El asalto a la razón
Lo verosímil de “la emboscada”
Carlos Marín
El 24 de agosto, por las brechas de Tres Marías donde horas antes había sido liberado el funcionario del INAH que fue despojado de su vehículo y secuestrado, policías federales buscaban a los plagiarios: en una camioneta particular verde botella conducida por el suboficial Gerardo Ramírez Garduño; viajaban también el subinspector José Uriel Garrido Franco y los suboficiales Raúl Sánchez Fonseca e Ivonne Moreno Romero.
Al toparse con la negra BCM-242 (cuya condición de diplomática no dejaba ver el portaplacas), los agentes supusieron que pudiera tratarse del vehículo robado, la siguieron, y ésta se detuvo.
Bajaron con sus armas largas Garrido, Sánchez y Ramírez, marcándole el alto.
El conductor de la diplomática bajó su cristal (uno de los arraigados dijo a la PGR que aquél hizo un disparo al aire) y se dio vuelta en U…
Y los tres de a pie comenzaron la balacera.
Ivonne se hizo del volante, pero la otra camioneta se perdió de vista, Garrido pidió apoyo, y los federales alertados, en cuanto la vieron venir, echaron balas al frente y costados del vehículo.
Así comenzó el chisme de “la emboscada”.
La historia en breve
Pues no hubo disculpas para Adela Micha
Ciro Gómez Leyva
Pregunté aquí el miércoles, por qué #YoSoy132 no había dicho nada sobre los huevazos que dos presuntos integrantes del movimiento le lanzaron días atrás a Adela Micha en un auditorio de Veracruz. Una de dos, propuse: o el #132 se volvió una burocracia lenta y adiposa, o avalaba la ofensa con íntima satisfacción y público disimulo.
Pues, bien, el fin de semana se llevó a cabo la asamblea general interuniversitaria del movimiento. Hablaron, de acuerdo con las notas y crónicas, de planes de acción, acciones para el 1 de diciembre, organización, pero no de los huevazos a la periodista.
Insistir en el tema podría parecer banal a estas alturas. No creo que lo sea. Una agresión jamás será trivial, insustancial. Menos para quienes se presentaron como viento refrescante de la actividad pública en México; como respuesta ética a lo corroído, lo podrido, especialmente en los medios de comunicación.
Pero una de dos, o una torva burocracia, que al parecer se apoderó del movimiento, maniobró para eludir el tema, o, en efecto, #YoSoy132 vio con buenos ojos los huevazos.
Se dirá que un grupo que aún lucha por dotarse de una organización y una representación eficaces no tiene por qué disculparse por la conducta de dos espontáneos que en su casa los conocen.
Por eso, precisamente, para disipar dudas, algunos ilusos esperábamos, más que una disculpa, un reproche incontrovertible a la acción. Un deslinde claro y franco. Un “nosotros no hacemos eso”, “nosotros no queremos eso”.
Pero no lo hubo. A 10 días, el silencio del #132 es complacencia.
Es un: Adela, te lo merecías.
Qué pena.
Trascendió
Trascendió
:Que en Los Pinos comenzaron las mudanzas. Trabajadores ya sacan de ahí cajas y cuadros. Los Calderón se marchan.
En el equipo del Presidente no se determina todavía si vuelve a su casa de Las Águilas o si habitará temporalmente un hotel de Polanco.
Y es que los Peña Nieto traen varias modificaciones residenciales que quieren dejar listas antes del 1 de diciembre.
:Que en el ISSSTE no habrá sorpresas a la hora de que se integre el gobierno de Enrique Peña Nieto.
El instituto quedará en la órbita de Elba Esther Gordillo. Tomás Ruiz, secretario de Finanzas de Veracruz con Javier Duarte, parece encarrilado.
:Que los equipos de seguridad de Felipe Calderón y Peña Nieto van a tener una quinta reunión en dos semanas, luego de la gira a Europa del presidente electo, que comienza el miércoles.
Por ahora, el equipo de Peña Nieto se ha dedicado a sostener reuniones con los procuradores estatales, a fin de intentar unificar las cifras sobre criminalidad (debido a que cada estado utiliza indicadores diferentes para medir los delitos) y así tener un panorama de la situación real de inseguridad en todas y cada una de las entidades del país.
:Que hay señales desde la oficina de Peña Nieto que hacen prever que no será Roberto Campa quien se encargue de recibir la Secretaría de Seguridad Pública federal o el Cisen.
¿Será por eso que el coordinador de seguridad del equipo de transición, a seis semanas de la toma de protesta, no se ha reunido en privado con Genaro García Luna? ¿O será porque anda en las reuniones con los procuradores locales?
:Que a Dolores Padierna le disgustó tanto el lugar que le tocó en la ceremonia de entrega de constancia a Miguel Ángel Mancera como jefe del GDF, que se salió enfurecida del acto.
Y es que la primera fila del pequeño auditorio del Tribunal Electoral del Distrito Federal estaba reservada para el senador Ernesto Cordero, el diputado federal Silvano Aureoles; el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano; el líder de la ALDF, Manuel Granados, el magistrado Édgar Elías; el secretario de Gobierno, Héctor Serrano, y la familia de Mancera; la segunda, para los 16 jefes delegacionales y otros altos funcionarios capitalinos, y en la tercera le tocó a Lola.
Interludio
¡Que viva la democracia venezolana!
Román Revueltas Retes
Fuera de Lee KuanYew, mi autócrata favorito (gobernó 31 años, en Singapur, bajo los colores del Partido de Acción Popular, una especie de PRI de allá solo que un poquitín más eficaz en el tema de la modernidad y el desempeño económico aunque, eso sí, decididamente autoritario en comparación al muy democratizado tricolor de nuestros tiempos), no creo que vaya a existir otro gobernante, fuera de Hugo Chávez, elegido de manera vagamente democrática (digo, persónense ustedes en la República Bolivariana de Venezuela, señoras y señores, y constaten de primera mano la intromisión del aparato del Estado en la campaña presidencial y comprueben el escandaloso derroche de recursos públicos para agenciarse clientelas electorales), que se pueda apoltronar 20 años en la silla presidencial.
Y, bueno, el sufrido pueblo venezolano la ha dado ni más ni menos que un millón de votos de ventaja al caudillo y ahí lo tenemos ya lanzado para romper un nuevo récord en pleno siglo XXI. Se vio obligado el hombre a hacer que cambiaran la Constitución pero, con gente a modo en el Congreso, logró fácilmente su propósito de que las leyes supremas le avalaran sus no menos superlativas ambiciones personales.
