanzaron iniciativas para la reconstrucción institucional y se redujo en forma importante el índice de delitos de alto impacto, sobre todo el secuestro y la extorsión en varias regiones de la capital y del estado.
Pero los municipios conurbados seguían siendo un territorio de nadie, con cambios constantes en los mandos policiales, porque la penetración del narcotráfico en éstos alcanzaba, alcanza, niveles extremos.
Los hechos de Apodaca han detonado, nuevamente, el reclamo por la renuncia de Medina.
A diferencia de lo ocurrido con el Casino Royale, donde la responsabilidad de la presidencia municipal de Monterrey, del panista Fernando Larrazabal, era evidente y hacía relativa la del gobernador, en todo lo sucedido en Apodaca resulta inocultable la cadena de yerros de la administración estatal.
El reclusorio depende directamente del estado; su director, Gerónimo Miguel Andrés Martínez, había sido literalmente corrido del penal de Santa Martha en el DF por su presunta relación con grupos criminales, sin embargo, fue recibido en Nuevo León; se supone que se le hicieron pruebas de control de confianza y fue designado director del penal.
Ahora sabemos que este hombre cobraba 40 mil pesos mensuales por dejar pasar desde celulares hasta armas a los internos.
La fuga del domingo pasado no fue por sobrecupo en el penal ni por otras causas estructurales: con la participación del director, el subdirector, el jefe de seguridad y de una veintena de custodios, se les abrió la puerta a los reos de Los Zetas para que se fugaran. Inmediatamente después se permitió el ingreso de unos 200 integrantes de esa banda criminal al dormitorio de los detenidos del cártel del Golfo, donde mataron a 44 de ellos. La responsabilidad gubernamental y la corrupción son inocultables.
¿Le debe costar el puesto a Rodrigo Medina la ineptitud o la corrupción de alguno de sus colaboradores?
En términos formales, probablemente no, pero estamos hablando de política.
El gobernador pensó que sin aparecer y apostando a su buena relación con un par de medios tendría garantizada su imagen: se equivocó.
El costo para el PRI se eleva porque, a pesar de que algunos dirigentes, como la regiomontana Cristina Díaz, secretaria general del partido, quisieron responsabilizar de lo ocurrido en Apodaca al gobierno federal, es evidente que la responsabilidad es de las autoridades locales.
Y en el plano nacional, como ya vimos con el caso de Humberto Moreira, el equipo de Peña Nieto no quiere tomar riesgo alguno y si tiene que sacrificar alguna carta para conservar posiciones y apoyos, lo hace.
No sé si el destino de Rodrigo Medina puede ser similar al de Moreira: en principio, un gobernador de Nuevo León tiene más instrumentos para salvaguardar su posición, pero de lo que no cabe duda es que ésta es hoy más endeble que nunca.
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En privado
•    Calderón: calentando la plaza
-Joaquín López Dóriga-

¡Paren las rotativas!
Que me quiero bajar. Florestán
La primera semana de la llamada inter-campaña había corrido entre el bostezo y la ausencia, sin novedad.
Los precandidatos se la llevaron flotando, ni siquiera nadando, de muertito, entre la grabación de sus spots, recuentos de daños, rediseños de campañas, encuentros con grupos y proyecciones a futuro.
Y sus partidos en el cochinero por las posiciones al Congreso con negociaciones, cesiones y nominaciones impresentables.
Y así iba todo hasta que ayer, en la reunión plenaria de los consejeros de Banamex, habló el presidente Felipe Calderón sobre el proceso electoral.
Ante 700 consejeros presentó una lámina con los resultados de una encuesta, de la Presidencia, en la que aparecía Enrique Peña Nieto con una ventaja de sólo cuatro puntos sobre Josefina Vázquez Mota, y muy atrás Andrés Manuel López Obrador, y dijo que sería un proceso muy cerrado.
No había terminado de decirlo y ya uno de los consejeros lo estaba contando a los reporteros que aguardaban afuera.
La revelación incendió el llano de la veda provocando durísimas reacciones de precandidatos y partidos contra la intervención del Presidente de la República en asuntos electorales-partidistas.
El tema explotó en la Cámara de Diputados donde la bancada panista rompió el quórum para evitar el debate por los cuatro puntos.
Al mediodía, en Radio Fórmula, Roy Campos daba a conocer el resultado de la segunda evaluación quincenal de los precandidatos, con estas cifras:
Enrique Peña Nieto, 40.6; Josefina Vázquez Mota, 24.7; Andrés Manuel López Obrador, 17.4, en línea con el promedio de otras cuatro casas encuestadoras.
Y por la tarde, la Presidencia de la República distribuía un comunicado diciendo que Calderón no opinó ni mencionó a los aspirantes presidenciales, a sus partidos o sus propuestas programáticas, lo que es tan cierto como innecesario: los nombres, con las cifras, estaban en la gráfica con la que Calderón apoyaba su intervención.
Retales
1. PIEZAS. El presidente Calderón colocó tres de sus piezas más cercanas en la lista de senadores plurinominales del PAN, vía la cuota del CEN al que le tocan las posiciones 1, 4 y 7, que son directas e inatacables.
A la cabeza va Ernesto Cordero; su hermana, Luisa María Calderón, en el 4, y Alonso Lujambio, que da una lucha heroica por su salud, en el 7. Mañana, sus listas completas;
2. DF. Miguel Ángel Mancera está teniendo un día de campo en el DF.
Según Consulta Mitofsky, lleva 42 puntos contra 19 de Beatriz Paredes y 16 de Isabel Miranda, y
3. OPACIDAD. La basura electoral que tapiza la ciudad ha rebasado la capacidad del Gobierno del Distrito Federal para retirarla: partidos y candidatos cuelgan más de la que quitan.
Sólo una pregunta: ¿de dónde sale todo ese dinero?
Porque debe salir de algún lado.

