Un juez federal dictaminó el viernes que el gobierno de Donald Trump debe restablecer completamente el programa que protege de la deportación a algunos inmigrantes jóvenes que llegaron ilegalmente a Estados Unidos cuando eran niños, lo que incluye aceptar nuevas postulaciones para acceder al beneficio.

El juez de Distrito John Bates en Washington, D.C., agregó que aplazaría la orden del viernes hasta el 23 de agosto, para darle tiempo a la administración para que decida si apelará.

Bates emitió un primer dictamen en abril ordenando que el Gobierno federal continué con el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que incluye aceptar solicitudes.

El magistrado aplazó esa decisión por 90 días para darle tiempo al Gobierno para explicar de mejor forma por qué debería eliminarse el programa.

El viernes, Bates, quien fue designado por el expresidente republicano George W. Bush, comentó que no revisaría su dictamen previo porque los argumentos del gobierno del presidente Donald Trump no eliminaron sus preocupaciones.

Bajo el DACA, casi 700 mil adultos jóvenes, conocidos como ‘dreamers’, fueron protegidos de la deportación y recibieron permisos para trabajar por períodos de dos años, después de los cuales debían volver a solicitar ser incluidos en el programa.

El esquema fue creado en el 2012 bajo la presidencia del expresidente demócrata Barack Obama.

Un portavoz del Departamento de Justicia dijo el viernes que el Gobierno seguiría defendiendo su posición de que “actuó dentro de su autoridad legal al decidir finalizar el DACA de una manera ordenada”.

Hasta ahora, el Congreso no ha aprobado una legislación para abordar el destino de los ‘dreamers’, que podría incluir una posible vía para obtener la ciudadanía.