Él dice que es por la Revolución Bolivariana, con mayúsculas, y por la patria en general, pero no le creemos sus declaraciones al hombre: esto apesta más bien a dictadura institucional, si es que existe el término. Ah, pero quienes han tenido la última palabra han sido los venezolanos y ahí no hay nada qué decir. Para empezar, el pueblo unido jamás será vencido, ¿o no? Y, luego, el pueblo bueno nunca se equivoca, jamás de los jamases.
Desear que Venezuela se hunda todavía más para que la historia le enseñe una durísima lección a esa buena gente es una mezquindad. Una ruindad será también restregarles en las narices, cuando solo queden cenizas, que fueron ellos mismos, y nadie más, quienes quisieron llegar hasta ese destino. Mucha suerte, en todo caso. Y que viva la democracia.
En Privado
La muerte del hijo
Joaquín López-Dóriga
Es un tipo incapaz de todo. Florestán
La noche del miércoles pasado, en un paraje cercano a Ciudad Acuña, en Coahuila, fue encontrado, con dos tiros en la cabeza, el cadáver de José Eduardo Moreira Rodríguez, hijo del ex gobernador de esa entidad y ex presidente del CEN del PRI, Humberto Moreira, y sobrino del actual gobernador, Rubén, hermano de su papá, a quien sucedió en el cargo.
El crimen, por la trayectoria política del padre, fue interpretado de las maneras más disímbolas, sin excluir el simplismo, el interés y hasta la ruindad humana, esto como una expresión de lo que dejó el proceso electoral. El hecho, duro, es que un joven de 25 años fue asesinado en un estado en el que la violencia y el descontrol de ésta se han convertido en escenario cotidiano.
En Coahuila, cuando no es un tiroteo en Saltillo, es en Torreón, en Monclova, en Piedras Negras, con todo y megafuga producto del abandono carcelario y la corrupción, o es, ahora, en Acuña. Están ante una situación desesperada en el campo de la inseguridad empeorada por el fraternal desastre financiero que heredó el actual gobierno.
La diferencia es que para las deudas hay plazos y para la inseguridad ya no, se agotaron hace muchos muertos. El asesinato de José Eduardo Moreira fue de alto impacto por la trayectoria política del padre y porque cada vez que hay un homicidio con ese perfil, la sociedad se sacude y la autoridad se avispa.
Ahora lo más grave, si es que lo puede haber tras la muerte, es que a las declaraciones no sigan los hechos, la localización y castigo a los homicidas, como ha ocurrido con los miles de homicidios en México que, por tratarse de desconocidos, permanecen en la impunidad, que es el mayor motor de la inseguridad y de la violencia en la que vivimos y de la que todos somos rehenes.
Ya lo veremos muy pronto.
RETALES
1. RUPTURA. Algo se ha roto entre los hermanos Humberto y Rubén Moreira. La ausencia de éste en los funerales del hijo de su hermano lo dejan ver. También una declaración previa en la que decía que la violencia es una respuesta a la acción contra el crimen organizado, que antes no había. Antes era su hermano;
2. ENCUENTRO. Ayer, en Los Pinos, se dio el quinto encuentro entre los presidentes saliente y entrante. Se había anunciado un mensaje del presidente Calderón a las 5 de la tarde pero, sin explicación alguna, se suspendió; y
3. PIEDRA. En el encuentro que el miércoles 17 sostendrá en París el presidente electo, Enrique Peña Nieto, con el presidente de Francia, François Hollande, se sacará el tema de Florence Cassez, a insistencia de su pareja, Valérie Trierweiler, que necesita recuperar su deteriorada imagen con los franceses y en su paisana encarcelada ha encontrado una mina.
Nos vemos mañana, pero en privado.
Juegos de Poder
La diferencia entre Capriles y López Obrador
Leo Zuckermann
EXCÉLSIOR
Me dan envidia los venezolanos. No porque haya sido reelegido Hugo Chávez como Presidente, sino por la actitud del candidato derrotado. Qué diferencia a lo que hemos tenido que vivir en México durante estos años. Ojalá la izquierda, en particular López Obrador, aprendiera de la utilidad de aceptar la derrota. Ayer lo decíamos en este espacio: por fortuna, la democracia es un juego repetitivo donde hoy se puede perder y mañana ganar. Por eso, a los perdedores les conviene tener una perspectiva de largo plazo con una estrategia de prestigio democrático. A eso precisamente le está apostando el candidato perdedor en Venezuela, Henrique Capriles, al reconocer que no ganó: a que algún día, ya sea en seis años en que se repitan los comicios presidenciales, o antes, si Chávez fallece víctima del cáncer que tiene, él pueda levantarse con la victoria.
“Para saber ganar, hay que saber perder”, dijo Capriles unas cuantas horas después de haber cerrado las urnas cuando era evidente que los resultados electorales no le favorecían. “La palabra del pueblo es sagrada y nunca ha pasado por mi mente hacer algo distinto a lo que el pueblo diga. Quiero agradecerle a los más de seis millones de venezolanos que hoy me dieron su confianza. Hoy probablemente sientan tristeza, pero nosotros iniciamos la construcción de un camino. Quiero decirle a todos los que me dieron su confianza que cuentan conmigo y a los otros venezolanos que no piensan como yo, también cuentan conmigo. Soy un convencido de que este país puede estar mejor y estará mejor”.
Así comenzó Capriles el nuevo camino para ganar la Presidencia en el futuro. No desconoció los resultados. No pateó a las instituciones. No regateó su apoyo al ganador, el todopoderoso presidente en funciones. No. Por el contrario, afirmó:
“Nunca voy a jugar con nuestro pueblo ni lo someteré a la zozobra. La otra opción obtuvo más votos que nosotros y así es la democracia. Logré la confianza de millones de venezolanos. Lo que el pueblo diga es santa palabra. No voy a asumir posición irresponsable. Yo dejé el alma y me siento muy orgulloso de lo que construí y respeto la voluntad del pueblo. Espero que un proyecto que lleva 14 años entienda que casi la mitad del país piensa distinto, por eso pido respeto y consideración para esa parte de los venezolanos. Mientras hay vida, hay esperanza. Que nuestro pueblo no se sienta perdedor. Esos seis millones de venezolanos no están solos; el que no logró la victoria soy yo, el pueblo no puede sentirse derrotado. El tiempo de Dios es perfecto, el país no se va a acabar el día de hoy. Yo respeto profundamente al pueblo socialista, espero respeto de quien obtuvo la victoria, de esos más de seis millones de venezolanos”.