La Historia en Breve
•    El presidente Calderón tiene que corregir hoy el craso error
-Ciro Gómez Leyva-

Craso error del presidente Calderón ayer. Grueso, gordo, espeso.
¿Qué tiene que hacer el Presidente de la República mostrando una encuesta electoral en una conferencia con los consejeros de Banamex?
¿Olvidó Felipe Calderón la grave crisis de 2006?
¿Es esa la función del jefe de Estado en un país urgido de una reconciliación política?
Grueso error, por la imprudencia. Hablaba de economía, seguridad, democracia.
De repente, como si se tratara de la vieja publicidad subliminal, proyectó el gráfico de una encuesta donde Josefina Vázquez Mota aparece sólo cuatro puntos debajo de Enrique Peña Nieto.
Gordo, porque Calderón acompañó el gráfico con frases que reforzaban la creencia de un virtual empate técnico.
Espeso, porque esa encuesta (patito, la calificó con buena dosis de razón el presidente del PRI, Pedro Joaquín Coldwell) es muy poco confiable.
Las mediciones rigurosas (como la de Consulta Mitofsky de ayer) muestran una tendencia clara:
Peña Nieto está 15 puntos arriba de Josefina.
¿Con esas encuestas patito toma las decisiones el jefe del Ejecutivo?
El 23 de febrero marcará un antes y un después en el proceso electoral de 2012.
Fue el día en que el Presidente de la República se metió a la contienda, se pintó de azul, tosca, groseramente. Como un Fox cualquiera.
Más allá de si el episodio de Banamex le dé o quite puntos a “su” candidata, el presidente Calderón tiene que rectificar de inmediato, hoy mismo si se puede.
Aunque la mancha quedará, creo que hay tiempo para corregir el craso error, para comprometer que se comportará como un jefe de Estado ejemplar.
Y luego tendrá que cumplir cada día de marzo, abril, mayo y junio.
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Política cero
•    “Jelipillo, oops, did it again!”
-Jairo Calixto Albarran-

Como advertía la filósofa Britney Spears, Jelipillo, oops, did it again.
En una reunión con banqueros a puerta cerrada, advirtió, según trascendió más tarde, que de acuerdo con las encuestas de Presidencia, que casi ni están maiceadas, el Dorian Gel Peña Nieto estaría a sólo 4 puntos porcentuales de Chepina Vázquez Mota.
Esto generó a lo largo de la tarde de ayer una conmoción en el seno de la comentocracia nacional, como si eso fuera posible.
Digo, el carisma sin igual, la sonrisa preclara y el discurso emotivo de la panista darían para eso y más. Pero sobre todo, ni que el Dorian Gel fuera la reencarnación de Vaclav Havel.
Pero como el problema era de credibilidad, de inmediato Presidencia permeó el terror y reaccionaron como era de esperarse, a lo buey.
Así, mandaron un comunicado donde ni siquiera trataron de traducir las palabras del Preciso al ritmo de “lo que quiso decir…”, como en los tiempos del foxismo, sino que de plano negaban que Jelipillo se hubiera referido siquiera a los precandidatos presidenciales.
Y todo estaba tranquilo, conforme a derecho, cuando apareció uno de los consejeros de Banamex —ese banco con ideas premodernas— llamado Rodrigo Campos para declarar hasta cándidamente que el señor de Los Pinos en efecto había hablado de la estrecha distancia entre la panista y el priista. Oops, again.
Claro que para salvar la situación y colgarse de lo más pando, en el PAN se quitaron la modorra y apoyaron las declaraciones que su jefe máximo se supone que jamás dijo.
Y lo hicieron con unas encuestas guajiras donde le vienen pisando los talones al del copete.
Y repito, no es que sea imposible ganarle a Peña Nieto —después de todo es el candidato del PRIcámbrico temprano, allí donde los diplodocos hacen su nido—, lo que es dudoso es que con su arrastre de Dios mío, hazme auto-viuda por favor, se pueda tener una oportunidad.
De las pocas cosas que tiene a su favor, es que al menos no se puso unas orejas tipo salinistas como hizo la señora Wallace.
A la de ya, doña Isabel Miranda tendría que correr a los asesores (que deben ser los mismos que los de Nacho Ambriz en Chivas) que la obligaron a calzarse esas prótesis dizque para simbolizar que el Gobierno del DF no escucha a la ciudadanía.
¿Por qué afirmará Fox que la democracia es una marranada?
Si Calderón quería que sus lucubraciones electorales no trascendieran, tenía que haber seguido la máxima de Fidel Velázquez:
“Si lo piensas, no lo digas; si lo dices, no lo escribas; si lo escribes no lo firmes; si lo firmas… ¡échate pa’ atrás!”.
Oops!
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Clase Política
•    Presidencia y opinión pública
-Miguel Ángel Rivera-

