Demasiado tarde llegó la inspiración a la Selección de España en la Copa del Mundo. La goleada de esta tarde sobre Australia no sirvió de nada para la escuadra que dejó vacante el trono la semana pasada, más que para despedirse con tantita dignidad de la competencia a la que llegó como una de las favoritas para levantar el título.
La inspiración la puso el asturiano David Villa, quien a pesar de su historia con la “Furia Roja”, tuvo que aguantar en la banca los dos primeros partidos, viendo desde afuera de la línea de cal como su equipo era eliminado tras caer 5-1 ante Holanda y 2-0 contra el equipo chileno.
Hoy al “Guaje” le bastaron algunos minutos para poner a trabajar a la defensa australiana y hacer sentir su presencia en la cancha. El atacante le cambió la cara al ataque del conjunto europeo y fue el artífice del primero de los tres goles con los que se llevaron los tres puntos de la Arena de Baixada en Curitiba.
Un golazo el que marcó Villa al minuto 35, precedido de una buena jugada por la banda derecha. Juanfran desbordó a su marca y mandó un centro raso al que llegó David para mandar el esférico al fondo con un remate elegante de “taquito”.
El último que hizo con la camiseta de España, ya que el delantero salió de cambio entre lágrimas en la parte complementaria, terminado una carrera exitosa con la Selección Española.
Australia intentó por todos los medios responder para no irse de tierras mundialistas sin ningún punto, y aunque tuvo un par de llegadas con cierto peligro, no pudo pasar a la zaga española que hoy mostró su mejor cara con Albil y Ramos en el central, acompañados por Juanfran y Jordi Alba por las bandas.
Al minuto 68 Fernando Torres le dio tranquilidad al cuadro dirigido por Vicente del Bosque. El “Niño” recibió un pase filtrado de Andrés Iniesta dentro del área, controló la pelota, se enfiló a la portería y con un toque por el lado del portero rival puso el segundo tanto en el marcador.
Eso le bastó a la “Furia” para encaminarse al triunfo y comenzar a decir adiós a Brasil. Sin embargo, todavía al minuto 82 Juan Mata incrementó la ventaja cuando los australianos ya se habían entregado en la cancha.
El mediocampista del Manchester United apareció solo dentro del área e hizo el 3-0 con el que el Campeón del Mundo en Sudáfrica 2010 cerró uno de sus pasajes más desastrosos y se despidió de tierras mundialistas con las manos vacías y entre muchas dudas sobre el fin de su época dorada, en la cual pudo conquistar dos Eurocopas y una Copa del Mundo.