Aplauso a Capriles. Un discurso impecable. Responsabilidad, construcción, esperanza y respeto, conceptos de un político viendo más al futuro que al pasado. Qué diferente a la actitud y discurso de López Obrador. No tengo duda de que, con estas palabras, se incrementan las probabilidades de que el joven opositor venezolano gane la presidencia de su país en un futuro no muy lejano.
¿Hubiera hecho lo mismo Chávez en caso de haber perdido? No lo sé. Lo que sé es lo que dijo el presidente de Venezuela al enterarse de su triunfo y del reconocimiento del resultado de su principal retador: “Felicitar a la dirigencia opositora porque han reconocido la verdad, han reconocido la victoria del pueblo. Para ellos nuestro reconocimiento. El candidato de la derecha y su comando de campaña acaban de anunciar al país que reconocen la victoria bolivariana, eso es un paso muy importante en la construcción de la paz en Venezuela, de la convivencia entre todos nosotros. Les extiendo la mano porque somos todos hermanos en la patria de Bolívar”.
De esta forma, el reconocimiento de Capriles abre las puertas de un posible diálogo en un país prácticamente dividido en dos: chavistas y antichavistas. De hacerse realidad, sería una estupenda noticia para Venezuela.
Ha ganado Chávez, pero Capriles, aunque perdió la elección, acumula un gran capital político que, bien manejado, puede tener grandes rendimientos al futuro. El joven político, con toda seguridad, seguirá siendo la principal figura de la oposición venezolana. Con ese poder, más la habilidad política que ha demostrado al reconocer su derrota de una manera elegante y civilizada, me lleva a pensar que algún día será el presidente de su país. Otra diferencia más de López Obrador.
Razones
La Ardilla en el entramado Zeta
Jorge Fernández Menéndez
EXCÉLSIOR
Si, como se asegura, el asesinato del hijo mayor de Humberto Moreira, José Eduardo, fue ordenado por Miguel Ángel Treviño, El Z-40, como revancha por la caída de uno de sus sobrinos y por los golpes que estaba recibiendo en Coahuila; la detención de Salvador Alfonso Martínez Escobedo (o Carlos García), apodado La Ardilla, debe hacer temer un estallido de furia del famoso narcotraficante.
Este personaje era el responsable de ese grupo de Los Zetas en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, tres estados que, con mucho, son el principal centro de operación de esa organización criminal. Este hombre (otro gesticulador al momento de ser presentado por las autoridades) se supone que fue el responsable de la masacre de 72 inmigrantes centroamericanos en San Fernando y de la reciente fuga, del penal de Piedras Negras, de 132 reclusos.
La historia de La Ardilla, con su ascenso meteórico en la estructura de la organización, según el recuento realizado por la Marina al presentarlo, demuestra también la debilidad creciente de la misma. Ya no se trata de ascender lentamente con el esfuerzo y la lealtad, como en las viejas organizaciones mafiosas (o los cárteles del pasado), sino de destacar con la crueldad y la violencia para ocupar lo más rápidamente posible los numerosos huecos que quedan en la lucha contra las autoridades y, sobre todo, contra sus rivales internos y externos.
Sus propios crímenes tienen ese sello: los migrantes de San Fernando fueron asesinados porque se pensó que eran hombres que podían ir a nutrir a los grupos rivales. La fuga de Piedras Negras se realizó para aprovisionarse de elementos, mismos que, evidentemente, adquieren una formación privilegiada en estas cárceles que gozan, es un decir, de autogobierno, donde los reclusos deciden qué harán desde dentro de las mismas.
Un caso es paradigmático al respecto: uno de los fugados estaba condenado por ser un simple halcón, uno de estos colaboradores del crimen organizado que se limitan a dar información sobre movimientos o traslados en la ciudad. Se fugó y fue capturado días después: ya era todo un sicario, llevaba armas de alto poder, equipo de transmisión, municiones. No hay ninguna garantía de que supiera utilizar correctamente ese tipo de armamento y equipo, pero la falta de entrenamiento se suple, en estos grupos, con un uso indiscriminado de la violencia y, en ocasiones, como en la fuga de Piedras Negras, de la audacia.
Lo cierto es que la estructura de Miguel Ángel Treviño parece ser una de las más castigadas en la lucha contra los diferentes grupos criminales. Se repiten los golpes en su contra y parecen repetirse también las delaciones que permiten avanzar en otros golpes. Durante toda la semana anterior, los mismos se habían repetido en forma sistemática, incluida la caída de su responsable financiero en Coahuila, la de un grupo importante de sicarios (entre los que estaría uno de sus sobrinos y que habría detonado la decisión de asesinar a José Eduardo Moreira), de varios de los fugados de Piedras Negras, y ahora la caída de La Ardilla, precedida por varios de sus colaboradores, que pone en un serio aprieto a toda la estructura operativa en esos tres estados clave para esa parte de Los Zetas.
Habrá que ver qué repercusiones tiene lo que está sucediendo en esas tres entidades clave: Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, donde se define no solamente el futuro de Los Zetas y de sus rivales, sino también la percepción de seguridad que tiene la ciudadanía, en ellos y en el resto del país.
Lo de Coahuila es particularmente grave porque se demuestra el grado de penetración que ha obtenido el crimen organizado en las fuerzas de seguridad, sobre todo municipales, lo que no es, desgraciadamente, nada inédito, pero habrá que recordar que los éxitos, aunque sean parciales, que se han podido dar en otras plazas, siempre han estado precedidos de fuertes estallidos de violencia.
Debe servir, también, para confirmar diagnósticos y opciones porque, en estos días, desde distintos ámbitos, se volvió a aceptar que se requieren medidas que ya estaban puestas en la mesa desde tiempo atrás y que por consideraciones políticas no se operaron, como el mando único en las policías (un tema que volvió a sacar a colación el senador Pablo Escudero) y la creación de fuerzas de élite que atiendan los delitos de alto impacto, como el secuestro y la extorsión, de los que habló Miguel Ángel Osorio en Monterrey. A ver si ahora sí.
Frentes Políticos
Frentes Políticos
EXCÉLSIOR
I. El más reciente encuentro entre el presidente Felipe Calderón y el mandatario electo Enrique Peña Nieto ocurrió ayer. Luis Videgaray, coordinador general para la Transición Gubernamental, adelantó que esta vez se trataron temas económicos, lo que fue confirmado mediante un comunicado de la residencia oficial de Los Pinos. El Presidente electo estuvo acompañado también por Ildefonso Guajardo, vicecoordinador de Política Económica, Ignacio Peralta, coordinador de Proyectos Especiales, y Andrés Antonius González, coordinador de Planeación Estratégica. Con el presidente Calderón estuvieron Alejandro Poiré, José Antonio Meade y Dionisio Pérez-Jácome, secretarios de Gobernación, Hacienda y Comunicaciones y Transportes, respectivamente.