Haiga sido como haiga sido, la Presidencia de la República tiene el derecho de medir la opinión pública.

Lo que sorprende es saber que existe una oficina –o se contrató a un despacho externo– para conocer las preferencias electorales.
Esto viene al caso por la declaración –después desmentida oficialmente– del presidente Felipe Calderón en el sentido de que la candidata de su partido, Josefina Vázquez Mota, está apenas cuatro puntos atrás del puntero en las encuestas, el priísta Enrique Peña Nieto.
La cosecha
Las expresiones del presidente Calderón “revelan que la guerra sucia está en marcha y que cada día que pase aumentará de intensidad”, comentó el coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, Francisco Rojas Gutiérrez, al sostener que con sus manifestaciones de preferencia electoral el presidente Calderón, además de violar la ley, incurriría en desvío de recursos públicos en favor de su partido…
El PRI demanda enérgicamente al gobierno federal poner fin a su doble discurso, en el sentido de que por un lado calla y por el otro alienta a su partido, el PAN, para agredir al gobernador de Nuevo León, dijo el presidente del tricolor, Pedro Joaquín Coldwell…
Con absoluto respeto a la legislación electoral, me parece que el Ejecutivo y el gobierno deben mantenerse al margen del proceso y todos los niveles del gobierno deberán dar garantías para un proceso transparente que permita la participación ciudadana y que sea la sociedad quien elija a sus autoridades, afirmó el precandidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto…
Al suscribir la extensión de un convenio de colaboración entre gobierno federal y gobierno de Nuevo León, el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, reconoció que las autoridades de esa entidad están haciendo un esfuerzo serio, institucional, en la renovación de las distintas áreas de sus instituciones de seguridad pública…
Ahora resulta que hay dos competidores para el rescate de Mexicana de Aviación.
El juez rector del concurso mercantil, Felipe Consuelo, informó que tanto Med Atlántica como Union Swiss han demostrado la existencia y disponibilidad de los recursos necesarios para la capitalización de la aerolínea…
Vamos a llegar a la convención de delegados con toda la fuerza de la militancia, con ideales de justicia, diciéndole sí a la inclusión, la cual comprende programas de desarrollo para las mujeres y hombres a fin de que les permita superarse, aseguró el precandidato del PRI al gobierno de Tabasco, Jesús Alí de la Torre, durante una gira por Tacotalpa…
El gobernador del estado de México, Eruviel Ávila, y el director de Telmex, Héctor Slim Seade, firmaron un convenio por el cual 15 municipios de esa entidad tendrán hasta 60 por ciento de reducción en las tarifas telefónicas de larga distancia y además permitirá instalar sitios wi-fi de acceso gratuito a Internet en las cabeceras municipales…
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Astillero
•    Felipe el activista
•    Cerrar a dos la pelea
•    Desplazar a AMLO
•    Cómicas correcciones
-Julio Hernández López-

