NUEVA JERUSALÉN
“Sí el dialogo no rinde frutos aplicaremos la ley” o “El asunto de la Nueva Jerusalén es un asunto de disputa por el poder”, son frases de funcionarios del gobierno del estado, frases que suenan huecas e increíbles, pues las repiten en casi todos los casos similares donde hay conflicto, porque “aplicar la ley”, implica inevitablemente, el uso de la fuerza pública para poner a cada quien en su lugar, solo que aquí valdría la pena preguntar: ¿Hasta dónde es verdad que el gobierno quiere poner a cada quien en su lugar mediante el uso de la ley?, porque viene a colación la posibilidad de que uno de los grupos o los dos, que son antagónicos entre sí, estén pretendiendo cobrar la factura correspondiente al “apoyo” otorgado al entonces candidato del PRI al gobierno de Michoacán. Por otra parte, en caso de que la presión pública obligara al gobierno estatal a usar la fuerza pública y recuperar el orden en esa localidad, es de esperarse que varios de los líderes sean encarcelados y en ese supuesto, ¿será capaz el gobierno estatal de sostenerse y no doblarse como lo hizo con los moradores de las casas del estudiante? Sí persiste falta de calidad moral y política, es mejor no hacer el ridículo usando la fuerza pública, que mejor hagan lo que bien saben hacer, que les den “máiz” de comer.