II. Miguel Ángel Mancera recibió del TEDF la constancia que lo acredita como jefe de Gobierno electo del 5 de diciembre de 2012 al 4 de diciembre de 2018 y aseguró, sin especificar nombres, que ya cuenta con algunos miembros para su equipo de transición. “Hombres y mujeres, sobre todo con conocimientos técnico-operativos, que es lo que se requiere ahora”, dijo. Congruente, admitió que gobernará para todos y no pagará cuotas a los partidos que lo llevaron al cargo. Sin impugnaciones en contra y con más de 63% de la votación, el ex procurador capitalino señaló que por el momento no piensa afiliarse a ningún partido político. Lo suyo será mejorar el DF.
III. La iniciativa de Ley de Contabilidad Gubernamental que envío el Presidente al Congreso no tendrá dificultades para su aprobación por los diputados, según expresó el coordinador de la diputación priista, Manlio Fabio Beltrones, confiado en que con esta nueva ley los tres órdenes de gobierno tendrán que someterse a una mayor fiscalización y de esta forma asestar un golpe a los malos manejos de recursos. Contribuirá, dijo convencido, a eliminar y sancionar la corrupción y a regular el endeudamiento público de las entidades federativas y municipales. Algunos gobernadores ya levantaron la ceja.
IV. Fue la Sedena la que desaconsejó a funcionarios del gobierno federal y local a que asistieran a los funerales de José Eduardo Moreira Rodríguez, hijo del ex gobernador de Coahuila. ¿La razón? No existían las condiciones necesarias de seguridad. Ello explica que el actual mandatario estatal, Rubén Moreira, tío de la víctima, y el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, no acompañaran al ex presidente nacional del PRI a los diversos actos luctuosos. Las otras explicaciones sólo son especulación.
V. Tomás Ruiz, ex director del SAT y de Banobras, ex dirigente del Panal y ahora secretario de Finanzas de Veracruz, está perfilado para ocupar la dirección general del ISSSTE, al empezar el nuevo gobierno. La posición, dicen fuentes de primer nivel, la ha buscado Elba Esther Gordillo, y una de las labores del nuevo funcionario sería revisar con lupa a las anteriores administraciones, entre ellas las de Miguel Ángel Yunes Linares y la de Jesús Villalobos López.
VI. La Secretaría de la Marina Armada de México presentó a Salvador Alfonso Martínez Escobedo o Carlos García, identificado como La Ardilla. Una fichita. Es presunto responsable de la matanza de 72 migrantes indocumentados en agosto de 2010 en San Fernando, Tamaulipas, y el cerebro de recientes fugas de reclusos, entre ellas la del penal de Piedras Negras, donde escaparon 131 internos y que constituyó la segunda más numerosa en la historia carcelaria del país. Este individuo tuvo un vertiginoso ascenso dentro de la estructura de Los Zetas y, durante su presentación, como otros sicarios atrapados, se burló ante las cámaras, balbuceó en contra de sus captores e hizo gestos de prepotencia. Le achacan a él solo, más de 50 muertes. Lo que se llama un mexicano indeseable.
Ventana
¿Gobierno a cirugía?
José Cárdenas
EXCÉLSIOR
Según los “grillos” dizque enterados, la Secretaría de Seguridad Pública federal tiene los días contados.
Peña Nieto prepara el bisturí. Entre gira y gira, el Presidente electo afina los detalles del nuevo gobierno federal.
Si el PAN marcó su llegada con la creación de algunas carteras, el fortalecimiento de otras y el adelgazamiento de varias más, el PRI no se quedaría corto. Un gobierno distinto no puede operar con las mismas estructuras… ni con las mismas mañas.
La iniciativa para crear la Comisión Nacional Anticorrupción es el primer paso. La nueva superdependencia le amarraría las manos a todos los funcionarios de la administración pública… –¿Y, de paso, sepultaría a la Secretaría de la Función Pública, creada por Vicente Fox hace diez años?
Según los “grillos” dizque enterados, la otra creación del panismo que tiene los días contados sería la Secretaría de Seguridad Pública federal. La independencia y el poder absoluto otorgados a Genaro García Luna por el presidente Calderón no caben en el estilo priista. La mayor estructura policiaca del país quedaría bajo el control de la Secretaría de Gobernación, que al parecer retomaría las glorias de antaño.
Peña Nieto devolvería al Palacio de Cobián el brillo y esplendor que le escatimaron las dos administraciones panistas. Gobernación sobrevivió en la anemia desde el adelgazamiento de su estructura de inteligencia… y la amputación de sus funciones de interlocución con las demás fuerzas políticas. Tal poder quedó concentrado en la Oficina de la Presidencia que, por cierto, volvería a renacer con el rango de Secretaría de Estado, ¿como en los tiempos de Luis Echeverría?
-¿Será demasiada imaginación?
Luis Videgaray, coordinador del equipo de transición del Presidente electo, desmintió que haya planes de crear cinco secretarías de Estado, como se ha venido especulando. “La creación de dependencias como Telecomunicaciones, Infraestructura y Transporte, Pesca, Asuntos Agropecuarios, y de la Mujer, son rumores sin sustento” —afirmó hace unos días—.
En la más estrecha cercanía con Peña Nieto, Luis Videgaray sabrá muy bien lo que dice y por qué lo dice, en su calidad de comandante en jefe del equipo de transición… y quien seguramente ocupará una posición clave en el “gabinete” —no necesariamente en donde muchos ya lo ubican—.
Mientras, en el Congreso dan por hecho una reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal… y será el diputado Manlio Fabio Beltrones el encargado de negociarla, antes del primero de diciembre.
–¿Eso habrán tratado los presidentes, saliente y entrante, en su quinto cónclave en Los Pinos?
Más allá de sorpresas, la nueva administración se prepara para no dejar dudas de su origen… y para funcionar como un gobierno priista, primero tiene que parecerlo.