Desesperado e imprudente, Felipe Calderón confirmó ayer de manera escandalosa su plena disposición intervencionista a favor de la candidata presidencial de su partido.
Aun cuando es ampliamente aceptado en estos momentos que el aspirante priista, Enrique Peña Nieto, lleva una cómoda delantera, según diversas encuestas de opinión (aunque igualmente se establece en esos estudios que la diferencia respecto a sus competidores se va reduciendo), el presidente nacional del PAN, el mencionado Calderón, consideró necesario empeñar las prendas de equilibrio institucional que deberían acompañar a la institución presidencial y convertirse en un activista sin límites que en un lance descuadrado trató de colocar en lo alto la cartulina con el nombre de la representante de su bandería durante un encuentro con ejecutivos bancarios.
Aun cuando en términos jurídicos pudiera eludirse la aplicación de un castigo a tales palabras impropias de un presunto representante general de todos los mexicanos, el episodio de los increíbles cuatro puntos de diferencia entre Vázquez Mota y Peña Nieto exhibe al militante Calderón en una suerte de fotografía de combate que ayuda a suponer el grado de involucramiento ilegítimo al que está decidido a llegar quien hoy detenta el beligerante aparato federal de poder.
Legalidad tragicómica: los candidatos deben guardar silencio en este lapso llamado entrecampañas, mientras el gobierno federal josefinista inunda espacios mediáticos con propaganda que a fin de cuentas apoya la continuidad del panismo y mientras el propio Felipe anuncia hipotéticos resultados de encuestas electorales facciosas y proclama con un golpe de saliva el crecimiento descomunal de su Chepina un tanto pasmada.
Como era de preverse, los priistas aprovecharon el regalo en bandeja de plata que con su torpeza declarativa les regaló el jefe de campaña de Chepina.
De inmediato exploraban la posibilidad de hacer ruido jurídico, presentando alguna denuncia ante fiscalías, institutos y tribunales electorales, según fuera el caso, y trataron de convertir el tema en materia de debate en la Cámara de Diputados aunque los panistas hicieron el vacío a la sesión de ayer para impedir que el grave desliz felipista fuera debatido en esa tribuna legislativa.
López Obrador se lanzó contra la mayoría de esos sondeos que, dijo sin morderse la lengua, suelen ser orientados en función del interés de quienes los pagan (el tabasqueño es candidato gracias a una presunta encuesta de opinión de la que no se supo más, arreglado más bien el asunto en términos políticos entre los dos contendientes finales, AMLO y Ebrard, y a partir de ese milagro sin metodología reconocida se instauró en las izquierdas electoreras el reino de las santificadas encuestas para decidir candidaturas a otros cargos, siempre bajo la confiable supervisión de la mano santa del arcángel Camacho).
Enredo y escándalo político que alcanzaron niveles de comicidad cuando Los Pinos hicieron saber que no era cierto lo que decían que había dicho Felipe Calderón.
Redacción ambigua al decir que Calderón en ningún momento opinó ni mencionó a los aspirantes presidenciales en contienda, sus partidos o sus propuestas programáticas.
¡Pero la acusación no era por haber opinado o mencionado genéricamente esos puntos, sino por decir que su candidata, Chepina, estaba a cuatro puntos de alcanzar a Quique!
Respecto a este tema concreto, Los Pinos dijo que Felipe Comentó, también, información que muestra una elección presidencial muy competitiva.
Qué duda cabe, tenemos una democracia muy vigorosa, un electorado muy responsable.
Y que va a haber una elección competida. Redacción intencionalmente elaborada para dejar las puertas abiertas para acomodos de última hora, aceptando sin aceptar, precisando sin precisar.
Las andanzas intervencionistas de Calderón recuerdan los ánimos desbordados de Vicente Fox en 2006, cuando utilizó todo cuanto le fue posible para apoyar a su ahora adelantado alumno.
Los abusos del ex gobernador de Guanajuato motivaron reformas electorales que ahora son calificadas por él mismo de marranadas, según mencionaron ayer diversos consejeros electorales, entre ellos Leonardo Valdés Zurita.
El uso del aparato gubernamental a favor de un aspirante ya fue puntualizado jurídicamente por el tribunal electoral en 2006 aunque no hubo mayor sanción.
Ahora, Calderón apuesta a la posibilidad de transgredir las normas que sea necesario, con tal de apuntalar al josefinismo desvaído.
Por lo pronto, FC ha consolidado la aspiración de centrar el debate entre PAN y PRI al asegurar que conforme a sus encuestas particulares la yegua de blanco y azul va alcanzando al cuaco copetón de tres colores.
Eso es, a fin de cuentas, lo importante para el proyecto bipartidista: instalar en la opinión pública la percepción de que la pelea verdadera será entre Peña Nieto y Vázquez Mota, desplazando a López Obrador a un tercer lugar y golpeándolo incluso con la especie de presuntas enfermedades, en lo que sería una forma de intento de desafuero médico, según señaló ayer el coordinador de la campaña del tabasqueño, Ricardo Monreal.
Por otro lado, el acelere felipista opacó el tema de los negocios petroleros compartidos con la potencia vecina. Primero fírmenlos y después virigüen, ha sido la consigna que ha mantenido respecto a los Tratados Clinton el hermano de la futura senadora Cocoa.
Palo mediático dado, ni el Senado lo quita, aun cuando algunos legisladores federales anuncian que investigarán a fondo las implicaciones del gran negocio de este sexenio y otros más.
Y, mientras la periodista Olga Wornat ha denunciado que la editorial Planeta le canceló un contrato para publicar un libro de 500 páginas sobre el sexenio en curso, entre amenazas a la propia editorial y a la escritora, en el contexto de una mafia calderonista y bajo presiones desde el poder, ¡feliz fin de semana, con Humberto Moreira anunciando que no buscará candidatura a diputado o senador!
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Opinión
•    Una de patos
-Pepe Grillo-

¿Jugada maquiavélica o chambonada?

