Los cambios le funcionaron a Holanda. El cuadro de Louis Van Gaal apeló a los suplentes y a la siempre confiable velocidad de Robben para vencer 2-0 a Chile, ganar sus tres partidos de primera ronda y avanzar a Octavos de Final con marca perfecta.
A falta de 15 minutos y cuando tulipanes y andinos parecían “amarrar” el empate. El estratega holandés metió “hambre” a la cancha. Depay sustituyó a Lens como eje de ataque y provocó el tiro de esquina con el que Fer, quien entró por Sneijder, metió el cabezazo para mostrar el camino del triunfo.
Holanda se sintió más cómoda sin la pelota. Lo demostró ante España con los latigazos a Robben y Van Persie y lo confirmó ante Chile aún en la ausencia del delantero del Manchester United.
Van Gaal paró bien a su engañosa línea de cinco defensas que tuvo un centro delantero como carrilero y a un volante como central por izquierda. Precisión y toque para los trazos largos.
Chile entonces no renunció a la pelota. Más allá de saber que la diferencia de goles le daba el primer lugar del Grupo B a los tulipanes, el equipo de Sampaoli tomó el esférico, fue al frente, pero con la timidez de saberse calificado y ante el peligro latente que significaba Robben y su velocidad.
La pelota parada fue la mejor aliada de Chile en el primer tiempo y su mortífero en el segundo. Gutiérrez con una media vuelta tras un tiro de esquina y el mismo jugador con una peinada apenas abierta de la portería de Cillessen tras un tiro libre, fueron sus opciones de gol.
Holanda respondió de forma similar con un centro cerrado de Sneijder que De Vrij raspó con la cabeza y se fue abierto, pero con la primera embestida de Robben que tomó la pelota en media cancha, hizo una diagonal por todo el mediocampo de Chile y al meterse al área sacó un tiro raso, cruzado, que sólo arrancó aplausos de la tribuna reconociendo el esfuerzo del holandés.
Pasado el minuto 60 ambos equipos parecían conformes con el empate salvo sus dos estrellas, Alexis que con un túnel intentó desestabilizar el partido y Robben que con su velocidad le alcanzó para meter un disparo que Bravo atajó bien.
Vinieron los cambios. Van Gaal con lo dicho y Sampaoli mostró ligeras intenciones de ganar el juego con el ingreso de Valdivia, quien se equivocó para el segundo gol tulipán.
El del Palmeiras perdió la pelota, De Jong metió el trazo largo a Robben, quien fue hasta línea de fondo esperando la llegada de Depay para que el del PSV simplemente empujara la pelota y sentenciara el marcador.
De los males el menor para Chile. Los andinos no se desgastarán con un viaje para jugar Octavos, pues lo harán en Belo Horizonte, ciudad cercana a donde tienen su cuartel; mientras, Holanda deberá sacar boletos de avión a la húmeda y calurosa Fortaleza.