MONJE LOCO: ¿Ahora resulta que a la activista Marisela Escobedo la mataron dos veces? La Procuraduría de Chihuahua presume la detención de José Enrique Jiménez Zavala, alias Wicked (malvado, perverso, en inglés), quien confesó haber cometido el crimen por acuerdo de las organizaciones delictivas La Línea y Los Zetas… pero hace diez meses, días antes del primer aniversario del homicidio, la misma fiscalía chihuahuense informó que Héctor Miguel Flores Morán, alias Payaso, había sido el autor material… y que está demasiado muerto para contradecir a la autoridad. O fue uno o es el otro. No pueden ser los dos. ¿La primera acusación contra alias Payaso demuestra que la autoridad de Chihuahua actuó con prisa para sacudirse —a como diera lugar— el escándalo que manchó el inicio del sexenio del gobernador César Duarte? Piensa mal… a falta de certezas, dudas.
Campos Elíseos
Las sorpresas de la transición
Katia D’Artigues
EL UNIVERSAL
Cassez, Francia y EPN
Pese a que le toca entregar el poder al PRI, un partido que ha combatido toda su vida, el presidente Felipe Calderón está dejando claro que institucionalmente hará todo lo posible para que la larga transición del poder sea lo mejor posible. Ésa ha sido la instrucción para todo su equipo que a su vez ha permeado hasta abajo: hay que dar toda la información necesaria, aclarar cualquier duda.
También está siendo una transición verde, por así decirlo, dado que la información que le están pasando al equipo de transición la mayoría se les entrega de manera electrónica, casi siempre en USB y correos electrónicos de seguimiento.
Y él mismo pone el ejemplo: ayer fue la cuarta vez que se reunió personalmente con el presidente electo, Enrique Peña Nieto. Y estuvieron juntos nada menos que cuatro horas.
Es curioso compararla con la de hace seis años entre presidentes del mismo partido. No fue así en absoluto. Los Fox-Sahagún disfrutaron… digo, esperaron hasta el último minuto de su sexenio para desalojar, por ejemplo, Los Pinos.
Es más, el equipo de Calderón buena onda se vio al ayudarles a los colaboradores del foxismo a empacar y sacarles sus cosas al siguiente día de la toma de posesión (aunque los foxistas no lo hayan tomado así).
Pero sin duda uno de los temas que más preocupan es, claro, el de seguridad.
Hace seis años fue durante la transición cuando Calderón se dio cuenta de que el problema era mucho más grave del que se sabía y casi al inicio de su sexenio, en Michoacán, declaró la guerra contra el narco, luego le llamó lucha contra la delincuencia.
Por eso me sigue llamando mucho la atención la respuesta queme dio Miguel Ángel Osorio Chong, el encargado de Política y Seguridad del equipo de transición, cuando hace unos días le pregunté que si se estaban encontrando sorpresas. Esto dijo:
— Estamos viendo que la realidad, eh, incluso rebasa lo que luego se ve en los medios de comunicación. La información es grave por estado, por región, entonces….
— ¿Más grave de lo que pensabas?
— Sí, por supuesto que sí. Entonces, si estamos con un diagnóstico en primer lugar, luego para poder proponer qué es lo que vamos hacer en este tema y en el tema también de política.
Glup. Más grave de lo que se ve en los medios de comunicación, dijo. Y yo me quedé girando en un talón.
Procedente de París, hace unos días llegó un paquete con algunos obsequios a la celda de Florece Cassez, detenida en nuestro país, ya juzgada y sentenciada por pertenecer a la banda de secuestradores de “Los Zodiaco”, y cuyo caso está ahora entre los pendientes a resolver por la ministra Olga Sánchez Cordero.
De acuerdo con la información publicada por periódicos franceses, los regalos son chocolates, cosméticos y libros enviados por Valérie Trierweiler, pareja sentimental del presidente galo François Hollande.
Veremos qué pasa con el caso por estos días, cuando el presidente electo visite Francia los próximos 17 y 18 de octubre… Recuerde que aunque Cassez fue ya encontrada culpable y sentenciada en México, está pendiente que la ministra Olga Sánchez Cordero presente un nuevo dictamen que podría pedir que su pena se revisara —¿incluso que se anulara?— por la violación a los derechos humanos durante su proceso de detención, el famoso debido proceso.
Es un tema pendiente que —me dicen— no será desahogado pronto en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Antes, en la primera sala, deberán resolver y debatir casos pendientes acerca de fuero militar y temas indígenas.
A eso hay que sumarle que para el 30 de noviembre tendrán que ser relevados dos ministros: Sergio Salvador Aguirre Anguiano y Guillermo Ortiz Mayagoitia. Para muchos podría ser una buena señal. Falta ver qué tan progres resultan las propuestas que enviará el presidente Calderón antes de que finalice su administración. O si una será suya y otra del presidente Peña Nieto.
Será hasta dentro de dos sexenios, en el 2024, es decir al pasar la administración de Enrique Peña Nieto y la de quien gane en el 2018, cuando sepamos qué fue lo sucedido en el enfrentamiento de Tres Marías, donde fue atacada una camioneta de la embajada de Estados Unidos, presuntamente por elementos de la Policía Federal.
Sucede que la Secretaría de Relaciones Exteriores decidió reservar la información de los agentes estadounidenses adscritos a nuestro país, y la lo relacionado con estos hechos registrados en agosto pasado.
Algo sucede en Chihuahua. Este fin de semana, el lamentable asesinato de Marisela Escobedo nuevamente fue noticia. Las autoridades presentaron a un nuevo asesino material. ¿Cuántos van? Se lo digo en la edición online de esta columna.
Además encuentros y distanciamientos en la ceremonia de Miguel Ángel Mancera, los “elefantes blancos” en Jalisco, entre otras cosas.
Horizonte político
PRIAN versus PRI-RD
José Antonio Crespo
EL UNIVERSAL
El vocablo PRIAN fue acuñado por Andrés Manuel López Obrador, sugiriendo que el PRI y el PAN en realidad representan lo mismo en la vida política nacional, que son dos partidos de derecha que sirven a los intereses de la mafia del poder, y son intercambiables. Las cosas, sin embargo, son algo más complejas. Resulta que el PRI no es un partido homogéneo de derecha, sino que en él conviven al menos dos grandes corrientes ideológicas; el nacionalismo revolucionario y el neoliberalismo tecnocrático.
Recordemos que al ser partido hegemónico, el PRI recibió todas las corrientes ideológicas y políticas, de izquierda, centro y derecha, dejando afuera solamente las más extremas; los bolcheviques a la izquierda, y la “reacción” a la derecha. Dentro del PRI se dio lo que muchos teóricos llamaron la “teoría del péndulo”, según la cual los grupos de izquierda y derecha dentro del partido se alternaban el poder de un sexenio a otro.
