El Museo de Arte Kimbell en Fort Worth adquirió dos grandes esculturas mayas del siglo VII que pasarán a formar parte de su colección permanente.

Las obras, dos grandes incensarios, son descritas como unas de las más sofisticadas esculturas independientes usadas por los mayas en rituales y para venerar deidades.


Una curadora del museo, Jennifer Casler Price, dijo al periódico Fort Worth Star-Telegram que a las piezas de casi 1,22 metros de altura (casi 4 pies), provenientes de una región cercana al estado de Chiapas, en México, sólo les faltan algunos pedazos pequeños. Son muy pocos los incensarios de su tipo que quedan en la actualidad.

Oficiales del Museo Kimbell no revelaron el precio de las esculturas, que serán expuestas a fines de abril, pero expertos en arte contactados por el periódico el jueves valoraron cada una de ellas en más de un millón de dólares.