¿Se tropezó o fue plan con maña?

Unos dicen que planteó una provocación irresistible, otros que violó el espíritu de la veda.

Hay quien asegura que tiene una encuestadora patito, y otros que ese pato tienen colmillos.

Lo cierto es que los famosos 4 puntos fueron trending topic unas cuantas horas; hasta que otro, con reputación intachable, aseguró que son 16 puntos.

¿Fue dato duro o sueño guajiro?

Un tango

El primer paso de la estrategia es sacar a López Obrador de la contienda. Volverlo irrelevante.

Que el tabasqueño tenga, en el 2012, el papel que tuvo en el 2006 su paisano Roberto Madrazo. O sea, destinarlo a un lejano tercer lugar.

La idea es que la campaña sea cosa de dos. Un tango, pues.

El Peje, de cualquier forma y por iniciativa propia, se rezaga. Está agotado.

Josefina Vázquez Mota ya lo ve por el espejo retrovisor.

Ése es al menos el guión del PAN, falta ver qué traman los de la acera de enfrente.

Furibundo

Vicente Fox logró lo que quería: que alguien le hiciera caso.

El consejero presidente del IFE mordió el anzuelo.

El marco legal electoral vigente, dijo Leonardo Valdés, se diseñó para evitar que los políticos hagan hoy las trampas que el guanajuatense hizo ayer.
Trampas como su larguísima precampaña, de más de tres años; el oscuro financiamiento de los “Amigos de Fox” y a su papel en la fallida intentona del desafuero.

De acuerdo.

¿Por qué en lugar de castigar a Fox, que se lo merecía, castigaron a los que no tenían vela en el entierro?

Por un pecador pagaron muchos justos.

Presunción

Hubo que asistir al foro denominado “Temas selectos del agua” para escuchar una voz sensata hablar de… la crisis en los penales.

En efecto, en el marco de ese evento acuífero, Miguel Mancera, precandidato de las corrientes de izquierda la Jefatura de Gobierno, destacó la necesidad de despresurizar el sistema penal.

O sea, que sólo los acusados de delitos graves se queden tras las rejas y los demás a la calle, para evitar sobrepoblación.

En pocas palabras, no más Presuntos Culpables, por algo lo dirá.

Refugio

Parecía que no, pero sí.

El nombre de Fernando Larrazabal, alcalde de Monterrey, apareció en la lista de aspirantes a una diputación plurinominal.

El sentido común recomendaba, para evitar sorpresas desagradables, poner sana distancia.

El PAN tomó un riesgo innecesario.

Es seguro por ahí había otros aspirantes regios con ganas y merecimientos de tener una curul.

¿Qué harán si otros empresarios denuncian que el hermano del presidente municipal les vendía queso Oaxaca a precio de plutonio enriquecido?

No más carbono

La candidatura presidencial de Gabriel Quadri colocará en el radar de la opinión pública en los próximos meses el tema de la política ambiental sustentable.

Hay que responder, entre todos, una pregunta central: ¿cómo disminuir pronto las emisiones de bióxido de carbono?

Según Quadri, se requieren cambios institucionales de gran calado.