Así, del radicalismo de Cárdenas se pasó al centro de Ávila Camacho (en lugar de seguir con Mújica Montoya, heredero ideológico del general) y de ahí a la derecha con Miguel Alemán. Siguió el centrista Ruiz Cortínez y luego el izquierdista “dentro de la Constitución”, López Mateos. El Péndulo volvió a irse a la derecha con Díaz Ordaz, y de ahí a la izquierda populista con Echeverría y López Portillo. Cuando el péndulo llegó a la derecha neoliberal con Miguel de la Madrid, ya no regresó al campo de la izquierda; se quedó atorado en el espacio de la derecha, con Salinas de Gortari, primero, y Ernesto Zedillo, más tarde.
Cuando todo ello se vislumbraba en 1986, una parte del priismo nacionalista revolucionario provocó una ruptura histórica dentro del partido. En aquellos años, antes de que se conociera al destapado (es decir, Salinas de Gortari) conocí a Porfirio Muñoz Ledo, y le pregunté sobre los rumores de ruptura de la Corriente Democrática. Me respondió que eso dependía de quien fuera el candidato; si fuera alguno identificado con el nacionalismo revolucionario (mencionó a Sergio García Ramírez, Alfredo del Mazo e incluso a Manuel Bartlett) no habría ruptura (pues se habría respetado el movimiento pendular, agrego yo).
Pero al quedarse con Salinas como candidato, era claro que había la intención de mantener el péndulo de aquel lado. Sin embargo, con la salida de Cuauhtémoc Cárdenas y el propio Muñoz Ledo, no salió toda la corriente nacionalista revolucionaria para engrosar las filas del PRD, sino que se quedó dentro del PRI. Sólo cuando a algún priista de esa corriente se le acaba el gas dentro del PRI, opta por irse al PRD (o alguno de sus partidos aliados).
Muchos nombres vienen a la mente. Sin embargo, los nacionalistas revolucionarios que siguen teniendo aire dentro del PRI, ahí continúan hasta nuevo aviso. Pero guardan coincidencia ideológica con quienes ya emigraron a la izquierda. Los nacionalistas revolucionarios del PRI y del PRD han coincidido en el Congreso para detener, en lo posible, los intentos “antipatriotas” y “entreguistas” de los neoliberales del PRI y sus aliados del PAN. De ahí que, si es posible hablar de la existencia del PRIAN, también lo es legítimamente referirnos al PRI-RD (léase, Priredé).
Cierto es que desde 1989 se han dado ocasionalmente ciertas alianzas entre el PAN y el ala neoliberal para impulsar algunas reformas en las que coinciden. Pero igualmente cierto es que desde esos mismos años, la izquierda nacionalista del PRI se vincula al PRD para defender “los logros y las conquistas de la Revolución” frente al embate neoliberal.
Y de hecho, han logrado detener o desvirtuar buena parte de esas reformas; ocurrió en 2003 con la reforma fiscal de Vicente Fox (pese a contar con el respaldo del PRI neoliberal); lo mismo con la reforma energética de Felipe Calderón en 2008 (que quedó irreconocible y por ende, inútil en sus propósitos originales).
Vuelve a ocurrir parcialmente ahora con la reforma laboral en la Cámara Baja; una parte la logró sacar adelante el PRIAN (la relativa a la flexibilización de condiciones laborales de contratación, despido y salarios caídos), pero la parte política, relativa a la transparencia y democratización de los sindicatos fue detenida por el PRI-RD (por voto o por omisión).
Y es que la parte más añeja de la izquierda –normalmente identificada con el obradorismo– tiene también vínculos con líderes charros y organizaciones corporativas y clientelares, cuyos intereses defiende. Veremos lo que sigue en el Senado, y qué alianza logra imponerse (también esta la alianza potencial del PRD institucional con el PAN en temas políticos).
Jaque Mate
Chávez triunfa
Sergio Sarmiento
ZOCALO SALTILLO
Si ha habido una elección injusta en América Latina en los últimos tiempos no ha sido la de México sino la de Venezuela. El presidente Hugo Chávez utilizó constantemente los medios electrónicos, que se enlazaban a través de cadenas nacionales, para promoverse. La enorme mayoría de los canales de radio y televisión, que están bajo control absoluto de Chávez, ya que éste ha expropiado aquellos que no estaban de acuerdo con sus políticas, dedicaban buena parte de su tiempo a alabar al presidente y a cuestionar al candidato de la oposición, Henrique Capriles. Chávez utilizó sin remilgos el gasto público para promover su candidatura. Sus incondicionales lanzaron amenazas, veladas o no, en contra de quienes pudieran considerar la posibilidad de votar por la oposición.
Una vez que se emitieron los votos, sin embargo, Capriles reconoció el resultado. La diferencia era enorme: De 10 puntos porcentuales. Pudo el candidato de oposición haber reclamado la existencia de un complot en su contra, y vaya que tenía pruebas, pero aceptó el resultado de la elección muy poco después de que cerraron las casillas electorales.
De hecho, Hugo Chávez ha demostrado que se puede tomar el control de un país de manera democrática y mantenerlo de manera indefinida volviéndolo cada vez más personal. Chávez está a punto de cumplir 14 años en el poder. Su reelección le garantiza la silla presidencial otros seis años, con lo cual llegará a 20 en 2019. Pero él mismo ha señalado que su intención es permanecer en la presidencia de Venezuela de manera vitalicia.
Chávez ha hecho cambios en la Constitución y en las leyes para garantizar su permanencia en el poder, deshacerse de las voces críticas y desmantelar el sistema de libre competencia en la economía. Ha contado con un aliado enorme en los altos precios del petróleo, que durante años le han permitido pagar o compensar todos sus excesos. No se puede negar, sin embargo, que su populismo con dinero le ha permitido ganarse el apoyo de una parte importante de la población venezolana, el 54 por ciento según el resultado de la elección del 7 de octubre. Lo sorprendente es que en estas circunstancias haya habido un 44 por ciento que se haya atrevido a sufragar en su contra.
No debe sorprender que los caciques populistas hayan sido una parte habitual del paisaje político latinoamericano a lo largo de siglos. La fórmula que estos personajes ofrecen es muy atractiva: Gobierno fuerte y generosidad del Estado.
Los costos de largo plazo usualmente no se notan, especialmente cuando, como es el caso de Chávez, una bonanza en el precio de una materia prima llena las arcas gubernamentales sin necesidad de realizar algún esfuerzo.
