En efecto, es la interrogante que la gran mayoría de analistas políticos se hace, pues no hay explicación lógica del por qué, tiene a sus fuerzas vivan inmóviles, pues el gran número de “aspirantes” a contender y ocupar uno de los más de 3 mil cargos de elección popular en juego este 1 de julio ya de éste 2018, están como los toros de lidia, nerviosos, inquietos y en algunos casos, hasta tratando de destruirse entre priistas.
Mientras, sus dirigentes que diseñaron un calendario electoral desfasado, no han emitido las “convocatorias” respectivas, a pesar que sus adversarios, los partidos políticos, ya en la mayoría de los casos tienen a sus candidatos en “pre campaña”, recorriendo sus respectivos territorios en busca del voto ciudadano, no el de sus correligionarios, pues es evidente quienes serán los candidatos, de manera que la “pre campaña” solo es utilizada como pretexto para tener recorridos territoriales sin ser sancionados por la ley.


PRI OTORGA VENTAJA ELECTORAL
Mientras en el PRI andan buscándoles senos a las lombrices, sus adversarios iniciaron “precampañas” el pasado 14 de diciembre, lo que implica que el tricolor otorgará a sus adversarios cuando menos un mes de ventaja, lo que, en términos de estrategia para la conquista del voto ciudadano, es muchísima.
A lo anterior, habrá que agregarle que en esta elección las siglas del PRI, no serán un plus para sus candidatos, al contrario, por la percepción popular, la marca del tricolor será un pesada lápida, de la que sus candidatos deberán deslindarse de una manera u otra, pues en el gobierno y en las propias filas del PRI, no han logrado contrarrestar los negativos del gobierno, a pesar de tener también positivos, pero éstos han pasado desapercibidos, ante la ausencia de una estrategia de comunicación eficaz.
“CANDIDATOS CIUDADANOS”
Otra vertiente que podría convertirse en un lastre para el PRI, lo será la designación de los llamados “candidatos ciudadanos”, pues la clase política de ese partido se está sintiendo marginada y no solo eso, sino que esa inclusión está causando desánimo entre sus filas, pues de hecho el trabajo partidario ha dejado de ser el boleto para aspirar a obtener una candidatura y por otro lado, el desprecio que significa para su militancia, el que se afirme que son los “candidatos ciudadanos” lo que podrían darle el triunfo electoral.
Pareciera que a los cuadros dirigentes del tricolor se les ha olvidado que para que los “candidatos ciudadanos” tengan éxito electoral, necesitarán forzosamente de la estructura partidaria, que es la que realmente lleva al votante a emitir el sufragio, sin la estructura político electoral, la derrota está tocando la puerta del otrora invencible tricolor.
COINCIDENCIA DE INTERECES, LA SOLUCIÓN
Así es, solo logrando la coincidencia de intereses es posible aspirar seriamente al triunfo electoral, pues repartiendo “el pastel” de manera proporcional al pesos político especifico de cada militante, es posible lograr tal coincidencia, también conocida como “unidad”, pues ha quedado demostrado que solo con la “unidad” el tricolor ha salido vencedor el los procesos electorales y por lo que se ve, la designación de “candidatos ciudadanos” ha venido a sembrar discordia y a evitar la llamada “unidad” en la filas priistas.
¿Cómo hacer que los “candidatos ciudadanos” no afecten la “unidad” partidaria? Es algo que los estrategas del PRI tendrán que resolver y rápido, pues si se replica la presencia de esos “candidatos ciudadanos” y se sigue marginando a la militancia, sobre todo a la tradicional, la que sabe cómo se hacen las cosas, los resultados para el PRI, serán catastróficos.
LAS ENCUESTAS SOLO GENERAN ILUSIONES
Tradicionalmente quienes encabezan las encuestas que hacen públicas los medios de comunicación, las defienden a capa y espada, pues sirven para advertir que, de no resultar ciertas, se debió a un fraude, lo que resulta del todo cómodo pero ilusorio, pues dichos ejercicios demoscópicos solo revelan como está pensando el elector, pero de ahí a la hora de depositar el voto, hay un abismo de diferencia.
No es un secreto que, para realizar una encuesta, los encuestadores se trasladan a la puerta del domicilio del potencial elector o cuando menos utilizan una línea telefónica que se enlaza con el de la casa del potencial elector, es decir, el elector da su opinión desde la puerta de su casa y solo eso revela dicha encuesta, empero, traducir la manera de pensar del elector en un voto, es por demás difícil.
Los grandes núcleos de votantes, son por lo general, núcleos de ciudadanos de medianos, bajos y escasos recursos económicos, de manera que acudir a depositar el voto a una casilla, se convierte en un verdadero obstáculo, pero no por falta de ganas y voluntad, sino por falta de los recursos económicos que implica gastar en trasladarse a emitir el voto a la casilla correspondiente el día de la elección.
No es lo mismo opinar en la puerta de la casa que ir hasta donde se encuentra la casilla y emitir el voto, este pequeño detalle es el que hace que las encuestas fallen al no coincidir con el resultado electoral, de manera que es en este momento donde adquieren particular relevancia las estructuras político electoral, pues son éstas las responsables de lograr que el elector vaya hasta la urna a manifestar su voluntad a través del voto.
Así que, si usted quiere hacerle al pitoniso y tratar de adivinar el resultado electoral del 1 de julio del 2018, utilice esta simple fórmula: a los puntos que resultan del promedio de las encuestas publicadas en la quincena previa a la elección, súmele un valor numérico que tiene que darle a lo que se conoce como “estructura político electoral”, de manera que tendrá un resultado más cercano a la verdad.
En el actual proceso electoral, hay partidos que tiene buenos candidatos, pero no tienen estructura político electoral, hay los que tiene malos candidatos, pero buena estructura político electoral y también los hay que tiene malos candidatos y no tiene estructura, que son los que fracasan regularmente en las contiendas, pero hoy por hoy, no hay un partido que tenga estructura político electoral y buenos candidatos, de ahí que se afirme que la actual elección será de tercios. ¿Usted qué opina?