De esos cambios se tratará su campaña.
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Interinato político
•    Calzón criminal
-Ricardo Alemán-
EXCÉLSIOR
Ahora resulta que, según los “sacerdotes” del IFE, es un “delito de lesa elección” que un ciudadano de a pie, profesional del boxeo, decida utilizar un calzoncillo con un logotipo del PRI.
Resulta que, según el IFE, es un delincuente electoral el boxeador que, en una pelea que se llevó a cabo en Las Vegas, decidió bordar un logotipo del PRI en el calzoncillo que utilizó en una pelea.
Y es un delito usar el logotipo del PRI, a pesar de que la pelea de box se llevó a cabo a miles de kilómetros de Michoacán, en donde al mismo tiempo se efectuaban las elecciones estatales.
Y es que resulta que la moderna democracia electoral mexicana criminaliza a un ciudadano común y corriente, como el boxeador Juan Manuel Márquez —que tiene la suerte y/o la desgracia de aparecer en televisión gracias a su trabajo como boxeador—, por “cometer el delito” de exhibir en su calzón profesional un logotipo del partido de sus preferencias, el PRI.
Es decir, que el tufo fascista que se respira entre quienes se desempeñan como “sacerdotes” del IFE —por orden de los no menos enloquecidos magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) — convirtieron en criminal electoral a un boxeador, por el hecho de “cometer el delito” de tener un pésimo gusto en su forma de vestir —al bordar el logotipo tricolor en su ropa de trabajo— y por simpatizar con un partido político, como el PRI.
Y claro, por creer que tiene el derecho de expresar su militancia, en los medios que le plazcan.
¿Pero cuál fue el descocado y delirante argumento de los “próceres de la democracia electoral”, que cobran millones de pesos por regalarnos sus genialidades?
Casi nada, que el boxeador profesional llamado Juan Manuel Márquez habría cobrado dinero por bordar en su ropa de trabajo el logotipo del PRI, durante un encuentro que se llevó a cabo en Las Vegas, Nevada, Estados Unidos.
Malévolo, el boxeador Márquez habría diseñado esa maniobra, porque sabía que su pelea se difundiría en todo México y, claro, en Michoacán, donde millones de electores indecisos esperaban línea para votar por el PRI.
Ese es el “impecable razonamiento”.
El problema es que nadie se traga tamaño engaño, en especial cuando hoy todos saben que los consejeros del IFE y sus similares del TEPJF actúan por consigna partidista y a favor de sus respetivos promotores; sean del PRI, del PAN o del PRD.
¿De veras creen los “sacerdotes del IFE” que alguien se va a creer el cuento de que el logotipo del PRI, en el calzoncillo de un boxeador que sostiene una pelea en Las Vegas, pudo influir en la intención del voto, en una elección como la de Michoacán?
¿De verdad creen que las televisoras que trasmitieron la pelea de Márquez se sumaron a ese dizque perversa campaña de proselitismo emprendida desde la capital del juego?
Lo cierto es que, en el fondo, asistimos a la confirmación de que el IFE y el TEPJF —que debieran ser los garantes de las libertades democráticas— en realidad se han convertido en los modernos represores de las libertades básicas.
Y es que esos “sacerdotes de la democracia” electoral mexicana hoy reprimen el ejercicio de libertades fundamentales —como la libertad de expresión—, igual que antaño reprimían esas mismas libertades los gobiernos del PRI.
Pero lo verdaderamente escandaloso es que nunca nadie pudo probar que el boxeador Márquez haya cobrado un solo peso por exhibir el logo del PRI y menos que las televisoras hayan pretendido influir en el proceso electoral michoacano, con esa pelea de box.
¿Y entonces qué hay detrás de esa descocada resolución del IFE y de la orden que, en ese mismo sentido, le dio el TEPJF?
La respuesta es elemental. El IFE y el Tribunal Electoral parecen haberse sumado a la guerra sucia contra un partido político; parece que ya son parte de la guerra del ventilador que salpica de estiércol a todos los actores del proceso electoral.
En otras palabras, que abundan las evidencias de que el IFE ya se alineó contra el PRI.
¿Y por qué el escándalo del calzón es un atentado a las libertades básicas?
Porque un ciudadano de a pie, como un boxeador, no se puede vestir con ropa de trabajo que tenga el logotipo de un partido, porque entonces es considerado criminal electoral; porque la vestimenta también es parte de la expresión corporal de los ciudadanos.
Y también esa libertad la censuran el IFE y el TEPJF.
¿Qué sigue; quién sigue?
EN EL CAMINO
¿Cuántas curules y escaños servirán como manto de impunidad?
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Leo Zuckermann
•    ¿Quién va a ganar los Óscares este domingo?
EXCÉLSIOR
El Oscar a la mejor película se lo va a llevar El artista. Hay 91% de probabilidad de que eso suceda.
De ser así, la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos reconocerá a uno de los proyectos cinematográficos más fascinantes, arriesgados y estupendamente logrados de hace muchos años: una película muda filmada en blanco y negro en estas épocas de sonido envolvente, tercera dimensión, efectos especiales y animación por computadora.
En cuanto al Oscar al mejor actor, aquí el asunto estará más competido. Jean Dujardin cuenta con 69% de posibilidades de levantar el domingo la estatuilla por su trabajo en El artista.
El otro que tiene alguna probabilidad de ganar, 33%, es George Clooney por el papel que protagonizó en Los descendientes.
Me temo que es muy poco probable, estamos hablando de menos del uno por ciento, que el mexicano Demián Bichir se lleve el triunfo por su actuación en Una vida mejor.
En cuanto al Oscar a la mejor actriz las probabilidades se han movido en los últimos días. Meryl Streep comenzó siendo la favorita por su papel como Margaret Thatcher en el filme La Dama de Hierro.
Sin embargo, Viola Davis cerró fuerte y hoy tiene una probabilidad de 61% de llevarse el Oscar por su actuación en The Help, que en español ridículamente titularon como Vidas cruzadas.
La de Streep es de 38 por ciento.
En este rubro, al parecer, habrá una competencia cerrada.
Podría haber sorpresas.
No así en el premio al mejor director. Aquí todo indica que Michael Hazanavicius se llevará el Oscar por su excelso trabajo en El artista.
Tiene 83% de probabilidad de que así sea.
En el camino dejará sentado en la butaca al grandísimo Martin Scorsese por su fantástica película La invención de Hugo Cabret; este director cuenta con una probabilidad de 10% de ganar.
El Oscar al mejor actor de reparto se lo llevará Christopher Plummer, por la magnífica interpretación de un hombre de la tercera edad que, al morir su esposa, decide salir del clóset y vivir felizmente como homosexual.
No hay duda que este artista se lo merece.
Su probabilidad de ganar es de 96 por ciento.
Como se lo merece Octavia Spencer, quien tiene una posibilidad similar, de 93%, por el papel que desempeñó como una empleada doméstica que decide vengarse de una manera muy peculiar de su antigua patrona en Vidas cruzadas.
La estatuilla dorada al mejor filme animado se la llevará Rango, con 85% de probabilidad.
Muy lejos se encuentra Chico & Rita, con 11 por ciento.
¿De dónde saco estas predicciones y las probabilidades asociadas?
Como siempre, recurro a las apuestas de intrade.com.
Eso es lo que están pronosticando los apostadores.
Y como suelo machacar en este espacio: las apuestas son el mejor instrumento para predecir un evento.
Muy pocas veces fallan.
Veremos si este domingo vuelve a ser el caso.
Finalmente: este fin de semana puede haber una excelente noticia para México. Todo indica que el cineasta mexicano Emmanuel Lubezki ganará el Oscar a la mejor fotografía por la película El árbol de la vida.
Es la quinta vez que la Academia nomina al Chivo para este premio.
En 1996 lo hizo por su trabajo en La princesita; en 2000, por El jinete sin cabeza; en 2006, por El nuevo mundo, y en 2007, por Niños del hombre.
Yo no tengo la menor duda de que Emmanuel se merece el Oscar y, como “no hay quinta mala”, ahora sí subirá al escenario del teatro Kodak este domingo en Los Ángeles.
Me tranquiliza saber que es el favorito en otro sitio de apuestas.
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Día con Día
•    Precisiones de Luis Carlos Ugalde
-Héctor Aguilar Camín-