La experiencia nos dice, sin embargo, que tarde o temprano Venezuela tendrá que pagar el costo del despilfarro y de haber ahuyentado en gran medida a la inversión productiva. De hecho, a pesar de los recursos petroleros Venezuela sufre ya apagones eléctricos, una alta inflación, enorme violencia criminal y escasez de una gran variedad de productos de todo tipo, incluso los básicos que el Estado custodia de manera prioritaria.
Los caciques populistas no se preocupan por estas situaciones porque siempre piensan que las cosas pueden arreglarse por un nuevo decreto. Y quizá esto funcione en un principio: Cuando los productores o importadores de alimentos, por ejemplo, aceptan echar para atrás algún alza de precios ante el temor de enfrentar multas o cárcel. Pero como estas medidas también inhiben la inversión productiva, es sólo cuestión de tiempo para que la escasez se vuelva imposible de resolver. Es una regla del mercado que tarde o temprano se impone, aunque los caciques populistas no crean en los mercados.
TEMAS FALTANTES
Reintroducir los temas de democracia sindical y rendición de cuentas en el Senado probablemente haría que los líderes sindicales priístas trataran de aliarse con la izquierda para frenar toda la reforma.
Cristalazo
El caldero de las vanidades
Rafael Cardona
CRÓNICA
El circo, es todo lo demás, incluidos los discursos políticos, las albercas de la Semana Santa o los conciertos de Gloria Trevi o Shakira en el Zócalo.
Cuando el Presidente electo, Enrique Peña, divulgó los nombres de quienes integran su equipo de transición; uno de los primeros señalamientos, especialmente desde las tribunas de los “exquisitos” (así se les llama a los “presupuestívoros” de la cultura), fue la ausencia de una persona para encargarse de los asuntos de la creación, de las artes, de la historia; del escenario y la biblioteca, la galería, el concierto, la orquesta y la coreografía, la danza y todo lo demás.
Pasaron varias semanas y ahora se ha dado a conocer el nombre de María Cristina García Cepeda, a quien la mayoría conoce sólo por su buen desempeño al frente del Auditorio Nacional, esa sede mayor en la cual conviven, por extraña mezcla, el ballet Kirov y los discursos de Andrés Manuel; las noches de apoteosis de Luis Miguel o Juan Manuel Serrat y los actos de campaña de Felipe Calderón.
Pero García Cepeda es una mujer con trayectoria en estos afanes de la llamada promoción de la cultura; administración cultural; promoción estatal de la cultura; burocracia para el financiamiento, control y administración de los grupos, grupitos y grupúsculos; capillas, capillitas y capillotas; mafias, mafiecitas, similares y conexos, o simplemente circo para el pan.
Y aquí “pan” no son las iniciales de un desastroso partido en retirada. No. Es la sinécdoque de la elemental satisfacción de necesidades primarias. El circo, es todo lo demás, incluidos los discursos políticos, las albercas de la Semana Santa o los conciertos de Gloria Trevi o Shakira en el Zócalo.
La señora García Cepeda ha sido otras muchas cosas importantes para el fin al cual fue llamada por el Presidente electo en medio de una buena acogida en términos generales. Obviamente los intelectuales orgánicos o simpatizantes de la izquierda feroz, la vieron con recelo o con abierto rechazo, como fue el caso de PITaibo II cuya opinión, por previsible, ya se daba por descontada.
La señora García –quien hoy cuenta, dicho sea de paso con el auxilio de Francisco Serrano—, ha sido secretaria técnica del Conaculta (1994-2000); secretaria ejecutiva del Fonca (1991-1994); directora general del Festival Internacional Cervantino (1988-1990); directora de Fomento Cultural y Relaciones Internacionales del CREA (1986-1987); y directora de la Unidad de Divulgación de la Cultura de la Subsecretaría de Cultura, SEP (1983-1985).
Como se ve a lo largo de todos estos años ha aprendido muchas cosas, entre ellas la más importante: manejar la caldera de las vanidades. Eso y nada más es la mal llamada “comunidad cultural” mexicana (y perdón por alterar el título de Tom Wolfe): un serpentario donde la mediocridad se disfraza e infla con el ropaje de los mutuos halagos y la política, de tantos años, del si me lees te leo; si me alabas te alabo; si me loas te doy una beca, si me aplaudes te consigo una edición, etc. En fin.
Por eso, las primeras declaraciones de CGC son cautas y neutras:
“Atender el proceso de transición administrativa de las entidades que conforman el Conaculta (Exol); buscar puntos de convergencia entre las diversas opiniones de la comunidad artística y cultural…darle cabida a quienes tengan algo qué proponer en beneficio de todos… conocer objetivamente la realidad operativa de las instituciones culturales del gobierno federal, sus fortalezas y sus debilidades… (trabajar) con una gran agilidad y un gran sentido de continuidad… (para) establecer prioridades que definan los lineamientos de la política pública en materia de cultura para desarrollarse durante los próximos seis años”.
Tras la cautela se advierte —para usar una expresión cara al teatro— cuántas “tablas” tiene la señora. Ni una palabra de más; ni una palabra de menos.
Y casualmente, el mismo día del nombramiento de CGC, recibo una carta de Consuelo Sáizar, actual presidenta del Conaculta, con los datos relativos al “Proyecto Cultural del Siglo XXI Mexicano. 2006-2012 “, en cuyo enunciado un siglo se convierte en un sexenio. Pero eso es “peccata minuta”.
En el resumen engargolado y la carta de presentación se advierten los notables aumentos presupuestales y la mejoría indiscutible en todas las áreas. Por ejemplo, Cultura creció de 6 mil a 15 mil millones; Imcine aumentó su disponibilidad de 539 millones a mil 261y el campo de las bibliotecas tuvo un sensible crecimiento cuya importancia no se mide sólo en pesos, sino en lectores. Bueno eso cuando estén terminadas las insuperables instalaciones de “La ciudad de los libros”, como se ha llamado a la recuperación y total aprovechamiento de la Ciudadela.
Pero, como sea, el rescate de las bibliotecas de los grandes maestros desaparecidos (Castro Leal, Chumacero, Martínez, García Terrés y Monsiváis) significa en verdad la hazaña cultural del sexenio. Sobre todo si se le compara con el elefante blanco de Buenavista, tan caro y tan faraónicamente estéril.
Yo ignoro si Cristina García va a ser la sucesora de Consuelo, cuyo trabajo ha sido magnífico a pesar de las burocracias internas y las mafias externas. Eso nada más lo sabe Enrique Peña.
Pero tengo una certeza: “Maraki” no presentaría a Jorge Luis Borges como autor de “La marioneta”.
