El centro de exposiciones del Grand Palais y el Palais de la Découverte de París cerraron hoy sus puertas al público de forma preventiva e indefinida ante la crecida del río Sena, al igual que se había hecho en el Museo del Louvre desde la mañana.
Un funcionario del Grand Palais explicó que el cierre, que era efectivo desde las 14.30 locales (12.30 GMT), se había decidido “como una medida preventiva por los riesgos de inundación” ante la crecida del Sena.
El empleado añadió que la medida tiene carácter “indefinido, hasta que la dirección no disponga que es seguro” reabrir las instalaciones.
Actualmente se llevan a acabo allí las exposiciones “Carambolages”, “Amadeo de Souza Cardoso”, “Seydou Keïta”, “La tierra, el fuego, el espíritu” y “Monumenta”.
Otras instituciones culturales que se encuentran a orillas del Sena en la capital francesa, también han suspendido su actividad de cara al público, como el Museo de Orsay, cuyos responsables han avanzado que no reabrirá al menos hasta el martes.
El Museo del Louvre tomó desde ayer esa misma decisión para disponer de un plazo de tres días para proteger sus obras, algunas de las cuales han sido desplazadas de su lugar habitual de exposición. En este caso, su dirección no se ha pronunciado sobre la posible fecha de reapertura.
En cambio, el Museo Quai Branly, aledaño también al río Sena no cerrará sus puertas, a menos de que sigan subiendo las aguas.
Esta tarde el río estaba más de seis metros por encima de su nivel de referencia y las autoridades preveían que se iba a elevar más todavía en las próximas horas.
El riesgo de inundaciones también llevó a suspender el tráfico de una línea de trenes de cercanías -la RER C- que discurre en paralelo al río por el centro de París.