En noviembre de 2016 se dio a conocer que una persona, en su intento por tomarse la selfie perfecta, tiró una escultura del siglo XVII en el Museo Nacional de Arte Antiguo de Lisboa.

Sin embargo, en esta ocasión Hyperallergic informó que una persona, mientras realizaba su autorretrato, quebró una pieza de la obra “Infinity Mirrored Room – Al the Eternal Love I have for the Pumpkins” (2016) de la artista japonesa Yayoi Kusama.

La instalación, que cuenta con una serie de calabazas, forma parte de la exposición Infinity Mirros en el Museo Hirshhorn, en Estados Unidos.

Allison Peck, portavoz del recinto, confimó en accidente a través de un correo y agregó que los daños de la obra motivaron a que la habitación fuera cerrada temporalmente, aunque The New York Times confirmó que el espacio ya fue reabierto.

La vocera del Hirshhorn comentó que tienen mucho cuidado con las obras y tienen una gran confianza en sus visitantes, proporcionando instrucciones clara a la entrada de cada sala.

La portavoz del recinto comentó a The New York Times que no podría decir qué es lo que el visitante estaba haciendo cuando la obra, con un valor aproximado de 800 mil dólares, fue dañada.

La artista prepara una pieza de reemplazoy estiman que llegará en un par de semanas; la exposición fue reabierta, aunque la instalación fue modificada. El museo habló con la persona que dañó la obra, aunque no se reveló su identidad ni si era hombre o mujer.

Infinity Mirros se ha vuelto la exposición más exitosa del recinto, pues ha recibió más de 8 mil visitantes en semana y media.

nrv