SENADO
Si usted sabe leer entre líneas le regalo éstas divulgadas por el Senado:
“Con la misma responsabilidad con la cual se analizó, discutió y votó la Ley General de Contabilidad Gubernamental, el Grupo Parlamentario del PRI en el Senado de la República revisará la reforma a la Ley Federal del Trabajo que envío el Ejecutivo al Congreso, por eso Emilio Gamboa, líder de los senadores priistas, confía en que se logren los consensos y acuerdos necesarios para su aprobación”.
Conste, para su aprobación. No otra cosa.
Astillero
• Abonar la incertidumbre
• Convocar, cancelar
• Historias narkafkianas
• Policías: Coahuila, DF
Julio Hernández López
El proceso de transferencia del Poder Ejecutivo federal ha pretendido ser de terciopelo a pesar de que los dos concurrentes llevan prendas muy ajadas y ríspidas. Para dar prueba formal de esa peculiar concordancia operativa, el saliente y el entrante han participado en reuniones con sus equipos para atender segmentos específicos de la función gubernamental.
La sesión de ayer, sin embargo, tuvo un desenlace público desafortunado y preocupante. Luego de cuatro horas de reunión, el actual ocupante de Los Pinos dio por cancelada una conferencia de prensa a la que había convocado, supuestamente para informar de lo que en sesión privada se hubiera tratado.
Una primera suposición razonable hace pensar en desacuerdos en las alturas. Tal vez Calderón llamó a esa rueda de prensa como si el poder le siguiera siendo absoluto, sin consultar al priísta que, en todo caso, creyó conveniente no realizar tal sesión, en una prueba de que ya se siente en pleno control del mando que formalmente aún no le pertenece.
Pero también podría estarse en presencia de diferendos mayores. Más allá de la coincidencia electoral pactada para sacar adelante al mexiquense, hoy están en el escenario nacional graves hechos relacionados con la inseguridad pública frente a los cuales las posturas e intereses de EPN y de Calderón parecen contraponerse con fuerza. También están en cartera los grandes negocios del sexenio por venir, en especial el relacionado con los energéticos.
Haiga sido lo que haiga sido, en momentos de tanta oscuridad y confusión es imprescindible un máximo cuidado de quienes ejercen a cualquier título el poder, para no fomentar especulaciones ni dar pie a lecturas equivocadas.
El priísta que gobierna Chihuahua es César Duarte Jáquez. Y el motivo de su máximo orgullo político es que, según reporta con insistencia, ha disminuido notablemente el índice delictivo en aquella norteña entidad. Las estadísticas alegres suelen toparse con impugnaciones provenientes de organizaciones no gubernamentales y de defensores de derechos humanos. Por ejemplo, en el caso de los asesinatos de mujeres, aseguran que han crecido un mil por ciento en los cinco años recientes (dos de los cuales han correspondido al mando de Duarte) y que, según denuncia presentada ante las Naciones Unidas, forman parte del paquete habitual de escamoteo de información real que practica esa administración chihuahuense.
El déficit de credibilidad de Duarte Jáquez ha sido exhibido de nueva cuenta en el caso de la detención de un tercer presunto responsable del homicidio cometido en contra de Marisela Escobedo, quien fue ultimada afuera del Palacio de Gobierno de Chihuahua, donde estaba en demanda de justicia porque su hija, Rubí Marisol Frayre Escobedo, a su vez había sido asesinada sin que luego hubiera justicia alguna. Luz Estela Castro, quien forma parte del Centro de Derechos de las Mujeres, y se encarga jurídicamente del caso de Marisela, aseguró ayer que luego del ataque contra ésta “el fiscal Salas declaró públicamente que el asesino era Sergio Rafael Barraza; posteriormente, el 15 de diciembre de 2011, Carlos González, que es el vocero de la Fiscalía, declaró que Héctor Manuel Flores Morán era el autor material del feminicidio”. Ahora el gobernador Duarte en persona asegura que el verdadero asesino es José Enrique Jiménez Zavala.
Las historias narkafkianas de México impiden creer en las alocuciones oficiales. El primer acusado de asesinar a Marisela Escobedo fue Sergio Rafael Barraza, quien era pareja sentimental de Rubí Marisol. Luego de denunciar en 2009 la desaparición de su hija, Marisela localizó en Zacatecas a Barraza y logró que lo aprehendieran. Sujeto al nuevo sistema de juicios orales, y luego de un año en prisión durante el proceso judicial, el presunto asesino (quien había confesado el crimen aunque esas palabras no fueron incorporadas al procedimiento recién estrenado, según denuncia de Escobedo y otros familiares) fue declarado inocente en 2010 por tres jueces. En junio de 2011, sin embargo, la Procuraduría General de la República ofrecía cinco millones de pesos a quien ayudara a capturar al mismo Barraza, por el caso de la menor Rubí Marisol, y de tres millones por quien hubiera sido el asesino de la madre, Marisela Escobedo (aunque, según la versión del gobierno de Chihuahua, el primer sospechoso del crimen contra Marisela era el mismo Barraza).
Tan carcomida está la plataforma de sustento de las operaciones policiacas en estados y municipios que los presidentes municipales y gobernadores suelen ser rehenes de esas fuerzas desbordadas (fenómeno similar a lo que se vive en el plano federal: Genaro García Luna y los jefes marinos y militares construyen los escenarios sobre los que luego se monta sólo declarativamente el presunto comandante supremo). En Coahuila, por ejemplo, el drama de la familia Moreira tuvo como ejecutores directos, según las primeras versiones oficiales, a miembros y jefes de la policía de Ciudad Acuña, entregada como casi todas en casi todos los lugares del país a los arreglos económicos con jefes de cárteles que compran protección o insertan balas, según la elección del jefe o el agente involucrados.
En la capital del país, mientras tanto, Miguel Ángel Mancera dice que ha ganado con todas las de la ley la gubernatura del Distrito Federal de la que ayer le entregaron constancia de electo. Es inevitable pensar en dos planos de esa legalidad a plenitud: la electoral, en la que no hubo alegatos importantes contra la manera como la izquierda preservó el poder en la ciudad de México, y la específicamente operativa, la discrecional y corruptible legalidad administrativa en materia de procuración de justicia que se vive en esa capital y por encima de la cual Mancera logró tejer una insólita posibilidad electoral ahora triunfante.
Y, mientras Barack Obama rinde en Los Ángeles un homenaje (con evidentes visos electorales) a la tenacidad de César Chávez, el difunto líder sindical al que México no ha dado el reconocimiento que merece, ¡hasta mañana!