Me escribe Luis Carlos Ugalde, presidente consejero del IFE en 2006, para precisar detalles claves de la noche electoral de ese año, en relación con lo dicho en mi columna “El silencio y la tormenta” (22/2/12).
El IFE, recuerda Ugalde, sí dio los resultados la noche del 2 de julio de 2006: ese resultado era que la elección estaba tan cerrada que era imposible conocer el nombre del ganador.
Lo que el IFE reservó por petición de los partidos, en especial el PRI, fue dar los rangos de votación en que se ubicaban los candidatos.
El conteo rápido del IFE, dice Ugalde, permitía detectar a un ganador aun bajo una diferencia de 0.6 por ciento, un ejercicio de enorme precisión.
(La diferencia en 2006 fue de 0.56).
Como los conteos rápidos son proyecciones probabilísticas, el resultado que arrojan son rangos de votación por candidato, mas no estimadores únicos.
El PRI argumentaba que dar esos rangos en una elección muy cerrada llevaría a que los dos candidatos punteros desataran una guerra de cifras.
Propuso que en caso de empate se anunciara, pero no se dieran los rangos de votación.
Todos los partidos estuvieron de acuerdo y así se acordó diez días antes de la jornada electoral.
Este fue el acuerdo al que se ciñó el consejero presidente aquella noche.
Le entregaron un sobre lacrado diciendo que era imposible “saber con precisión el nombre del ganador”, y así lo anunció.
A continuación sucedió justo lo que se quería evitar:
Los punteros se lanzaron contra el IFE, recuerda Ugalde.
En el Zócalo gritaron fraude.
En la sede del PAN chiflaron y nos llamaron cobardes.
Argumentas en tu artículo, sigue Ugalde, que no dar la información de los rangos de votación dio lugar a la tormenta que México vivió en 2006.
Lo dudo.
Si el IFE lo hubiera hecho, seguramente en el Zócalo los gritos de fraude habrían sido más agudos y López Obrador habría adelantado su acusación de robo, misma que sí realizó, pero días después.
Por su parte, Felipe Calderón habría adelantado su triunfo “inobjetable”.
Creo que el comportamiento oportunista e irresponsable de los dos candidatos punteros habría sido semejante.
El asunto central, dice Luis Carlos, es que el IFE no decidió cómo dar los resultados la noche del 2 de julio.
El protocolo de difusión fue acordado con los partidos y ratificado por el Consejo General del instituto diez días antes.
El IFE no podía imponer su voluntad porque eso hubiera implicado que los propios partidos desconocieran por adelantado el conteo rápido, como amenazó el PRI en varias ocasiones.
Está claro que los partidos, bajo el liderato del PRI, maniataron al IFE con sus erróneos o perversos acuerdos de difusión de resultados.
No deben maniatarlo de nuevo.

