Un sector de la sociedad n nacional, acaso la más sensible por carecer, por las razones que sean,  de estudios escolares, de escolaridad, de formación académica, de  años de estudios o porque sus condiciones, sus circunstancias familiares, personales no les permitieron ingresar como aprendices en algún trabajo u ocupación  y, obligado por las necesidades de sobrevivencia y subsistencia, a realizar actividades domésticas – por cierto, incluso, para ellas existían Centros de Enseñanza Ocupacional – CEO -,   como empleadas responsables de preparar alimentos, barrer, trapear, aspirar, lavar y planchar ropa, jardinería, choferes, mantenimiento, etc. – le llamaban servidumbre -, está desde siglos sin seguridad social, y si quiere para ser precisos, desde la creación del Instituto Mexicano del  Seguro Social – IMSS -, carecían de protección social – servicio médico, básicamente -, mas al actual  presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador tuvo como lema de campaña, la promesa de que si el voto le favorecía, les aseguró que habría la protección del Estado en el área de la protección social, ingresarían al IMSS como derecho habientes.

                El señor presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador,   instruyó al director del IMSS, Germán Martínez Cázares,  preparar lo necesario para que este grupo laboral – domésticos – se incorpore  y tenga la cobertura del IMSS. Todos   aplaudieron; muy seguramente porque es un acto de justicia, pero  esta medida, esta acción cambiará completamente muchas cosas:

                1° Difícilmente un hogar-centro de trabajo de Clase Media hacia abajo podrá pagar las cuotas mensuales o bimestrales del seguro social para que este tipo de trabajadoras-empleadas tenga la cobertura de la protección social.

                2° Tal vez, se produzca un efecto a la inversa, en lugar de ampliar la oferta de trabajo, se reduciría pues un porcentaje elevado – imposible cuantificarlo – no contrataría este tipo de empleados por los efectos inmediatos, primarios y secundarios por todos los efectos contractuales que conlleva.

                3° Acaso lo mejor hubiera sido  o por lo menos pilotear esta medida -: que trabajen bajo el régimen de salario mínimo, con tiempo laborable – medio tiempo, tiempo completo o por horas o por tiempo definido o por obra determinada – Así se vería cómo se comporta el mercado: los oferentes y los demandantes…

                4°.- Esta decisión generará mayores ingresos al IMSS, mas no mejora de servicios ni más instalaciones médico-hospitalarias-asistenciales, ni más plazas de trabajo d entro del IMSS.

                Esta medida presidencial   traerá consecuencias económico-laborales para toda la sociedad. Mas debió pensarse mejor, pues, finalmente, si de acuerdo con lo anunciado como política pública del sector salud,  habrá seguridad médica para todos, ¿para qué incluir un grupo de derechohabientes específicamente si puede incluirse en el universo del  servicio médico universal?