El Asalto a la Razón
•    “Por cierto, aquí traigo… una bomba”
-Carlos Marín-

La presidencial de ayer ante los consejeros de Banamex fue una gran provocación, obviamente deliberada.
Impensable imaginar que, animado por los aires de la democracia y en plena veda preelectoral, Felipe Calderón dijera de pronto algo así como:
“Por cierto, fíjense ustedes que aquí traigo una lámina de alguna encuesta mandada a hacer por mi partido a una empresa que casi nadie conoce, y… discúlpenme por favor, debí traer también, pero no, otras que igualmente son del dominio público sobre preferencias electorales; pero, si ustedes me lo permiten… A ver, ¿alguien podrá pedirle a quien esté operando las pantallas que, por favor, proyecte esta hojita?”
Como haiga sido, presentó la gráfica en una reunión privada, ante ¡700 personas!
Quién sabe si la provocación (con Josefina Vázquez Mota dizque “pisándole los talones” a Enrique Peña Nieto) le funcionará para que gane su correligionaria, pero la imprudencia lo ha puesto en el centro de un pleito político absurdo, del que no tenía la menor necesidad.

Nudo gordiano
•    Lo que dijo el Presidente
-Yuriria Sierra-
EXCÉLSIOR
Cualquier democracia que se precie de serlo, sabe de libertades.
Así que la nuestra no se debería detener en el debate de la forma ni el contexto.
Lo que ayer el presidente Felipe Calderón declaró en una reunión con banqueros es, finalmente, un enunciado que no rompe o infringe alguna regla.
No hizo campaña a favor de nadie, tampoco dijo nombres (o eso es lo que dijo Presidencia) ni utilizó recursos públicos para la compra de votos.
Es más, en la tarde, Juan Molinar Horcasitas declaró que la encuesta la había pagado el PAN.
Apenas si hizo alusión a que, según los números que Presidencia ha recabado para sus estudios de opinión, la contienda electoral de este año será muy cerrada.
Que son sólo cuatro puntos de ventaja los que separan al puntero del segundo lugar.
Todos sabemos a quiénes se refieren.
Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota.
Según los reportes en manos de Los Pinos, porque la reunión debió ser a puerta cerrada y todo este escándalo se inició cuando uno de los asistentes escribió en su cuenta de Twitter lo que el Presidente decía, la contienda está casi en empate: cuatro puntos de distancia que no coinciden con el resto de los estudios de opinión que son de todos conocidos.
O sea, que el segundo lugar va repuntando.
El punto es que, finalmente, el Presidente está en todo su derecho de hablarlo así en reuniones privadas.
De igual forma, también Presidencia, la nuestra como todas las del mundo, en realizar estudios de opinión para sondear el panorama en vísperas de la elección.
No es tema nuevo, se hace en todas las democracias.
No se dijo algo que pudiera considerarse acto de campaña, sino un hecho que sustentó lo que en los escritorios de Los Pinos se tiene.
Enrique Peña Nieto salió a defender sus números, mismos que le dan alrededor de quince puntos de ventaja frente a Josefina, y le recomendó al Presidente cambiar de casa encuestadora.
Andrés Manuel López Obrador, en un arrebato que lo hizo escupir al cielo, dijo que cualquier encuesta es engañosa, porque comúnmente están hechas a modo, ¿pues qué no fue mediante una de ellas que hoy es candidato presidencial?
Lo que sí es tema que debe vigilarse es que esas encuestas que realiza el Estado no desvíen recursos de programas federales o sociales.
Ahí es donde se tendrían que poner las miradas y el debate.
Finalmente, las reacciones de todos son únicamente para defender su postura.
Los números seguirán saliendo de todos lados y, por lo visto, con muchas variantes, pero los procesos electorales siempre tensan así los escenarios.
Por lo pronto, el IFE pidió a Felipe Calderón que se mida en sus declaraciones.
También se lo dijo al ex presidente Fox por haber mencionado eso de que su ley electoral era una marranada.
Y, bueno, esto podríamos considerarlo una llamada de atención, pero también como una medida para prevenir complicaciones en una contienda electoral que se vivirá con leyes muy confusas, donde todo se puede malinterpretar y sacarle provecho según convenga.
Aunque eso no sea materia, como dije al principio, de una democracia que presuma de serlo.